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viernes, 20 septiembre, 2024
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Rosa canina, el escaramujo

La Rosa canina, escaramujo, garbanzo, algalaba, rosal de perro, tapaculo… como también se le conoce popularmente, se muestra en su hábitat natural como un arbusto que puede alcanzar hasta los tres metros de altura.

La Rosa canina o escaramujo pertenece a la familia de las Rosáceas y es una especie de interés en trabajos de restauración en ecosistemas de ribera, además utilizarse como patrón para el injertado de variedades ornamentales de rosales.

Como planta la Rosa canina, posee tallos erectos, glabros, con aguijones retrorsos. Sus hojas son caducas y compuestas por 2 a 3 pares de folíolos y raquis provisto de glándulas dispersas. Sus folíolos son de ovado-redondeados a ovado-lanceolados, agudos, de base redondeada, serrados o biserrados.

Sus flores son solitarias o en grupos corimbiformes de 2 a 5 flores, normalmente blancas o rosadas y con 5 pétalos escotados en el ápice.

Suele habitar en espinares, setos ribazos y linderos de los bosques, sobre todo tipo de suelos y con gran amplitud ecológica ya que vegeta bien entre altitudes de 0 a 2.000 metros. Se le puede encontrar en ecosistemas de rivera en Europa, Asia Occidental y Norte de África. En España es muy frecuente y extendida por casi todas las provincias.

Su floración se produce de abril a junio, madurando los frutos al final del verano o principios de otoño.

Su fruto es una úrnula esférica, urceolada o elipsoidal, glaba, liso, rara vez con glándulas estipitadas y acúleos, a veces muy carnosa, de color rojo oscuro.

Pregerminación de la Rosa canina o escaramujo

La pregerminación de la Rosa canina o escaramujo se recomienda para recortar notablemente el letargo interno de sus semillas.

Como decimos, la mayoría de las semillas del género Rosa presentan letargo interno. Por ello se recomienda como tratamiento pregerminativo la estratificación de las semillas en arena o en vermiculita húmeda durante 6 o más meses a 5 ºC.

Rosa canina

Para obtener sus semillas, la cosecha debe de realizarse directamente de la planta, cuando los frutos cambian del verde al rojo. Preferentemente se recogerán inmediatamente después de la madurez ya que los que permanecen en la planta tienden a secarse y sus semillas pierden con facilidad su viabilidad.

En cuanto a su semilla es triangular, angulosa, de superficie lisa, de color claro a veces castaño. La extracción de semilla se realiza mediante en protocolo de despulpado, seguido de lavado, secado, cribado y aventado, con un rendimiento aproximado del 11%. Es importante su almacenamiento en frío y ambiente seco.

Tras su siembra, la germinación de la Rosa canina es epigea, con plántula de 2 a 3 centímetros, con dos cotiledones elipsoidales y hojas primordiales con tres folíolos, ligeramente ovados y de color verde claro.

La siembra puede hacerse preferentemente en otoño o en su defecto en primavera, ya que las semillas germinan de forma desigual. Las plántulas, una vez germinadas y con dos o tres nuevas hojas verdaderas, se transplantarán a envases forestales de 300 centímetros cúbicos para que se desarrolle correctamente su sistema radicular pivotantes.

Podemos considerarlas plantas ideales para su transplante con un tamaño final en la nueva maceta de 15 a 30 centímetros de altura. Al igual que otras especies de ribera puede cultivarse como planta a raíz desnuda.

Si se compran las semillas de Rosa canina o escaramujo, la pureza de esta puede situarse entre el 95-98 %, su poder germinativo del 40-60% y como orientación hay unas 60 semillas por gramo.

Aconitum napellus, Acónito común

El Aconitum napellus es una planta controvertida. Por una parte es utilizada como flor de complemento e incluso como planta ornamental, mientras que por otra parte es muy tóxica. Si se consume, claro.

El Aconitum napellus pertenece a la familia de las Ranunculáceas y tiene nombres populares como el Acónito común, Acónito, Anapelo, Casco de Júpiter, Tora, Vedegambre… y nombres que hacen referencia a su toxicidad como Acónito mata lobos, Hábito del Diablo, matalobos de flor azul, etc.

Es originaria de las zonas altas, frías, húmedas y oscuras de Europa del Este y el Himalaya. En el comercio es difícil encontrarla ya que sale al mercado sólo unas pocas semanas al año.

Así, de forma silvestre la podemos encontrar en las zonas montañosas de Europa excepto en la región mediterránea, y se extiende por el oeste hasta la cordillera del Himalaya. Es fácil encontrarla junto a los cursos de agua y en los bosques en lugares húmedos y sombríos.

El Aconitum napellus es una planta herbácea perenne, lampiña, que emite tallos simples que alcanzan sobre el metro de altura.

Su raíz es carnosa, fusiforme, con tubérculos de hasta 15 centímetros de largo, en forma de nabos de color pálido de jóvenes y marrón cuando son adultos.

Las hojas del Aconitum napellus son pecioladas y crecen de forma alternas, son palmadas, profundamente recortadas, rígidas y algo coriáceas de color verde brillante, aunque algo más claro por el envés.

Sus flores son más bien grandes, muy atractivas… de ahí su valor ornamental, de color azul o violetas con un diámetro que ronda los 3 centímetros.

Una vez fecundadas producen un fruto con tres o cuatro folículos que contienen numerosas semillas de aspecto arrugado.

Curiosidades del Aconitum napellus

Son muchas las curiosidades del Aconitum napellus, sobre todo referentes a su nombre y negra historia.

Acónito común

Comenzando por su nombre (Aconitum napellus), hay muchas historias. Entre ellas:

  • La palabra Acónito, según autores como Plinio el Viejo y Teofrasto, deriva de A cona, un puerto del Asia Menor.
  • Otros autores afirman que deriva de Akontion, que significa dardo, debido a que los pueblos bárbaros lo utilizaban para envenenar sus flechas.
  • Otros dicen que deriva del griego Akon, que significa de piedra o roca porque crece en las montañas entre las rocas.
  • Y otros que su nombre procede de la palabra griega Akonias, que significa creciendo en peñasco, debido al hábitat natural donde suele crecer esta planta: zonas altas de los Pirineos, los Alpes, Este de Europa y en el Himalaya, donde puede encontrarse en páramos y praderas, lugares fríos, oscuros y húmedos, como las orillas de los arroyos.

En cambio, la palabra Napellus significa pequeño nabo y hace referencia a la forma de la raíz.

No en todos los países se llama igual. El Aconitum napellus es más conocido en el Reino Unido como monkshood (capucha de monje) debido a la particular forma de sus flores y la de los bonetes o gorras que antiguamente utilizaban los frailes y monjes.

En Japón se le llama Hanatori Kabuto, que significa penacho del casco del samurái como alusión de la silueta de los capullos a los gorros de los soldados nipones.

Con respecto a su negra historia, la verdad es que la tiene bien ganada. Algunos ejemplos:

  • La Aconitum napellus es extremadamente tóxica. Contiene un potente alcaloide: la aconitina. Un solo miligramo de aconitina es letal para un adulto de unos 80 kilos de peso.
  • Es venenosa al administrar por vía interna y ocasiona neurotropismo en los centros nerviosos, especialmente en el sistema respiratorio.
  • Por vía externa actúa sobre las terminaciones nerviosas en un principio genera excitación y rubor, y luego parálisis, parestesias y anestesia.
  • En las guerras, se utilizaba para envenenar las reservas de agua del enemigo.
  • También, los soldados solían untar la savia de Aconitum napellus en la punta de sus lanzas y flechas para herir al enemigo.
  • Era una planta muy usada para asesinar a opositores políticos en el Imperio Romano. Claudio I fue asesinado por su propio médico con esta planta y el emperador Trajano prohibió su cultivo, comercialización y consumo.
  • En España antiguamente era conocida como Matalobos por el uso que se hizo de la Aconitum napellus para eliminar esta especie. Se mezclaba sus raíces, hojas o savia con trozos de carne para envenenarlos.
  • Esta práctica también se utilizó con los tigres que merodeaban las aldeas y tribus indias, con las panteras de Oriente Medio y con plagas de pequeños roedores.

En cuanto a leyendas sobre el Aconitum napellus, se dice que la vaca fue engendrada por la sangre de Prometeo, el dios griego de la trampa y de la creación de la humanidad. Y también que surgió de la baba que goteaba de los afilados colmillos de Cerbero, el perro de tres cabezas que guardaba las puertas del Infierno.

En la Edad Media se creía que el Aconitum napellus era utilizado por las brujas para volar y hacer pócimas y filtros de amor.

El Aconitum napellus estuvo íntimamente asociado a la alquimia, la brujería y la magia negra durante la Edad Media. De hecho, la literatura recuerda que no era raro encontrar esta planta en los jardines de las brujas, los magos, los hechiceros y los alquimistas.

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Gluconato de cobre

Gluconato de cobre: Un refuerzo a nivel nutritivo y sanitario para las plantas.

