Prácticamente todas las plantas son de exterior en sus lugares de origen, si bien por sus características pueden llegar a comportarse como plantas de interior en recintos cubiertos ya sean públicos como privados. Un ejemplo de este tipo de plantas es la Drácena marginata o dragón rojo de Madagascar.
Su robustez, resistencia y estructura la hacen ideal para decoraciones de interiores. A ello se suma su diversidad de tamaños disponibles en el mercado, permitiendo decorar con ella desde un pequeño lugar de la casa hasta grandes salones de restaurantes, hoteles y demás centros comerciales.
Como aspecto a destacar en esta planta, es una de las usadas por la NASA en sus estudios realizados para la limpieza del aire y ha demostrado que ayuda de forma eficiente a eliminar el formaldehído (aldehído de olor irritante) en el ambiente.
Dracaena marginata o Dracaena reflexa
La Drácena marginata tiene como nombre científico Dracaena marginata, considerado un sinónimo de Dracaena reflexa var. Angustifolia, pertenece a la familia Agavaceae y es originaria de Madagascar. Popularmente también se le conoce como dragón rojo de Madagascar, drácena, drácena marginata, dracaena de borde rojo, árbol de sangre de dragón o dracaena de hoja fina.
El nombre de Dracaena reflexa var. angustifolia fue descrito por John Gilbert Baker. Dracaena deriva del griego drakaina = «dragón» y angustifolia es el epíteto latino que significa «con hojas estrechas».
En su hábitat de origen es un arbusto con uno o varios troncos que superan fácilmente los tres metros de altura. Esta ha demostrado ser una de las plantas que mejor se adapta al crecimiento en interior y según va creciendo, sus tallos van perdiendo las hojas inferiores dejando desnudo sus finos tallos que suele arquearse creando efectos muy decorativos.
Sus flores carecen de interés ornamental, suele florecer durante los meses más cálidos del año emitiendo tallos con numerosas flores estrelladas de color crema.
La drácena marginata se caracteriza por sus hojas lineares a lanceoladas de punta aguda, bastante estrechas con aspecto de cintas, de color verde oliva fuerte y márgenes rojizos. Son populares las variedades ‘Tricolor’ con hojas coloreadas de crema, verde y rojo, y la ‘Bicolor’ de hojas verdes con bandas rojas en los márgenes.
Variedades de Drácena marginata
Como consumidores finales y de forma coloquial no se suele referir a esta planta con el nombre de sus variedades sino simplemente como Drácenas marginatas, en genérico. Como mucho simplemente se hace referencia al color predominante de sus hojas. El uso del nombre de las variedades de las drácenas marginatas solo se suele utilizar a nivel profesional ya sean cultivadores o responsables comerciales.
Las variedades más comerciales de Drácenas marginatas son:
- Drácena marginata “Colorama”. Presenta en sus hojas prominentes bordes rojos, destacando la apariencia rojiza.
- Drácena marginata “Tricolor”. Presenta una banda amarilla entre las estrías rojas y verdes, dando un efecto global de verde-dorado.
Otras variedades de Drácena marginata menos conocidas en España son “Tarzán” y “Magenta”.
Cuidados de la Drácena marginata
Al exterior rara vez las vemos en España y en estos casos, los cuidados de la Drácena marginata se limitan a ser cultivada en parques y jardines donde el ambiente reinante tenga un componente básico: un clima subtropical. A partir de ahí una exposición soleada, un terreno o sustrato que mantenga bien la humedad sin llegar al encharcamiento y espacio suficiente entre otras plantas, porque si no se podan, sus delgados tallos llegan a ocupar varios metros tanto de altura como de volumen.
Lo normal es disfrutar de ella como planta ornamental de interior. En este caso los cuidados de la drácena marginata deben comenzar por una ubicación lo más iluminada posible… recordemos que se trata de una planta de exterior en su hábitat natural. Al margen de ello, observaremos que en interiores sus hojas adquieren un aspecto más elegante y bello debido a que la luz indirecta le ayuda a que adquieran más brillo y manifestar mejor sus colores.
Propia de ambientes subtropicales requiere una temperatura mínima de 15°C por lo que sobre todo en invierno debemos cuidar este aspecto. En este sentido evitaremos ubicarla cerca de radiadores y equipos de aire acondicionado para protegerla de corrientes de aire secos. Controlados estos factores son las que la hace muy popular en las oficinas en donde el calor y la luz constantes le son propicios. Siguiendo con las temperaturas más adecuadas para esta planta su desarrollo óptimo lo tiene con temperaturas altas, comprendidas entre los 22 y los 26ºC.
