Las semillas son el sistema natural de reproducción de las plantas fanerógamas y su fin es la germinación. Para ello, la semilla debe encontrarse en presencia de factores como una temperatura adecuada, humedad y un medio ambiente gaseoso para su respiración. Si a ello sumamos un adecuado tratamiento de semillas, el éxito está garantizado.
Cuando hablamos de tratamiento de semillas, nos referimos a la utilización de uno o varios métodos de protección de cultivos amigables con el ambiente. Con ellos se pueden controlar problemas fitosanitarios (plagas y enfermedades) durante todo el proceso de germinación.
El tratamiento de semillas consiste en aplicar un ingrediente con cierta materia prima activa directamente sobre la semilla. Este producto forma una barrera protectora alrededor de ella que tras la siembra, una vez que haya emergido la raíz, la planta pueda absorber el producto y con ello se incremente la protección hasta sus hojas superiores.
El tratamiento de semillas se realiza con maquinaria especializada bajo condiciones cerradas y en ambientes controlados, evitando así posibles riesgos de deriva o contaminación de áreas no agrícolas circundantes.
Entre los distintos métodos de tratamientos de semillas se encuentran:
- El impregnado.- Normalmente aplicado el producto sobre las semillas de cereales, arroz, trigo… de forma convencional mediante máquinas mezcladoras simples.
- Con cubierta envolvente (también llamado método de incrustación).- Mediante la aplicación de una capa uniforme que no cambia significativamente la forma y peso de la semilla. Se suele aplicar en semillas hortícolas y se incorporan materias activas de insecticidas y fungicidas.
- El peletizado.- Aplicando en las semillas una capa que las cubre completamente modificando tanto su forma como peso, logrando así mejorar su manejo. Esta técnica va dirigida a corregir las formas de semillas irregulares como la remolacha para que puedan ser empleadas en sembradoras de precisión (mecanización).
- El peletizado y la cubierta.- En el que se combinan dos de los métodos antes descritos. La semilla primero se peletiza y seguidamente se le aplica una cubierta con otro producto.
- La envoltura multicapa.- Es el método más sofisticado y consiste en realizar aplicaciones sucesivas con varios productos hasta conseguir varias cubiertas con objetivos concretos. Por su coste sólo se viene a utilizar como tratamiento de semillas hortícolas de alto rendimiento.