Claudia Bono Mestre, es Ingeniera Agrónoma y está al frente del Departamento Técnico y de Exportación de la empresa Even Agro, fundada en el año 1999 y dedicada al desarrollo, producción y venta de agronutrientes. Even Agro forma parte de la Asociación Española de Fabricantes de Agronutrientes (AEFA).

Forsythia x intermedia

La Forsythia x intermedia es un arbusto con muchas posibilidades decorativas en el jardín. Sus abundantes flores amarillas son de diferentes intensidades según variedades, pero todas ellas presentan un color amarillo intenso.

Iconos y estampados vegetales ilustrados por CAPA & Co

Conversamos con Lorena Villalba, que es como ella misma se define, “ingeniero y paisajista de formación y diseñadora de iconos y estampados por vocación”. Actualmente vive y trabaja en Valencia y es desde su estudio de diseño CAPA & Co, donde se dedica a ordenar todo lo que cae en sus manos, con cierto sentido común, para dar forma a distintos tipos de proyectos.

Lorena VillalbaCAPA & Co surgió “paso a paso, como cuando empezamos a caminar”, primero diseñando espacios públicos, más tarde colaborando con alguna editorial, carteles para presentaciones, identidades corporativas, catálogos, flyers, etc. Es decir, proyectos basados en la organización y presentación de todo tipo de información.

¿Por qué una paisajista decide dedicarse al diseño de iconos y estampados? La respuesta es sencilla: “el proceso de trabajo es similar”. En los dos casos partes de un entorno o una temática que hay que analizar, cuya información hay que organizar según el contexto, para presentar una propuesta que después se llevará a la realidad”.

Es precisamente en este punto dónde comenzó su aventura en el mundo de los iconos y estampados. En los proyectos que se desarrollan en el paisaje la representación gráfica es fundamental; todos los elementos que intervienen en el proyecto se representan gráficamente en planos a través de símbolos, texturas y colores guardando un determinado orden. Por eso no es de extrañar que Lorena decidiera ir un poco más allá y empezar a investigar otras aplicaciones para todos esos símbolos y texturas.

Símbolos y texturas diseñados por CAPA & Co para ilustrar proyectos de paisajismo.
Símbolos y texturas diseñados por CAPA & Co para ilustrar proyectos de paisajismo.

Las temáticas que dan lugar a sus estampados (patterns) son infinitas, aunque sus preferidas son aquellas cuyo elemento principal es la vegetación, ya que cualquier especie vegetal ofrece todo un mundo de posibilidades, ya sean árboles, arbustos, trepadoras, tapizantes o flores.

Estampado de la colección Tréboles
Estampado de la colección Tréboles

Lorena también suele inspirarse en el paisaje, en los detalles de los edificios históricos y en el entorno más próximo. “Al vivir y trabajar en Valencia el estímulo creativo es constante y puede llegar a ser agotador si no intentas evadirte. Paseando por el casco viejo de Valencia y por los barrios que todavía conservan su esencia puedes encontrar mucho arte y tradición como referentes en los que inspirarte”.

Estampado de la colección Cenefas
Estampado de la colección Cenefas
Estampado de la colección Flores Enredadas
Estampado de la colección Flores Enredadas

Lorena elabora sus estampados a partir de sketches hechos a mano (unas veces sobre papel y otras directamente sobre la tableta gráfica). Estos dibujos son la base del diseño, es decir, los elementos que dispuestos en un determinado orden o lugar conforman lo que se conoce como “rapport” o motivo de repetición.

Para realizar el motivo de repetición primero digitaliza los sketches mediante distintos programas (Adobe Illustrator y Adobe Photoshop) lo que le permite modificar el trazado y la escala de los dibujos para mejorar su calidad. A continuación, ordena todos los elementos que ha dibujado creando diferentes motivos que, al repetirlos entre sí, dan lugar al estampado o pattern.

Tanto los iconos como los estampados se pueden aplicar a un sinfín de superficies y materiales mediante diferentes técnicas, por eso Capa & Co acaba de lanzar sus primeros productos para compartir sus diseños con el público a través de distintos accesorios de papelería y cerámica.

Caja Cenefas. 2- Taza El Ciclo del Árbol. 3- Libreta Tréboles. 4- Set de tarjetas Flores Enredadas
Caja Cenefas. 2- Taza El Ciclo del Árbol. 3- Libreta Tréboles. 4- Set de tarjetas Flores Enredadas

Puedes seguir a CAPA & Co a través de:
Web: www.capaandco.com
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20 aniversario de AEFA

Durante 2017, AEFA (Asociación Española de Fabricantes de Agronutrientes) celebra su 20 aniversario. En todo este tiempo ha trabajado en favor del sector de los agronutrientes en una agricultura de vanguardia, consiguiendo ser en la actualidad ‘La voz del sector de agronutrición’.

Acelga

La acelga es una planta hortícola laxante y digestiva de grandes hojas. Normalmente se consume cocida y aderezada, o bien sola o como acompañante (guarnición) de carnes, pescados, etc. Desde el punto de vista de su sabor, es semejante al de las espinacas aunque algo más suave. Tras la espinaca, es una de las verduras más ricas en calcio.

El Lirio Español o Iris xiphium

El Lirio Español o Iris xiphium. Así se denomina a una de las numerosas especies de flores del género Iris. Además de su nombre científico (Iris xiphium) tiene un gran número de nombre populares como por ejemplo: baya, boca de sierpe, espadaña olorosa, espadaña portuguesa, lirio, lirio azul, lirio azul de mayo, lirio bulboso, lirio bulboso de flor azul, lirio cuerno de Lisboa, lirio de campo, lirio de dos colores, lirio de la sierra, lirio de primavera, lirio de Valladolid, lirio espadañal, lirio español, lirio fino, lirio humilde pajizo, lirio ilírico, lirio inglés, lirios, lirio silvestre, lirio xifio, reyllabuey… e Iris de Holanda, aludiendo a la gran cantidad de flores de esta especie que vienen de Holanda para su comercio como flores frescas.

El Iris xiphium pertenece a la familia de las Iridáceas y es originario de la región mediterránea de Europa y en especial de la Península Ibérica. Su hábitat son los sitios húmedos, pinares abiertos, matorrales y tomillares sobre suelos arenosos básicos. Este género incluye a un amplio grupos de bellas flores intrincadas y con un amplio espectro de colores, así como de texturas satinadas o aterciopeladas.

Iris o Flor de Lys

El género es tan amplio que induce a error en algunas de sus clasificaciones populares. En su conjunto son llamadas lirios, pero también Flor de Lys. En este contexto, hay múltiples contoversias, ya que también se llama Flor de Lys a la planta Sprekelia formosissima (Amarylis formosissima) originaria de México y que al contrario que los Iris, esta pertenece a la familia de las Amarilidáceas.

Pero también es cierto que en Europa se les denomina Iris o Flor de Lys refiriéndose a la misma planta y por lo tanto, así la trataremos aunque visto lo visto… es cuestión de interpretación.

Como planta, es perenne, bulbosa de hojas y tallos de color gris verde. Sus hojas son largas y estrechas algo plateadas en el haz y estriadas en el envés. Estas envuelven su largo tallo.

Sus flores son grandes y tripartitas, de un color azul violeta claro con una característica banda amarilla, poseyendo una vellosidad de pelos cortos y finos en la zona llamada lengua’.

El Iris significa arco iris en griego y en Europa designada como Flor de Lys, ha sido emblema de ciertas familias de la nobleza como símbolo de sabiduría y valor, además de musa o flor favorita de muchos pintores, como por ejemplo Van Gogh.

Para la mitología griega el Iris era el mensajero de los dioses con los hombres, que había robado el reflejo de las estrellas y actuaba de correveidile entre los amores secretos entre el cielo y la tierra.

Existen numerosos tipos de Iris o Lirios como así se les denomina popularmente. Unos, la mayoría son utilizados en jardinería y otros, aunque también en jardinería… asociados más a los estanques y zonas de lagunas. Pero también los hay utilizados utilizados básicamente para ser comercializados como flores frescas o en composiciones florales.

En este último caso, encontramos al Lirio Español, también conocido como Iris de Holanda por proceder de esta nación la mayoría de Iris de este tipo. Es originario del Mediterráneo occidental y su mejora genética le permite ser una popular bulbosa comercial como flor cortada. Sus colores más populares son el azul, malva, blanco y amarillo.

El Lirio Español o Iris xiphium es una flor excelente como flor cortada, no siendo en cambio tan popular como otros Lirios para la jardinería. Como flor fresca, los colores más populares son el azul, malva, blanco y amarillo.

Mediante técnicas de cultivo profesional, las flores de Iris pueden encontrarse durante todo el año, si bien, de forma natural, como bulbosa englobada dentro del grupo de bulbos de otoño, lo hacen de marzo a mayo.