La drácena marginata precisa de humedad elevada. En ambiente seco y caluroso puede aparecer araña roja y este problema lo podemos disminuir notablemente pulverizando sus hojas con agua un par de veces al día, sobre todo por el envés de sus hojas que es donde vive este ácaro.
En cuanto al sustrato, el más indicado es un sustrato universal o sustrato de plantación de los que se comercializan en los puntos de venta especializados. Esta requiere una humedad constante en el sustrato, por lo que las hidrojardineras son muy apropiadas para esta planta. Además permiten un mantenimiento en cuanto al riego mucho más ‘relajado’ ya que la frecuencia de estos se dilatan notablemente en el tiempo. Pero debemos saber que el secreto de esta planta reside en no regarla excesivamente, ya que no necesita mucha agua. Con que tengamos la tierra siempre húmeda es suficiente puesto que la planta tiene la capacidad de acumular agua en sus raíces.
Para su fertilización centraremos los abonados durante la época de crecimiento activo, utilizando aquellos formulados especiales para plantas verdes. Las dosis serán las más bajas recomendadas por el fabricante cuando las tengamos plantadas en hidrojardineras porque no hay lavados de fertilizantes como sí puede ocurrir cuando regamos en exceso en las tradicionales macetas con drenaje.
Poda de la drácena marginata
La poda de la drácena marginata obedece más a un aspecto ornamental y de rejuvenecimiento que a las necesidades propias de la planta. El objetivo principal de estas es mantenerla dentro de área de crecimiento deseada ya que al estar dentro de una casa, restaurante, centro comercial, etc. su volumen de desarrollo debe enmarcarse en el preestablecido para cada caso.
Lo normal es que el crecimiento de sus delgados tallos crezca en altura y por su peso se arqueen y adquiera una ‘arquitectura elegante’ a la vez de peculiar. En ocasiones, estos tallos crecen en exceso en cuanto a longitud y es necesario cortarlos. En estos casos, optaremos por una poda selectiva y distribuida en el tiempo… en concreto en años.
Los cortes se realizarán con tijeras de podar bien afiladas para no machacar la zona de corte. Esta se realizará sobre unos 10 centímetros de su base desde donde brotó para que los nuevos tallos vuelvan a ser emitidos cerca del tallo principal. Como hemos avanzado y con el objetivo de no dejar la planta excesivamente despoblada de tallos y hojas, las ramas seleccionadas para su poda las iremos alternando. De esta forma, un año podaremos un tercio o la mitad de sus largas ramas y al siguiente el resto y de esta forma siempre tendrá un aspecto ornamental más adecuado.
El punto de corte también debe de tener presente la zona de ubicación y orientación de la yema final. Procuraremos que esta esté dirigida hacia el exterior de la planta o hacia aquellas zonas más despobladas y así obtendremos plantas estéticamente más armoniosas. El momento ideal de la poda es a comienzo de primavera.
Trasplante de la Drácena marginata
Con el tiempo, debemos realizar el trasplante de la drácena marginata. El cambio de maceta se puede realizar cada 2 años y las mejores épocas para ello son primavera y verano.
El sustrato más adecuado puede ser de los prefabricados sustrato universal o el sustrato de plantación, o bien realizarlo mediante una mezcla de 2 partes de turba, una de tierra vegetal y otra de arena.
La maceta o hidrojardinera elegida debe ser ligeramente superior a la que tenía en esos momentos, así como la altura final del trasplante. Durante el proceso es conveniente eliminar parte del sustrato tanto el superior como el inferior del cepellón ya que suele contener cierta acumulación de sales como consecuencia de los abonados realizados durante todo el cultivo. Tras el trasplante, realizaremos un riego copioso y el siguiente será cuando observemos que el sustrato vuelve a estar ligeramente seco. De esta forma induciremos a la planta a emitir nuevas raíces que exploren la zona del nuevo sustrato.
Cultivo de la Drácena marginata
A nivel profesional, dentro del grupo de las Drácenas, la Dracaena draco es la única que se emplea la semillas para su reproducción. En el resto de las especies, entre ellas la Drácena marginata, se multiplican por esquejes terminales de tallo o por esquejes de tallo de unos cinco a ocho centímetros de longitud. Estos se extraen de plantas madres o de los tallos procedentes de las podas de las plantas en producción.
