El Pacto Verde Europeo es el gran acuerdo alcanzado por la Comisión Europea para conseguir el objetivo para el año 2050: que la Unión Europea sea climáticamente neutra.
Uno de los principales causantes del cambio climático es sin duda la emisión de gases de efecto invernadero, por lo que las medidas para dejar de lado estas prácticas es el punto central de este exigente acuerdo.
El Pacto Verde Europeo a través del Mecanismo para una Transición Justa (MTJ), financiará las regiones, industrias y trabajadores que tengan más dificultades para no dejar a ningún país atrás.
La transición de una Europa actual hacia una Unión Europea más saludable y sostenible ya está en marcha. Son muchos los objetivos a cumplir, algunos de ellos reflejados en la Agenda 2030, año en el que se podrá medir el alcance de todas estas medidas, si se han cumplido y poder valorarlas.
El objetivo dentro del marco sobre clima y energía prevé una reducción de emisiones de un 40% para el año 2030, para alcanzarlo se están aplicando medidas legislativas sobre energías renovables y eficiencia energética.
Para conseguir una Europa climáticamente neutra se necesita que todos los países se impliquen para alcanzar un desarrollo sostenible, donde el crecimiento económico no dependa de los recursos naturales no renovables y poder abandonar las emisiones contaminantes, generando energías limpias.
Algunas de las acciones que se llevaran a cabo a lo largo de estos próximos años para proteger el medio ambiente e impulsar el Pacto Verde Europeo son:
- Invertir en tecnologías respetuosas con el medio ambiente.
- La creación de sistemas más limpios, baratos y sanos, tanto en el transporte público como en el privado.
- Implementar el programa “De la granja a la mesa”, innovando en agricultura para garantizar la no contaminación del suelo, el agua y el aire.
- Impulsar y apoyar la innovación en la industria.
- Descarbonizar el sector de la energía impulsando las energías renovables.
- Garantizar la eficiencia de los edificios desde el punto de vista energético.
- Mejorar las normas medioambientales mundiales creando sinergias con socios internacionales.
Todas estas acciones van encaminadas también a conseguir una economía circular donde la mayoría de productos industriales estén fabricados con materiales reciclados o sean reutilizables, para poder alcanzar el ansiado residuo cero.
También implica que se cumpla el «Acuerdo de París«, para poder mantener la temperatura global por debajo de los 2ºC y que se debería haber cumplido en este pasado año 2020 y que la situación de excepcionalidad por La Covid-19, entre otras causas lo ha impedido.
Se trata sin duda de una estrategia a largo plazo para poder alcanzar una Europa climáticamente neutra, donde el compromiso político y las inversiones por parte del sector privado impulsarán y potenciarán las inversiones públicas para poder llevarlo a cabo, asegurando la cohesión social para que nadie se quede atrás.
Las empresas que quieran avanzar hacia un modelo de economía circular y dejar atrás la degradación del medio ambiente, deberán trabajar para que los residuos se reduzcan al mínimo y poder alcanzar cero emisiones. En el Pacto verde Europeo está contemplado ayudas a las empresas para modernizar y desarrollar alternativas.
«El Pacto Verde Europeo es nuestra nueva estrategia de crecimiento. Contribuirá a reducir las emisiones, así como a crear puestos de trabajo«. Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea.
Fuente: ec.europa.eu