Iris xiphium en el jardín

El Iris xiphium en el jardín mediterráneo funciona muy bien ya que es originario de la región mediterránea de Europa y en especial de la Península Ibérica. Su hábitat son los sitios húmedos, pinares abiertos, matorrales y tomillares sobre suelos arenosos básicos.

Debe de ser plantada entre los meses de septiembre a enero. Los bulbos se encuentran comercializados en centros de jardinería y grandes superficies principalmente. Allí los encontraremos en bolsas o a granel.

Iris azul

Según la época de floración y climatología reinante, su floración se produce entre los meses de marzo a mayo principalmente.

La zona de plantación debe de ser a pleno sol y como mucho en semisombra. El terreno debe de estar bien mullido y para la profundidad de plantación, podemos tener como referencia el doble del tamaño del bulbo como máximo. Eso sí, guardando siempre la verticalidad del bulbo en su plantación.

Una vez plantados se le realizará el primer riego, realizando posteriormente tantos como sea necesarios para mantener el substrato humedecido pero sin llegar al encharcamiento. Llegado el verano, se reducirán al máximo para facilitar su agostamiento, momento en el que se arrancarán, limpiarán y se guardarán en un sitio seco y en oscuridad hasta el momento de su plantación.

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Coles ornamentales

Las coles ornamentales son utilizadas como plantas de temporada sobre todo en invierno, si bien es cierto que también tienen un mercado interesante como flor cortada para arreglos florales. Su época de floración incluye las festividades navideñas, por lo que también forman parte de ese selecto grupo de las llamadas ‘las plantas de la Navidad’.

Su principal belleza reside en sus grandes hojas rizadas, su forma y su variado colorido cuando llega su estado de floración según la variedad. Es una planta clásica de la jardinería invernal y en arreglos florales participa como elemento que aporta vistosidad como también lo hacen algunas proteas.

¿Cómo es la col ornamental?

Su nombre científico es Brassica oleracea, está incluida dentro del grupo Acephala de las coles y en concreto se trata de un tipo que agrupa a diversas variedades dentro de esta especie. Pertenece a la familia CrucíferasBrassicaceae y es originaria de la costa del sur y del oeste de Europa.

Se la conoce popularmente como Col de jardín, Col ornamental (Zierkohl en alemán), Repollo de adorno o Berza ornamental.

Coles ornamentales

Es una planta que puede cultivarse como anual o bianual. Perenne de tallo corto con hojas dispuestas en una roseta densa, mantiene un porte pequeño que no suele exceder mucho de los 30 centímetros de altura cuando se trata de variedades de planta en maceta y de los 60 centímetros en el caso de las variedades destinadas a la flor cortada. En todos los casos, esa altura excede bastante más de la considerada mata cuando llega su floración.

Su raíz es pivotante porque proviene de semilla, no es excesivamente profunda pero muy robusta con gran cantidad de raicillas secundarias.

Sus hojas con aspecto carnoso crecen en roseta. Son grandes, redondeadas y rizadas o no, con matices rojos, rosado, amarillo y blanco en sus hojas centrales cuando va a florecer. Esta tonalidad se intensifica con el frío y en ellas reside su valor ornamental.

Florece bien entrado el otoño magnificando su colorido con la llegada del frío. Sus flores crecen en una inflorescencia.

Brassica oleracea grupo Acephala

Las coles pueden ser agrupadas en dos grandes bloques: Coles occidentales y coles orientales. Las coles ornamentales se incluyen dentro del primer bloque, si bien este está compuesto a su vez por diferentes grupos.

Grupo de coles occidentales:

  • Coliflores (Brassica oleracea grupo Botrytis). Son las típicas coles de pella blanca o de color. Se consumen sus inflorescencias en fase inicial y compacta.
  • Repollos (Brassica oleracea grupo Capitata). Se caracterizan por su denso acogollamiento, siendo consumidas sus hojas en ensaladas o cocidas.
  • Coles de Bruselas (Brassica oleracea grupo Gemmifera). Se cosechan durante varias semanas recolectando de ellas sus pequeñas coles que crecen a lo largo de su tallo principal.
  • Brécoles y Calabresas (Brassica oleracea grupo Italica). Se recolectan sus vástagos de unas 15 centímetros mientras sus flores están brotando. A él pertenecen los brécoles, brócoli y el bimi, un nuevo híbrido de brócoli con elevado valor nutricional.
  • Coles rizadas (Brassica oleracea grupo Acephala). Lo compone un grupo de coles rizadas entre las que se incluyen las coles ornamentales, tanto para su cultivo como planta en maceta como para flor cortada. Las coles del grupo Acephala contempla plantas de tipo bajas y altas. Las bajas no suelen superar los 40 centímetros de altura los 30 de diámetro, mientras que las altas pueden superar los 90 centímetros de altura con circunferencias alrededor de los 60.

El grupo de coles ornamentales (Brassica oleracea) actuales son fruto de una selección en la que se ha buscado su valor ornamental, siendo excelentes para la decoración de jardines durante la época fría del año.

Coles ornamentales

Variedades de coles ornamentales

El mercado de las coles ornamentales está distribuido en dos bloques:

  • Para plantas de temporada de otoño e invierno cultivadas en maceta.
  • Plantas para flor cortada empleadas en arreglos florales y con su cultivo realizado directamente en suelo.

En todos los casos se encuentran tanto variedades ya consideradas tradicionales como híbridas. Estas últimas componen las variedades más modernas y las de mayor aceptación por su crecimiento más compacto, rápido y aspecto ornamental más resaltado.

Variedades de coles ornamentales para su cultivo en maceta están a modo de ejemplo la Primadonna, Rose Bouquet, White Lady, White Chistmas, Coral Queen, Coral Prince, etc. Hay firmas que comercializan una determinada serie de híbridos como por ejemplo la Serir Kyoto F1 con sus variedades de hoja lisa Kyoto F1 Pink (rosa claro), Kyoto F1 Red Green (rosa oscuro), Kyoto F1 White Green (blanca),… o Kyoto F1 Violet Green (violeta), Kyoto F1 White Green (blanca),… en hoja rizada. Todas ellas suelen tener una referencia de venta como mezcla.

Otras variedades de coles ornamentales son catalogadas por empresas de venta de semillas y planteles simplemente como ‘tipo de hoja rizada’ y ‘tipo de hoja lisa’. En ellas seleccionan y agrupan aquellas variedades híbridas del mercado con un comportamiento vegetativo similar y son comercializadas como mezclas de diferentes variedades. Estas mezclas incorporan colores muy vivos blanco, rojo y rosa sobre verde y bronce.

En cuanto a las variedades de coles ornamentales para su cultivo como flor cortada, en general suelen ser plantas de mayor altura, entre 50 y 70 centímetros. Un ejemplo de estas variedades son Osaka F1 Green White de verde con el centro blanco, Sunset de color rojo brillante con ‘venas’ de color violeta y rosa,… e igual que en el caso anterior, mezclas sin nombre comercial de variedades con una selección propia entre las existentes en el mercado con características de crecimiento similar.

Cultivo de coles ornamentales en maceta

El cultivo de coles ornamentales en maceta es la modalidad más extendida en grandes y pequeños viveros. Todos ellos pueden partir su cultivo desde la siembra de la semilla o mediante la compra de plantel ya germinado en bandejas sembradas o bandejas de plantel en alvéolos.

La compra de semilla se realiza en sobres, normalmente de 1, 5 ó 10 gramos, por variedades individuales o en mezcla de ellas. Un gramo de semilla tiene alrededor de las 300 unidades y para 1.000 plantas de producción se necesitan unos 5 gramos de semilla. Su semillero se realiza en invernadero con calefacción desde finales de septiembre hasta principios de enero para una época de venta natural en España desde noviembre hasta principios de marzo.

Si se desea partir de semilla, la siembra se realiza en bandejas con un sustrato para semilleros, que a nivel de aficionado puede servir el sustrato para plantas de interior. Una vez esparcidas las semillas, estas se recubren ligeramente, se riegan y se les mantiene húmedas hasta su completa germinación. Estas germinan a una temperatura aconsejada de unos 18 a 20ºC. A los 5 días comenzarán a germinar y estarán listas para ser repicadas entre las 7 y 8 semanas.

Cuando las plántulas tengan de 4 a 6 hojas verdaderas, se pueden plantar (repicar) a su maceta definitiva: de 12 a 14 centímetros de diámetro. El sustrato elegido es un ‘sustrato para plantas de exterior’ o ‘sustrato universal’. Su cultivo se realiza en esta fase al exterior y suele durar sobre los 60 días en función de la temperatura. Esta es aconsejable que sea sobre los 15ºC de noche para obtener un mejor color de hoja.

Como hemos adelantado, su época de venta o plantación en el jardín en España se sitúa desde noviembre hasta principios de marzo.