En España es una práctica normal importar tallos más o menos largos directamente de sus países de origen. Una vez en el vivero se combinan varios tallos con longitudes diferentes que se plantan en macetas, se depositan en el vivero y manteniendo una humedad ambiente saturada y una temperatura entre 25 y 30ºC se consigue que broten y enraícen a la vez en un mes aproximadamente. Pocas semanas después se espacian y cuando adquieren un buen follaje ya están listas para su venta.
Un sustrato adecuado estaría compuesto por tres partes de turba y una de polietileno expandido (material plástico espumado derivado del poliestireno y utilizado en el sector del envase y la construcción) para darle esponjosidad y drenaje. Este sustrato debe neutralizarse a pH 6,5-7. El exceso de acidez provoca clorosis en las hojas, mientras que la alcalinidad induce deficiencias en la absorción de hierro. La fertilización en cultivo se realiza semanalmente en un equilibrio 1-0,5-1 durante todo su periodo de crecimiento. En invierno se aplicarán abonos foliares con algún quelato de calcio cuando el crecimiento se ralentiza por falta de luz o las bajas temperaturas.
La Drácena marginata puede comercializarse desde pequeñas plantas individuales cultivadas en maceta de 12 a 16 centímetros de diámetro a grupos de estas en tamaños más grandes de contenedores con alturas de plantas superiores al metro y medio.
Plagas y enfermedades de la drácena marginata
Las plagas más frecuentes que se pueden presentar en la drácena marginata son:
- La cochinilla: Se las reconoce fácilmente ubicadas como unas pequeñas motas pardas sobre los nervios del envés de las hojas. Este insecto además segrega una sustancia azucarada que atrae a las hormigas y donde se instala el hongo conocido como negrilla.
- La araña roja (Tetranychus urticae): Es uno de los mayores problemas de D. marginata, especialmente en las variedades ‘colorama’ y ‘tricolor’. Esta plaga es más virulenta cuando el ambiente es seco y las temperaturas son altas. Los síntomas son unos puntos de color amarillo en el haz de las hojas que posteriormente se tornan de color marrón y se abarquillan. Es frecuente encontrar finas telarañas en el envés de las hojas afectadas.
Las enfermedades más frecuentes que se pueden presentar en la en la Drácena marginata son:
- La Cercospora: Sus síntomas aparecen en forma de manchas necróticas con un borde amarillento en las hojas.
- Fusarium y Phytophthora: Son enfermedades vasculares que aparecen sobre la base del tallo. Para evitar que aparezcan se debe prestar especial interés en evitar los encharcamientos.
- La Erwinia: Es una bacteria que produce una podredumbre blanda y maloliente. No tiene cura, por lo que debemos eliminar las plantas afectadas.
Fisiopatías de la Drácena marginata
En ocasiones observamos que la Drácena marginata muestra una serie de problemas que equivocadamente los catalogamos como problemas: son las llamadas fisiopatías, trastornos que sufren las plantas derivados de unas condiciones de cultivo inapropiadas. Entre ellas se encuentran:
- Amarilleamiento de las hojas inferiores: Este síntoma puede deberse tanto al proceso natural de envejecimiento de sus hojas si se produce lentamente, como a un exceso de sequedad y calor si las hojas se caen rápidamente.
- Aparición de hojas descoloridas: Suele pasar cuando hay una escasez de iluminación y por lo tanto se resuelve reubicando a la planta en un lugar más iluminado.
- Aparición de márgenes y ápices foliares necróticos: Puede producirse tanto si se da una humedad relativa baja como si la planta se encuentra en una zona con corrientes de aire frío. En el primer caso es conveniente nebulizar regularmente sus hojas y en el segundo reubicando la planta a lugares más protegidos.
- Aparición de hojas blandas y rizadas con márgenes necrosados: Es un síntoma propio de épocas frías del año. Hay que elevar la temperatura ambiente, sobre todo durante la noche.
- La planta está lacia: Si el sustrato está muy húmedo es un problema de pudrición de sus raíces. Si por el contrario está seco… simplemente es una falta de riego.
- Pérdida de hojas y nulo crecimiento: Suele ocurrir cuando la planta está padeciendo frío, que se considera por debajo de los 14ºC.
Hola, a ver si alguien me puede ayudar.
He dejado mi dracaena en el coche con dos dedos la ventana bajada pero al volver estaba mustia y con las hojas caídas y amarillentas.
¿Qué puedo hacer para salvarla?
Gracias
Hola, la planta se me cambio el color, la hoja era como verde y ahora está rosada y las puntas como rotas, ¿qué hago?