Las Cebollas con denominación de origen de la Mancha (España) son cebollas de bulbos de la especie Allium cepa, tipo Recas. Se trata de un tipo genético de cebolla seleccionada en el municipio toledano de Recas del que toma su nombre y las condiciones de adaptación al medio natural peculiar de la zona de producción de Castilla-La Mancha.
Las Cebollas con denominación de origen de la Mancha van destinadas cómo venta a los consumidores en estado fresco, aunque por sus características organolépticas también entra en el mercado como producto trasformado.
Para que estas obtengan la denominación de origen pertinente deben de cumplir unos determinados requisitos mínimos en factores cómo diámetro, contenido en materia seca, peso unitario y contenido en azúcar mínimo que proporcionan a esta cebolla su picante característico.
En cuanto a la forma de la cebolla de La Mancha, es esférica, pudiendo admitir una deformación, tanto en el diámetro polar como en el ecuatorial, de un 10%. El tamaño del bulbo es de mediano a grande, aunque está relacionado directamente con las prácticas culturales, en especial del marco de plantación. Y las catáfilas (capas de piel seca que la recubre) que determinarán el color exterior de la cebolla de La Mancha, son un mínimo de dos, y su color es cobrizo o bronceado oscuro.
La zona de producción de las cebollas con denominación de origen de La Mancha se sitúa en la región castellano-manchega y concretamente en las provincias de Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Toledo.
Su cultivo comienza con la preparación del terreno. Normalmente se efectúan pases de cultivador o grada terminando con un pase de rulo para conseguir una estructura fina y firme del terreno.
La siembra de la cebolla puede hacerse de múltiples forma:
- De forma directa (es la más empleada).
- Con máquina partiendo de semilla desnuda o pildorada.
- En semillero para su posterior trasplante
- Mediante plantación de bulbillos.
La plantación, tanto de la pequeña planta procedente del semillero, como de los bulbillos se puede hacer manual o mecánicamente.
Como labores durante el ciclo vegetativo están:
- Escarda.- Para la eliminación de malas hierbas, con varios tratamientos herbicidas en función del tipo de hierba y del estado fenológico del cultivo.
- Riegos.- Ya que el cultivo de las cebollas con denominación de origen de la Mancha siempre es en regadío, los riegos al principio son cortos y frecuentes, aumentando el intervalo entre ellos y su intensidad a lo largo del cultivo hasta el final del engrosamiento y maduración del bulbo.
- Fertilización.- En el de fondo se aporta la totalidad de las necesidades de fósforo y potasio y alrededor de un tercio de las necesidades totales de nitrógeno. El resto de la necesidades de nitrógeno se reparten en 2-3 fracciones y no muy tardíos para conseguir una buena conservación del bulbo.
En cuanto a las plagas y enfermedades de estas cebollas con denominación de origen de la Mancha, en los primeros estadios hay que controlar los gusanos de suelo y posteriormente las plagas de mosca y trips.
La recolección se lleva a cabo cuando empiezan a secarse las hojas, señal de haber llegado al estado conveniente de madurez. La recolección en la zona se efectúa de forma manual, mecanizada o mixta.
Y el sistema de transporte es siempre a granel, en cajones o big bags. Una vez entradas las partidas de cebolla en el almacén, se realiza una inspección visual para comprobar aspectos como que las condiciones del transporte de la cebolla desde campo a los almacenes ha sido el adecuado, y un control del estado sanitario y de madurez de los bulbos.