Coles ornamentales

Cultivo de coles ornamentales para flor cortada

Las variedades son de tallo más largo, con unos colores muy originales que dan a las composiciones y ramos unos toques muy especiales. Su cultivo suele comenzar con la compra de planteles en alvéolos. Su plantación se suele realizar en tablas en el suelo como si del cultivo del clavel o lilium se tratase. La densidad de trasplante está sobre las 25 a 40 plantas por metro cuadrado según la variedad.

Previamente se habrá de acondicionar el suelo, labrándolo y fertilizándolo adecuadamente. El riego empleado puede ser por micro aspersión o localizado como por ejemplo mangueras exudantes. Su plantación y venta es más amplia que los cultivos realizados para su venta como planta de temporada. Aun así, se debe de tener en cuenta que es un cultivo que requiere bajas temperaturas para que adquiera su adecuado color de hoja.

Su cultivo se realiza a pleno sol. Se puede iniciar su plantación desde finales de agosto a enero. La época de cosecha está alrededor de los dos meses después de la plantación. Para su correcto cultivo hay que ir eliminando las hojas de la base varias veces para conseguir un tallo más alto.

Plagas de las coles ornamentales

Las plagas más comunes son las propias de las coles:
Mariposa de la col u oruga de la col (Pieris brassicae). Mariposa de 5 a 6 centímetros de color blanco con una mancha oscura en la esquina superior de las alas superiores. Aparece básicamente en primavera, las hembras realizan la puesta sobre el envés de las hojas y las orugas provocan el daño llegando a defoliar casi toda la planta.

Pulgón verde (Myzus persicae). El color del pulgón puede variar ligeramente, siendo normal el tono amarillo o verde. Suele medir en torno a 2 milímetros y su época de máximo ataque se sitúa en primavera, disminuye en verano y vuelve a aumentar en otoño. Este provoca un abarquillamiento de las hojas y brotes, una debilitación de la planta y además es portador de virus y atrayente de hongos como la negrilla debido a la producción de melaza.

Pulgón negro (Aphis fabae). Similar al Pulgón verde pero de color verde oscuro tirando a negro. Sus daños también son similares.

Mosca blanca de las crucíferas (Aleyrodes proletella, A. brassicae). Es la peculiar mosca blanca que presenta cabeza y tórax oscuros, alas blancas y 3 manchas oscuras en el par anterior. Las hembras realizan sus puestas en el envés de la hoja.

Enfermedades de las coles ornamentales

Alternaria (Alternaria brassicae). Sus primeros síntomas se observan en las hojas nuevas, formando una especie de manchas negras de un centímetro de grosor en formas de anillos concéntricos.

Mildiu (Peronospora brassicae). Su ataque provoca manchas de tamaño reducido en el haz de las hojas, de color amarillo. Por el contrario y como parte visible del micelio, en el envés se forma una pelusilla de color grisáceo.

Coles ornamentales

Cuidados de las coles ornamentales

Los cuidados de las coles ornamentales a nivel de flor cortada se limitan al cambio de agua periódico como se realiza normalmente junto con las flores que componen el arreglo floral. Es cierto que suelen durar más tiempo que el resto de las flores que le acompañan y esto es debido a las características propias de la planta. Lo mismo sucede con las proteas, helecho de cuero, etc.

En cambio, las coles ornamentales en calidad de plantas de temporada, su ciclo ornamental, una vez plantadas en el jardín, puede durar muchas semanas.

Son plantas de temporada de otoño e invierno, por lo que su período de plantación se sitúa desde noviembre hasta principios de marzo. Su ubicación a pleno sol creando o formando centros decorativos naturales. Es muy atractivo observar que el centro de la planta presenta una coloración diferente a las hojas exteriores.

La densidad de plantación dependerá de la variedad, pero el objetivo es que queden plantadas bastante juntas, pudiendo ser de unas 25 a 40 plantas por metro cuadrado.

El terreno debe ser fértil o que esté mejorado con el aporte de humus o compost. Una vez plantadas, los riegos deben ser regulares, evitando que se seque la tierra. También es importante aplicar un fertilizante un mes después de la plantación.

Sus hojas conviene eliminarlas conforme veamos que se estropean o quedan parcialmente secas para mejorar el aspecto a la planta.

La duración de la planta es de unos dos meses aproximadamente, cuando finaliza su buena apariencia se desecha ya que no tiene ningún sentido decorativo y no vale la pena mantenerla.

En jardinería pública y gracias a su vistosidad y resistencia al frío, ha convertido a estas coles ornamentales como imprescindible en los arreglos navideños junto con otras plantas naturales como el Cyclamen persicum, Euphorbia pulcherrima (Poinsettia), Primula acaulis, etc.

Plantas en la decoración de belenes

Con la Navidad llegan los belenes, también llamados nacimientos, pesebres o portales como representación plástica de escenas de la Natividad de Jesús de Nazaret y que normalmente se exponen en las iglesias, en los hogares, además de centros comerciales, plazas en las ciudades, etc.

La utilización de plantas en la decoración de belenes es una práctica muy común, sobre todo en aquellos de gran tamaño. Entre las plantas más utilizadas están las Poinsettias (Euphorbia pulcherrima), Cyclamen (Cyclamen persicum), Prímulas, coles ornamentales… y ciertas coníferas como por ejemplo las Thujas.

Plantas en la decoración de belenes

Siempre nos referimos a flores y plantas frescas, naturales, vivas,… pero en este caso también y como guiño a ellas, nos referimos a sus reproducciones en cartón piedra, cerámica o cualquier otro material en el que pueden ser representadas.

El belén en síntesis se representa por lo general con Jesús, María y José en un pesebre, o según otras tradiciones, en un establo, granero o cueva, donde, según Lucas 2,7, nació el niño. La tradición los acompaña de una mula y un buey, según el relato de los Evangelios apócrifos y del texto del libro del profeta Isaías y de Habacuc. Evidentemente se suman los reyes, los pastores… pero actualmente, la ornamentación de cara al público juega un papel importantísimo y como no, las plantas llegan a ser parte fundamental en ello.

Así, según la manera y estilo de representarlos podemos establecer cuatro categorías como son los belenes bíblicos que se recrean en el paisaje, personajes, enseres y costumbres de la Palestina del momento; los belenes populares, que no se ajustan a la historia… que incluso incluyen anecdóticamente a cerdos, animales impuros para las costumbres judías; los belenes regionales con reproducción del paisaje, personajes, vestimentas, utensilios y costumbres del lugar donde se hacen; y los belenes modernos en lo que la imaginación pone sus límites.

Plantas en la decoración de belenes

Pero como decimos, independientemente de la categoría a la que pertenece el belén, cuanto más grande es en su tamaño de piezas, más importante son las plantas que intervienen en su decoración, puesto que sus proporciones permiten una mejor integración.

Estas plantas vivas son incorporadas con sus respectivas macetas camufladas con rocas, paja, corteza de pino, tepes, arena… integrándose perfectamente en el escenario creado. En cambio, las reproducidas con materiales sintéticos tienden a ‘naturizar el paisaje’ o los diferentes escenarios que en ellos se recrea. En este último caso tiene cabidas todas aquellas que pueden ser válidas en un paisaje típico de Palestina: cactus, palmeras, agaves, pequeños huertos con sus hortícolas, además del arbolado paisajístico.

Cultivo del tomate

El cultivo del tomate requiere de un manejo racional de los factores climáticos si se desea obtener buenos resultados ya que todos ellos se encuentran estrechamente relacionados y la actuación sobre uno de estos incide sobre el resto. De hecho, los comercializadores de semillas dicen que no venden semillas sino genética, ya que la respuesta de una variedad determinada es muy distinta según las condiciones en las que se desarrolle su cultivo.

Por lo tanto, para el cultivo del tomate tenemos que tener en cuenta todos los factores. A continuación exponemos algunos datos, pero debemos de saber que hablamos de niveles óptimos para obtener los máximos resultados. Esto sólo es posible mediante invernaderos dotados con gran tecnología en los que se controla el nivel de fertilización y clima. Para cultivos fuera de este contexto, simplemente datos orientativos para detectar cual o cuales pueden ser los causantes de alguna deficiencia de cultivo.

Tipos de tomate

Basta con pasear por un mercado o la sección de frutas y hortaliza de cualquier supermercado, para darse cuenta de la gran cantidad de tipos de tomate que podemos encontrar.

Hay tomates para ensalada. Suelen ser de tamaño mediano a grande, muy aromáticos de sabor agridulce, jugosos, sabrosos y de pulpa carnosa.

Los hay con nombre asociado a una región, como por ejemplo el tomate valenciano. Son muy carnosos y apreciados por el consumidor por su sabor.

Novedades recientes como los tomates Kumato, de color verde oscuro… casi negros y con un aspecto brillante y muy elegante. Este tomate esconde en su interior un buen aroma y exquisito sabor.

El popular tomate pera, de intenso sabor y aroma, muy utilizados de forma tradicional en la elaboración de conservas, salsas, purés y gazpachos. Tienen forma oval alargada y redondeada en las puntas.

