Quien no se ha visto en la necesidad de recuperar plantas secas en alguna ocasión. Se ha llegado a este extremo o bien porque hemos pasado varios días fuera de casa, nos hemos distraído… la cuestión es que nos encontramos ante este problema y que de no poner una solución, estas plantas morirán irremediablemente.
Evidentemente, lo primero es no tener que llegar a recuperar plantas secas puesto que es un síntoma de que todo lo hemos hecho correctamente. Pero si se da el caso, debemos de actuar de la siguiente forma.
Lo primero es analizar la planta con detenimiento para actuar de la mejor forma posible. Por ejemplo tomemos un Ficus benjamina para concretar el método.
Lo normal es que muchas de sus hojas estén desprendidas de la planta y las demás lacias. El sustrato estará como contraído, seco, sin apenas peso y desprendido del perímetro de la maceta.
Si es así, procederemos a espolsar ligeramente la planta para eliminar las hojas secas y que se encuentren casi desprendidas.
Seguidamente sumergiremos la maceta en un barreño de mayor tamaño con agua sin abono. Nunca debemos abonar una planta cuando se encuentra seca. Dejaremos que la tierra se empape durante unos 10 minutos y vuelva a hincharse adecuadamente. Durante este proceso veremos que el sustrato vuelve a adquirir su volumen y peso normal. También podemos mojar por encima el resto de la planta para ayudar a su hidratación.
Retiraremos la planta del barreño o bañera con agua y la dejaremos escurrir un rato.
Si la planta se encontraba en una zona muy iluminada, la retiraremos de ella y la pondremos durante tres o cuatro días en otra algo más protegida, dándole tiempo a que se recupere su sistema radicular. Una vez que vemos que la turgencia de la planta ha vuelto, volveremos a colocarla en su lugar habitual.
Será normal que durante las dos o tres próximas semanas se caigan algunas hojas más, e incluso que se sequen algunas puntas de las ramas. Simplemente debemos analizar lo que va sucediendo y por supuesto, manteniendo la planta correctamente regada.
A partir de la segunda o tercera semana, procederemos a podar las ramas dañadas, aprovecharemos para darle una ligera poda de formación y comenzaremos con los abonados habituales. Sin olvidar que a lo mejor, dependiendo de la época del año, puede ser un buen momento para trasplantarla a una maceta mayor.
Y recordemos que para no tener que recuperar plantas secas, hay varios consejos como por ejemplo el instalar un riego automatizado (más o menos complejo según la necesidad), añadirle al sustrato un producto con polímeros hidroabsorbentes, etc.
Hola que tal, no se sí sea comentario, pero, quiero que me ayuden porfavor tengo un ficus benjamina exterior y unos latosos le quitaron parte de la cortesa y tiene una rama seca que ya no tiene hoja y el árbol está ralo o sea que no tiene mucha hoja y quiero saber si todavía se puede rescatar el árbol lleva así casi 6 años. Quiero que tenga muchísima hoja, para poderle hacer figura. Espero su respuesta. Muchas gracias por su atención.