Los semilleros caseros se realizan tanto para multiplicar plantas hortícolas para el huerto o plantas ornamentales para el jardín. En principio son fáciles de hacer y contamos que hoy en día disponemos de todo lo necesario para hacerlos en los centros de jardinería, floristerías, grandes superficies y tiendas especializadas.
Para realizar semilleros caseros necesitaremos sustratos adecuados como son los sustratos para semilleros, bandejas semillero o bandejas con alvéolos, etiquetas de plástico y rotuladores con tinta permanente… y por supuesto semillas de las variedades a cultivar.
Por supuesto, debemos de hacer los semilleros caseros en la época más adecuada para cada especie, además de tener en cuenta su ubicación y protección, especialmente durante el periodo más crítico que es el de la germinación.
Los datos más importantes y específicos vinculados con la especie o la variedad, normalmente los encontraremos en el sobre. Es muy importante que se respeten, sobre todo el calendario de siembra.
Para hacer el semillero casero utilizaremos una bandeja con o sin alvéolos según nos interese. En el caso de una bandeja simple, sembraremos a voleo la semilla. Y si es una bandeja de alvéolos, podremos sembrar una o varias semillas por alvéolo y obtener así plantitas individualizadas listas para plantar directamente al huerto o el jardín.
El método es llenar las bandejas con un sustrato adecuado. Este debe de ser turboso y ligeramente fertilizado. Lo compactaremos ligeramente sin presionar en exceso y lo regaremos para que esté bien húmedo. Depositaremos sobre él las semillas uniformemente repartidas y las cubriremos ligeramente con el mismo tipo de sustrato. Seguidamente lo regaremos de nuevo con cuidado para no desenterrar las semillas.
Y por último, cuidaremos que se mantenga la temperatura y humedad adecuada hasta que germinen las semillas. Si por alguna circunstancia se queda seco el sustrato… las semillas que tengan comenzado su fase de germinación… morirán y aunque reguemos de nuevo no sobrevivirán.
Durante los primeros días podemos cubrir el semillero casero para protegerlo del viento o exceso de luz, y en estas condiciones germinarán entre varios días a un mes según la especie o variedad.
Si se trata de un semillero sembrado a voleo, cuando las plantitas tengan de 4 a 6 hojas (unos 7 a 15 centímetros) ya podemos plantarlas con cuidado a una maceta mayor y seguir su cultivo. En el caso de ser bandejas de alvéolos, podemos esperar más tiempo, hasta que las plantitas tengan un buen cepellón.
En todos los caso, el sustrato indicado para la plantación será el correspondiente a la especie cultivada. Por ejemplo con los sustratos para plantas de interior, de exterior, universal, etc.
Como decimos, los semilleros caseros pueden realizarse de forma sencilla con grandes posibilidades de éxito.