El tomate en rama se ha popularizado mucho en esta última década. Es de tamaño medio a pequeño, de piel fina y color rojo vivo. Al estar presentado en la rama en forma de ramillete permite que se conserve mucho más tiempo.

Los tomates cherry de pequeño tamaño y últimamente en una diversidad de colores que van desde el rojo intenso al amarillo, pasando por toda una gama de naranjas. Tienen un sabor muy dulce y equilibrado, aportando toques de color y forma en ensaladas y cócteles.

Y todo esto como ejemplos, porque los hay tipo canario, raf, muchamiel… en definitiva, tipos de tomate para todos los gustos.

Temperatura

El tomate es menos exigente que la berenjena y el pimiento, siendo su temperatura óptima de desarrollo entre 20 y 30ºC durante el día y entre 1 y 17ºC durante la noche.

Temperaturas más altas afectan a su fructificación y desarrollo del sistema radicular. Temperaturas inferiores a 12-15ºC también ocasionan problemas en el desarrollo de la planta.

Para una fecundación adecuada, las temperaturas deberían estar entre los 12ºC y 25ºC. Del mismo modo, para una maduración ideal, las temperaturas deberían estar comprendidas entre los 10ºC y 30ºC.

Consejos para cultivar tomates

Humedad

La humedad relativa óptima para el cultivo del tomate oscila entre un 60% y un 80%. Más altas favorecen el desarrollo de enfermedades aéreas, el agrietamiento del fruto y dificultan la fecundación. Inferiores también afectan a la fecundación ya que también dificultan la fijación del polen al estigma de la flor.

Luminosidad

Unos valores bajos de luminosidad inciden de forma negativa sobre los procesos de la floración, fecundación, así como el desarrollo vegetativo de la planta. La tomatera crece muy débil, con entrenudos muy largos y hojas extremadamente grandes y tiernas. Las plagas y enfermedades serán muy frecuentes en estas circunstancias.

Terreno

La tomatera no es muy exigente en cuanto a suelos, sobre todo si están bien drenados. Pero prefiere sueltos de textura silíceo-arcillosa y ricos en materia orgánica.

El pH debe de ser ligeramente ácido y es la especie cultivada en invernadero que mejor tolera las condiciones de salinidad tanto del suelo como del agua de riego.

Tomatera

Marco de plantación de la tomatera

El marco de plantación de la tomatera depende notablemente del porte de la planta y de la variedad comercial cultivada.

El más consensuado es de metro y medio entre líneas y medio metro entre plantas. Si la variedad es de porte medio podemos aumentar la densidad de cultivo a 2 plantas por metro cuadrado (1 metro entre líneas por 0,5 metros entre plantas).

En cultivos intensivos en invernadero con tomateras tutoradas mediante sistemas de perchas, las líneas deben ser ‘pareadas’, dejando pasillos amplios de aproximadamente 1,3 metros y una distancia entre líneas conjuntas de unos 70 cm.

Poda de formación de la tomatera

Existen variedades de tomate determinadas e indeterminadas. Las primeras dejan de crecer a cierta altura, mientras que las segundas lo hacen, como su definición indica, de forma indeterminada.

En el caso de las variedades de tomatera indeterminadas es imprescindible una poda de formación para establecer la estructura principal de la planta.

Esta comienza a los 15-20 días del trasplante con la aparición de los primeros tallos laterales, que serán eliminados, al igual que las hojas más viejas, mejorando así la aireación del cuello y facilitando la realización del aporcado.

Con esta técnica se determinará el número de tallos a dejar por cada planta. Normalmente se dejan uno o dos tallos (brazos), aunque en tomates de tipo Cherry suelen dejarse tres y hasta cuatro tallos.

Aporcado y rehundido

Tras la poda de formación, se suele aplicar la técnica del aporcado con el fin de favorecer la formación de un mayor número de raíces alrededor de la base del tallo.

Esta técnica consiste en cubrir la parte inferior de la planta con la tierra de alrededor del surco.

La técnica del rehundido es una variante del aporcado y se lleva a cabo doblando la planta, tras haber sido ligeramente rascado cierta altura del tallo, hasta que entre en contacto con la tierra gran parte de la base del tallo de la misma, cubriéndola ligeramente con tierra, dejando fuera la yema terminal y un par de hojas. Así la planta re-enraíza en la zona en contacto con el suelo.

Tutorado de la tomatera

Para mantener la planta erguida y evitar que las hojas y sobre todo los frutos toquen el suelo, es imprescindible el tutorado.

Este mejora la aireación general de la planta y favorece el aprovechamiento de la luz y la realización de trabajos de limpieza, tratamientos, recolección, etc., repercutiendo directamente en la producción final, calidad del fruto y control de las enfermedades.

Este puede ser mediante cañas, colocando una por planta y formando cada dos líneas una especie de barraca. Es recomendable colocar cañas trasversales para darle más robustez a la estructura ya que el peso final de la planta es muy elevado.

Las plantas de tomate se irán sujetando a la estructura mediante rafia, teniendo la precaución de dejar muy holgadas las ataduras ya que de no ser así, al poco tiempo estrangularán a la planta.

Otra técnica, en especial en invernadero, es la de colocar un hilo de polipropileno (rafia) sujeto de una parte a la zona basal de la planta y del otro a un alambre situado a determinada altura por encima de la planta, normalmente a 1,8 ó 2,5 metros sobre el suelo.

Conforme crece la planta se va liando o sujetando al hilo tutor mediante anillas, hasta que la planta alcance el alambre.

Determinados tipos de plantas de tomate desarrollan plantas muy largas, por lo que a partir de la llegada de estas a la parte superior de la estructura tenemos tres opciones:

  • Bajar la planta descolgando el hilo
  • Dejar que la planta crezca cayendo por propia gravedad
  • Dejar que esta vaya creciendo horizontalmente sobre la estructura superior

Destallado o deshijado

La planta de tomate tiende a brotar por todas sus yemas. Por ello se hace imprescindible la eliminación de brotes axilares para mejorar el desarrollo del tallo principal.

El deshijado debe realizarse con la mayor frecuencia posible para evitar la realización de heridas graves y que pierda fuerza el tallo estructural principal.

Estos cortes deben ser limpios para evitar la posible entrada de enfermedades. En épocas de riesgo es aconsejable realizar tras un deshijado un tratamiento fitosanitario con algún fungicida-bactericida cicatrizante, como pueden ser los derivados del cobre.

Deshojado

Se realiza básicamente sobre las hojas viejas y/o enfermas para facilitar la aireación, mejorar el color de los frutos, etc.

Sobre todo en variedades de tomate tipo racimo, es recomendable el despunte de inflorescencias y aclareo de frutos. Con esta técnica se consigue homogeneizar y aumentar el tamaño de los frutos restantes, así como su calidad.

Podemos realizar el aclareo sobre los racimos, dejando un número de frutos determinado y eliminando los frutos inmaduros, dañados, de calibre no deseado y mal posicionados.

planta de tomate

Fertirrigación

Es el sistema de riego y abonado más eficiente, no sólo de ahorro de agua y nutrientes, sino que evita que la planta sufra estrés hídrico y vegete muchísimo mejor.

El método generalizado es mediante riego por goteo y la frecuencia de riego y nivel de fertilización irá en función del estado fenólogico de la planta así como del ambiente en que ésta se desarrolla (tipo de suelo, condiciones climáticas, calidad del agua de riego, etc.).

Dar información de frecuencia es arriesgado ya que todo depende de la tensión del agua en el suelo, tipo de suelo (capacidad de campo, porcentaje de saturación), evapotranspiración del cultivo, eficacia de riego (uniformidad de caudal de los goteros), calidad del agua de riego (a peor calidad, mayores son los volúmenes de agua, ya que es necesario desplazar el frente de sales del bulbo de humedad), etc.

En cultivos hidropónicos el riego está totalmente automatizado, existiendo distintos sistemas para determinar las necesidades de riego del cultivo durante todo su ciclo.

En cuanto al nivel de nutrición, debemos tener en cuenta la relación nitrógeno-potasio a lo largo de todo el ciclo de cultivo. Como base tenemos las siguientes relaciones:

  • Desde el trasplante hasta la floración 1/1.
  • Durante el período de recolección de 1/2 e incluso 1/3.

Para incidir en el potasio lo podemos emplear en forma de nitrato potásico, sulfato potásico, fosfato monopotásico…

Como es sabido, el fósforo juega un papel relevante en las etapas de enraizamiento y floración, ya que incide sobre la formación de raíces y el tamaño de las flores. En épocas frías del año hay que aumentar su aporte, así como de magnesio, para evitar fuertes carencias por el enfriamiento del suelo.

Otro macro elemento fundamental es el calcio. Su carencia provoca la necrosis apical, técnicamente conocida como blossom end rot.

Y entre los microelementos, debemos prestar especial atención al hierro ya que juega un papel primordial en la coloración de los frutos. Otros microelemento importantes son el manganeso, zinc, boro y molibdeno.

