El huerto ecológico es aquel que utiliza todos los productos y técnicas necesarias en el cultivo de flores, hortícolas o frutales de forma totalmente natural, Dichos productos utilizados deben de ser también de origen ecológico y recomendados especialmente para este fin. Se entiende como productos los fertilizantes, fitosanitarios, materiales de tutorado… e incluso las semillas y plántulas utilizados en el cultivo.
El huerto ecológico es en sí una opción, cada día con más seguidores dentro del mundo de la bricojardinería. A nivel profesional posee una fuerte legislación como garantía de que los productos que llegan al consumidor cumplen con todos los requisitos necesarios.
Como decimos, para tener un huerto ecológico, todo debe de estar contemplado dentro de este concepto.
Uno de los primeros factores a tener en cuenta es el suelo y entenderlo y cuidarlo es fundamental. Un suelo sano en él viven una compleja comunidad de organismos útiles en equilibrio perfecto, nos dará plantas sanas, resistentes y más productivas.
Entre las labores a tener en cuenta está el remover la tierra sobre unos 20 centímetros de profundidad cada campaña para lograr una textura esponjosa y aireada. Momento ideal para enriquecerlo con la incorporación de un compost natural o aportando abonos especialmente fabricados para este el huerto ecológico.
El compost natural podemos crearlo en el propio jardín mediante compostadores en los que incorporaremos los restos de las podas o siegas del propio jardín, junto con los orgánicos vegetales de cocina.
Como decimos, los abonos especialmente fabricados para el huerto ecológico deben de estar perfectamente etiquetados, estando normalmente fabricados de forma natural a base de humus, extractos de algas, estiércol de caballo, etc.
Otro factor a tener en cuenta es el cuidado en mantenerlo libre de elementos que atraigan a las plagas como por ejemplo el recoger las frutas y hortalizas que estén caídas o sobre maduradas. Y es muy útil el fomentar la vida silvestre en el jardín, instalar nidos para pájaros… que ayude notablemente a la atracción de muchos insectos beneficiosos. Comida, agua y refugio son claves para mantener una buena ‘comunidad de vecinos’ en un jardín, siendo para ello esencial la adecuada elección y disposición de las plantas.
La elección de las especies y variedades es un tema destacable en el huerto ecológico. Las especies autóctonas, aromáticas y culinarias, nos dan un abanico de posibilidades infinitas que no descuidan el objetivo final.
En el caso de adquirir semillas, también debemos asegurarnos en el etiquetado del sobre, en el que debe de ir identificado el material vegetal evidentemente como ‘variedad ecológica’. Esto significa que en su proceso de obtención se han cumplido todos los requisitos necesarios para que así sea.
El agua, como bien escaso, debe de estar bien gestionada en el caso del riego, creando si es posible, diferentes espacios para diferentes ecosistemas o necesidades hídricas. El riego localizado, segmentar zonas afines, regar a horas de menor calor, utilizar agua recogida de lluvia, aplicar mulching o acolchado para evitar una mayor evaporación… son opciones que combinadas entre sí ayudan a ahorrar agua. Además de jardín ecológico, debe de ser respetuoso con el medio ambiente.
En cuanto a los fitosanitarios, los hay de origen orgánico y ecológico. Recientemente, muchos de ellos se han legislado como productos fitofortificantes, elaborados con productos 100% ecológicos que actúan como protectores y preventivos de las plagas y enfermedades de las plantas.