Teniendo en cuenta la relación de nutrientes antes mencionada, existen en el mercado complejos solubles con microelementos que nos facilitarán la tarea de crear equilibrios nutricionales determinados. La dosis variará según la calidad del agua, el suelo y el estado de desarrollo de la planta.

Si por el contrario deseamos partir de abonos simples solubles, ya que son más baratos, para abaratar costes, los más recurridos son:

  • Sólidos solubles: nitrato cálcico, nitrato potásico, nitrato amónico, fosfato monopotásico, fosfato monoamónico, sulfato potásico, sulfato magnésico…
  • Líquidos: ácido fosfórico, ácido nítrico…

Nunca perdamos de vista la nutrición con los microelementos ya que resultan vitales para una adecuada nutrición. Si estos se aportan de forma quelatada mucho mejor ya que serán mejor asimilados por las plantas.

La carencia más habitual en el tomate es la clorosis férrica, sobre todo si se cultiva en suelos calizos. Esta carencia acorta el ciclo vital de las plantas, los rendimientos disminuyen y los frutos son de peor calidad.

El producto más adecuado para su control es el quelato férrico. Este debe de aplicarse a bajas dosis y distribuido a lo largo del cultivo.

En el mercado encontramos numerosos correctores de carencias, tanto de macro como de micronutrientes, aplicables vía foliar o riego por goteo, aminoácidos de uso preventivo y curativo, etc. que en su conjunto ayudan a las plantas en momentos críticos de su desarrollo o bajo condiciones ambientales desfavorables.

Pero también encontramos otros productos como son los ácidos húmicos y fúlvicos, correctores salinos, etc. que mejoran las condiciones del suelo y facilitan la asimilación de los nutrientes existentes en la planta. De hecho, las sustancias húmicas complejan la mayoría de los metales presentes en el suelo, aumentando su disponibilidad en las plantas, y los aminoácidos también juegan un papel importante en la captación de nutrientes.

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Los bulbos son como semillas gordas

Los Tulipanes, los Jacintos, las Clivias, los Lirios, las Dalias, los Gladiolos… son plantas bulbosas que en épocas concretas del año pueden decorar nuestro jardín. Pero también lo son las Patatas o las Cebollas con las que nos alimentamos.

Tillandsias

Bajo el nombre genérico de Tillandsias se conocen una serie de plantas ornamentales con unas peculiaridades en cuanto a su cultivo. Muestra de ello son los nombres comunes de clavel del aire o Flor del aire por ejemplo con el que se refieren a ellas.

En realidad, Tillandsia es el nombre del género de estas plantas, pertenecientes a la familia de las Bromeliáceas. Este género agrupa a unas 500 especies, todas ellas nativas del continente americano, exactamente de la Sudamérica tropical, Chile, Argentina (zona de los Andes) y del sur de Estados Unidos. Las podemos encontrar en desiertos, bosques y montañas de estas regiones.

El género Tillandsia lo acuñó Carlos Linneo en 1738, en honor al médico y botánico finlandés Dr. Elias Tillandz. Existen más de 500 especies de Tillandsia, todas ellas nativas del continente americano, exactamente de la Sudamérica tropical, Chile, Argentina (zona de los Andes) y del sur de Estados Unidos. Así las podemos encontrar en diversos hábitats como los desiertos, bosques y montañas de estas regiones.

Las Tillandsias, según la especie pueden ser suculentas o semisuculentas, tienen la peculiaridad de obtener su alimento mediante unas escamas en sus hojas que retienen el agua de lluvia y del ambiente, además de los elementos nutritivos que esta contiene. Estas escamas son en realidad células adaptadas llamadas tricomas.

Por ello no les hacen falta las raíces. De hecho no tienen, si en cambio una especie de «ganchos» con los que se fijan a cualquier soporte vegetal o mineral.

La floración de las Tillandsias, según la especie en concreto, puede ser muy breve o prolongarse a lo largo de muchos meses. Algunas de estas flores son perfumadas, como en el caso de la Tillandsia duratii.

Otra de las peculiaridades es que ciertas especies como la Tillandsia bulbosa, Tillandsia caput-medusae o Tillandsia seleriana son mirmecófilas, es decir, que viven en simbiosis con ciertos insectos, en este caso con las hormigas.

Las Tillandsias son epifitas, creciendo en la naturaleza normalmente sobre otras plantas, generalmente en árboles, sin llegar a ser parásitos. También las hay litofitas que por lo tanto crecen sobre rocas, techos, líneas de teléfono, etc. Muy pocas especies crecen directamente en la tierra.

Este género se puede dividir básicamente entre Tillandsias verdes y Tillandsias grises.

Las Tillandsias verdes requieren por lo general un clima templado y lluvioso, creciendo normalmente en la sombra, ya sea en la tierra o sobre árboles en el sotobosque.

En cambio, las Tillandsias grises son casi todas las especies simpatizantes de las áreas sub-húmedas o sub-áridas con alta humedad del aire. En su conjunto prefieren el sol, por lo cual se encuentran en las zonas altas del bosque o en rocas.

Especies de Tillandsia

Entre las especies de Tillandsia más populares se encuentran:

  • Tillandsia acosta-solisii
  • Tillandsia aequatorialis
  • Tillandsia aeranthos (conocida popularmente como clavel del aire)
  • Tillandsia araujei (popularmente conocida como planta aérea de Sao Paulo)
  • Tillandsia arequitae (conocida popularmente como clavel del aire del Arequita)
  • Tillandsia baileyi Rose
  • Tillandsia balbisiana Schult
  • Tillandsia bartramii
  • Tillandsia brenneri
  • Tillandsia bulbosa Hook.
  • Tillandsia capillaris
  • Tillandsia caput-medusae (conocida popularmente como planta pulpo)
  • Tillandsia cernua
  • Tillandsia circinnata
  • Tillandsia cucullata
  • Tillandsia cyanea
  • Tillandsia duratii
  • Tillandsia dyeriana
  • Tillandsia excelsa
  • Tillandsia fasciculata
  • Tillandsia festucoides Brongn
  • Tillandsia flabellata
  • Tillandsia flexuosa
  • Tillandsia geissei
  • Tillandsia insignis
  • Tillandsia ionantha
  • Tillandsia juncea
  • Tillandsia landbeckii
  • Tillandsia lindenii Regel
  • Tillandsia lineatispica
  • Tillandsia maxima
  • Tillandsia meridionalis
  • Tillandsia montana
  • Tillandsia paucifolia Baker
  • Tillandsia pruinosa
  • Tillandsia recurvata
  • Tillandsia setacea
  • Tillandsia streptophylla
  • Tillandsia stricta
  • Tillandsia tectorum
  • Tillandsia tenuifolia
  • Tillandsia usneoides (conocida popularmente como musgo español)
  • Tillandsia utriculata
  • Tillandsia variabilis Schltdl
  • Tillandsia xeropgraphica Rohw

Estas plantas permiten realizar numerosas composiciones ornamentales jugando con diferentes especies de Tillandsia. Estas exóticas composiciones se realizan normalmente sobre troncos o trozos de corteza, corcho virgen de alcornoque, etc. Las composiciones suelen realizarse con diferentes adhesivos, entre los que se incluye la silicona caliente.

El naranjo

El naranjo es un árbol de porte pequeño y hoja perenne, muy sensible a las bajas temperaturas, requiere mucha luz y agua para la maduración de los frutos llamados naranjas. Sus flores son blancas y muy aromáticas.

El naranjo, tanto dulce como amargo, pertenece a la familia de las Rutáceas y su nombre científico es el Citrus sinensis.

En plantaciones comerciales de naranjos, los árboles suelen ser de porte reducido, con un solo tronco del que salen tres ramificaciones principales desde una altura entre 50 y 80cm.

Las hojas del naranjo son de limbo grande, alas pequeñas y espinas no muy acusadas. En el Hemisferio Norte, sobre el mes de marzo y coincidiendo con el incremento de las temperaturas comienza la brotación y la floración.

Sus flores, también llamadas ‘azahar’ son ampliamente conocidas por su agradable aroma y se presentan solas o agrupadas con o sin hojas.

El fruto del naranjo es una baya técnicamente denominada hesperidio. Su interior está dividido en aproximadamente diez pequeños huecos unidos entre sí llamados gajos y en cuyo interior crecen las semillas y los sacos de zumo que contienen los ácidos orgánicos y azúcares.

El fruto se puede dividir en tres zonas, la más externa es el exocarpo o flavedo que está formado por una epidermis y que presenta pequeñas vesículas que contienen aceites esenciales, usados en colonias, aromatizantes, etc. También contienen cloroplastos, por lo que los frutos inmaduros son verdes. Con la maduración se pierde clorofila dejando a la vista otros pigmentos coloreados, principalmente los carotenoides que son los responsables del color anaranjado del fruto y que además aumentan en contenido durante la maduración.

La siguiente capa es el mesocarpo o albedo de aspecto esponjoso y de color blanco. Y por último se encuentra el endocarpo o pulpa que es donde se encuentran los sacos de zumo y las semillas.

Como especie subtropical no tolera las heladas, y cuando estas se producen quedan dañados tanto las flores y los frutos, como la vegetación. Por debajo de los 3-5ºC bajo cero, la planta muere.

A nivel de cultivo, el naranjo requiere importantes cantidades de agua y cuando no las proporcionan las precipitaciones, los riegos se hacen necesarios. Necesita luz para los procesos de floración fructificación, que se producen principalmente en la parte exterior de la copa y faldas del árbol. El naranjo es muy sensible al viento y a la salinidad, con preferencia por suelos arenosos o franco-arenosos, profundos y sin caliza.

Las naranjas

Las naranjas son el fruto del naranjo. Frescas son bajas en calorías y fuente de fibra, potasio, vitamina C y folato. Ayudan a prevenir el cáncer y las enfermedades cardiovasculares. La naranja, junto con el plátano y la manzana, es uno de los frutos más consumidos en el mundo.

La naranja es un fruto cítrico redondo de color naranja y consumido mayoritariamente en invierno en el hemisferio norte, aunque como consecuencia de la globalización (gracias a países productores como Argentina, Brasil, Estados Unidos, España, etc.) ya se consume durante todo el año. El color de su “carne” es generalmente naranja, excepto en las variedades de pulpa roja.

Su pulpa interior es también anaranjada y está formada por pequeñas bolsitas llenas de zumo llamadas gajos. En su interior también crecen las semillas y en su zumo, se concentran los ácidos orgánicos y azúcares. De ella también se extraen aceites esenciales muy utilizados en perfumería y cosmética.

La naranja se consume tanto en fresco como su zumo exprimido. Vía industria podemos encontrar también la naranja envasada como conserva o en botellas o brick en el caso de su zumo. Otras variantes para el consumo de la naranja es en compotas, mermeladas, para consumo como fruta deshidratada, etc.

El consumo medio mundial es de 12 kg por persona y año, aunque esta cifra varía según los países. Los países desarrollados tienen una media de 28 kg/persona y año, mientras que los países en vías de desarrollo son de 6 kg/persona y año. La cifra más alta de consumo es en Estados Unidos alcanzando los 60 kg, mientras que en Europa Occidental es de 40 kg. Estas cifras contrastan con el consumo en los anteriormente Países del Este, 5 kg por persona.

Existen una gran cantidad de variedades de naranjas que se diferencian entre sí por la forma, el tamaño, el color de la pulpa (naranja o rojo), por el sabor dado que hay naranjas más dulces o más ácidas, por la época de maduración, y por la existencia o no de semillas.

En el hemisferio norte, la época de recolección va desde principios de octubre hasta mediados de junio en función de las variedades. La maduración interna y externa de las naranjas se rige por mecanismos diferentes por lo que muchas veces un fruto que alcanza la maduración para ser comercializado, todavía su color no es el apto para entrar en el mercado. En estos casos, los frutos se someten a un proceso de desverdización provocando la coloración del fruto mediante tratamientos con etileno en cámaras especiales.

La conservación de las naranjas en cámaras frigoríficas a una temperatura ligeramente superior a su punto de congelación, prolonga el periodo de buenas condiciones organolépticas del fruto y reduce el ataque de hongos.

Tipos de naranja

Si hablamos de tipos de naranja podríamos establecer tres principales, con un mayor o menor número de variedades dentro de ellos: navel, blancas y sanguinas. También, dentro del grupo de cítricos naranjas hay dos especies: el naranjo dulce y el naranjo amargo. Como los frutos del naranjo amargo no tienen mucha importancia comercial sólo nos centraremos en el naranjo dulce.

Así, los tipos de naranja son la Navel que se caracteriza por su ombligo y su consumo en fresco. Las Blancas que carecen de ombligo y son muy utilizadas en la industria del zumo. Y el tipo Sanguinas, que se distinguen fácilmente del resto por su característica coloración rojiza tanto en pulpa como en corteza.

Naranja del tipo Navel

Es una de las mejores frutas de mesa dentro de este grupo de cítricos. Como fruto de industria no se usa en la transformación para zumo ya que da menor cantidad y el cual además al poco tiempo desarrolla sabor amargo debido a un compuesto que se encuentra en muy pequeña cantidad llamado limonina, y que sólo se desprende cuando se exprime la naranja.

Cuando destacamos su ombligo como característica, es porque tiene una especie de pequeño fruto rudimentario que queda incluido en el fruto principal por su zona opuesta a la unión del fruto con las hojas.

Las naranjas Navel son de madurez precoz, sin semillas de gran tamaño, corteza con facilidad de pelado, de color naranja intenso, sabor dulce y agradable.

Se cultiva en países como España, Marruecos, Turquía, Sudáfrica, California, Australia, Uruguay, Argentina… y entre las variedades más importantes están Navelina, Washington Navel, Newhall, Navelate y Lane late por ejemplo.

Naranja del tipo Blancas

Su nombre proviene de cuando se utilizaba en sus comienzos para diferenciarlas de las variedades Navel o de las de Sangre. Se caracterizan por la carencia de ombligo en sus frutos, una acidez inferior a la de otros grupos de variedades y la ausencia de sabor amargo en su zumo.

Dentro de este grupo son muy utilizadas en la industria del zumo. En cuanto a las variedades más destacadas se encuentran la Salustiana y Valencia Late. Los mayores productores de este tipo de naranjas son Argentina, Australia, California, Florida, Marruecos, Uruguay, etc.

Naranja del tipo Sanguinas

Originarias de China, su fruto es de tamaño mediano a pequeño, con forma alargada o redondeada según la variedad, de corteza fina y elevado contenido en zumo. Se les llama Sanguinas porque sus frutos poseen el carácter distintivo del color rojo en la pulpa, zumo y corteza, debido a unos pigmentos llamados antocianos. Para que esto ocurra (enronquezca fuertemente) se deben dar bajas temperaturas nocturnas y esperar a que el fruto adquiera este tono rojizo hasta otoño o invierno del Hemisferio Norte.

El sabor de estas naranjas recuerda al de las frambuesas o cerezas, rasgo más acusado en las variedades de pulpa con una coloración más intensa. Destacan las variedades Doble fina, Entrefina, Maltaise Sanguine, Moro, Sanguinelli, Tarocco, Tomango, Washington Sanguina, etc.

Las naranjas de esta variedad no son aptas para la industria dado que los pigmentos suelen proporcionar un color oscuro al zumo. Sin embargo en Italia se produce un zumo de naranjas sanguinas atractivo y refrescante que recuerda al zumo del tomate.

El cuidado de los Abetos de Navidad

El cuidado de los Abetos de Navidad es una de las cuestiones que más preocupa a sus propietarios, ya sea porque pretenden mantenerlos año tras año o bien desean plantarlos tras estas fiestas en el jardín o directamente en el bosque.

El cuidado de los Abetos de Navidad sólo es efectivo si partimos de un abeto perfectamente enraizado en su contenedor. Recordemos que hay empresas que los cultivan sólo para utilizarlos en estas fiestas, los arrancan a raíz desnuda, podándolas drásticamente sin posibilidad de enraizado.

Por lo tanto, lo primero, asegurarnos en el momento de la compra de que adquirimos un Abeto de Navidad perfectamente enraizado en su contenedor.

Bajo este concepto, se comercializan distintas variedades e incluso especies, todas ellas de porte piramidal. Entre las diferentes especies disponibles se encuentra el Abeto Abies nordmanniana, también llamado Abeto del Cáucaso, Pinus nordmanniana Steven, Abeto de Normandía…, pertenece a la familia de las Pináceas y siendo uno de los abetos más utilizados y populares como árbol de Navidad.

El cuidado de los Abetos de Navidad

Estos abetos han sido cultivados especialmente para la Navidad. Al haber sido sacados de su hábitat natural, partimos de que tienen dificultades para sobrevivir, si bien al haberse aclimatado en el vivero, si lo cuidamos debidamente, sus posibilidades de crecer y desarrollarse están prácticamente garantizadas.

En cuanto a la temperatura, estos Abetos son plantas de exterior y necesitan temperaturas frescas para desarrollarse bien, por lo que debemos mantenerlos el menor tiempo posible en el interior del hogar. Durante este tiempo debemos situarlos en un lugar alejado de las fuentes de calor, como radiadores, estufas o chimeneas. Siempre debemos elegir para él el lugar más fresco posible.

Respecto al riego, como dentro de la casa las temperaturas son altas, necesita un riego más frecuente que si estuviera situado en el exterior. Lo ideal es regarlo cada dos o tres días, aportando una cantidad suficiente de agua como para que no sólo la capa superficial de la tierra se moje, sino que ésta llegue a todas las raíces.

El cuidado de los Abetos de Navidad

Hay que tener cuidado de no regar en exceso para que el agua no ensucie el suelo. Lo mejor es regar un poco, esperar que la tierra absorba bien el agua y luego volver a regar un poco más, para que se empape poco a poco y las raíces se humedezcan bien.

Si optamos por poner un plato para la recogida del agua sobrante, es importante retirarla, ya que la acumulación de esta en la base puede dañar las raíces.

Podemos añadir un fertilizante al agua de riego. En tal caso, que sea un abono equilibrado y a la dosis de mantenimiento recomendada por el fabricante.

En el cuidado de los Abetos de Navidad también está el rociarlo con agua fresca para compensar la falta de humedad del ambiente. Eso sí, en la medida de lo posible para no estropear los adornos navideños.

Con respecto a ellos, en el momento de su colocación, hay que tener cuidado de no dañarlo, sobre todo las yemas que se encuentran en los extremos de las ramas.

Si se coloca un adorno en el ápice, hay que respetar la yema de la guía, ya que ésta es importantísima para los Abetos. Si este pierde su guía, su crecimiento se desvirtuará, el árbol perderá su forma piramidal, tendiendo hacia una forma aparasolada y acelerando su envejecimiento.

Una vez finalizada las fiestas navideñas, lo sacaremos al exterior lo antes posible ya que es el mejor ambiente para su desarrollo.

abetos de Navidad

Variedades de abetos de Navidad

Llegada la Navidad, la colocación en el hogar (además de centros comerciales, plazas en los pueblos, etc.) de un pequeño pino o abeto es uno de los actos más significativos. Sin embargo, no es suficiente su presencia, sino que es necesario llenarlo de adornos de todo tipo, como esferas de cristal, figuras diversas colgantes, el popular espumillón e incluso la iluminación.

El árbol de navidad viene representado por coníferas, pero de forma industrial… ¿qué variedades de abetos de Navidad podemos encontrar?. Pues básicamente hay dos géneros dentro de la familia de las pináceas que copan el grueso de la oferta.

La principal es la especie Picea y su máximo exponente es la Picea abies (P. excelsa), conífera de forma cónica con corteza de color rojo – marrón, con agujas cuadrangulares de color verde oscuro de hasta una longitud de 2,5 centímetros. Produce conos femeninos de forma cilíndrica de color verde inicial y marrón en su madurez.

Otra variedad de este género utilizada como árbol de navidad es la Picea pungens ‘Glauca hoopsii’.

Dentro de la misma familia de las Pináceas pero en el género Abies, se encuentran especies como el Abies alba de porte prácticamente columnar de follaje de color verde oscuro con el envés plateado; El Abies koreana de porte cónico con hojas verde oscuro lucientes con envés plateado, produciendo aun en estado joven, conos cilíndricos de color azul violáceos de hasta 7 centímetros de longitud; El Abies nordmanniana de porte cónico y follaje denso, lúcido de color verde intenso en la parte superior y blanco opaco en su envés; y Abies pinsapo ‘Glauca’ de porte cónico muy compacto con agujas cortas y muy rígidas de un color azulado.

Plantación de los Abetos tras la Navidad

Finalizada la Navidad, quienes tienen un Abeto natural se plantean qué hacer con él. En el jardín, en el bosque, a un contenedor mayor… son opciones, aunque todas deben de partir de la base que el Abeto que adquirimos en su momento estaba perfectamente enraizado. Si no es así, no perdamos el tiempo porque lo más seguro es que ya esté perdiendo la hoja y muera durante las próximas semanas.

A la hora de la plantación de los Abetos tras la Navidad, debemos de tener en cuenta la climatología y zona de donde nos encontramos. No es una buena idea plantar un Abeto en un bosque cálido y fuera de su contexto general, ni en un jardín con similares características.

Si procede y deseamos plantarlo en el jardín, lo primero es sacarlo de casa lo antes posible… nada más terminar la Navidad. Recordemos que es una planta de exterior y no aguanta bien los interiores de la casa y menos con falta de luz y con calefacción. Le quitaremos con cuidado todos sus adornos.

Seguidamente elegiremos el lugar más adecuado y pensando en futuro ya que por una parte vivirá allí el resto de su vida y por otra adquirirá grandes dimensiones. Procuraremos que además, el lugar sea soleado y tenga una capa de tierra generosa.

Una vez elegido el lugar, excavaremos un hoyo que dependiendo del tamaño de la maceta, irá desde 0,50 a 1 metro de ancho por 0,50 a 0,70 metros de profundidad.

Una vez excavado, colocaremos en el fondo del hoyo una capa de tierra volcánica o grava como material de drenaje, para evitar encharcamientos que puedan provocar la pudrición de las raíces. Seguidamente llenaremos el hoyo con agua para crear un gran ‘bulbo húmedo’ inicial para facilitar, con los riegos sucesivos, una distribución correcta de la humedad en el terreno.

En ocasiones, la tierra del jardín no es lo suficientemente buena. Para mejorarla, mezclaremos a la tierra que hemos extraído y destinada a rellenar del hoyo con un Sustrato Universal o Sustrato de plantación de la forma más homogénea posible. El porcentaje de la mezcla irá del 20 al 60% en función de la calidad de la tierra del jardín.

Después extraeremos el Abeto del contenedor sin dañar sus raíces. Recordemos que como se trata de una conífera, no hay que dar nunca cortes ni en las raíces ni en el follaje durante su plantación. Si está complicada la extracción, un truco interesante es sumergir el contenedor en agua durante unos minutos.

Ya sin maceta introduciremos el cepellón en el hoyo evitando el no enterrarlo demasiado. Como referencia, su parte superior no debe estar a más de 5 ó 6 centímetros por debajo del nivel del suelo. Rellenaremos el hoyo con la mezcla enriquecida con el sustrato antes preparado y apisonaremos ligeramente con el pie, sin dañar el cepellón.

Durante este proceso, si el Abeto es grande o la zona está expuesta al viento, debemos instalar uno o varios tutores para evitar el zarandeo del Abeto hasta que este arraigue correctamente en su nuevo espacio.

También es recomendable formar un alcorque alrededor del hoyo para facilitar su riego. Regaremos inmediatamente y de forma abundante para completar el asentamiento del terreno.

En la plantación de los Abetos tras la Navidad a una maceta mayor, elegiremos una de tamaño ligeramente más grande y el sustrato adecuado será el mismo que hemos mencionado antes.

Para plantarlo en el bosque, lo más indicado es donarlo a los departamentos forestales o de parques y jardines de la ciudad. Ellos no sólo lo plantarán sino sabrán cual es el mejor momento, lugar y cuidados tras su plantación.

Normativas para el huerto urbano

Las normativas para el huerto urbano son similares a las que existen para tener plantas ornamentales en la terraza o balcones. A ellas debemos de añadir las referentes a la sanidad vegetal ya que terminarán formando parte de deliciosos platos gastronómicos.

Tipos de podas en el rosal

Poda en rosales arbustivos y de copa

Por lo general, la poda durante el reposo vegetativo del rosal se realiza en zonas geográficas como España desde finales de diciembre a mediados de febrero. La intensidad de esta poda dependerá de los propósitos que se persigan: si la poda es enérgica el número de flores es más limitado pero de mejor calidad… y si por el contrario es más ‘suave’, el número será mayor pero de menor tamaño. Paralelamente, se trabajará esta poda para dar a la planta de rosal una forma ornamental más adecuada a nuestros propósitos.

Básicamente se pueden realizarse varios tipos de poda dependiendo de la modalidad de rosal de que se trate. Los hay arbustivos de tallo bajo, de copa o llorones, trepadores y sarmentosos. Por lo tanto, la poda de formación varía según el tipo de rosal y el fin ornamental que se persiga.

Poda en rosales arbustivos

En el caso de los de los rosales de tipo arbustivos. Ya sean de porte arbustivos bajo o de tallo alto, se podan muy poco durante el primer o segundo año, con objeto de observar y tutelar su desarrollo, ala vez de permitir el afianzamiento del rosal en el terreno.

Como norma general, durante estos dos primeros años se deben dejar sólo tres o cuatro ramas formando el esqueleto estructural del rosal, únicamente podando durante el primer año aquellas ramas muy ahiladas, eliminando algo del follaje central si es muy denso, así como las flores ya pasadas; éstas deberán retirarse a lo largo de toda la floración junto con la denominada poda en verde.

Debemos de tener en cuenta que este tipo de rosal, sus flores sólo nacen de los tallos que se hayan producido en el año. Y con respecto a los tallos que broten por debajo del punto injertado deben ser eliminados ya que restan fuerza al rosal y además son de la variedad del porta injertos y no de la variedad comercial que deseamos disfrutar.

Poda en rosales de copa

La poda en los rosales de copa tiene como objetivo el de mantener su ‘forma de arbolito’ con copa redondeada. Los tres primeros años se mantendrá una poda muy corta dejando solamente dos brotes como base estructural, aumentando uno más cada año siguiente. También se deben de eliminar aquellas ramas que desequilibren la copa estéticamente.

Como en los rosales arbustivos, emiten tallos en la base y tronco que corresponden al porta injertos y que deben ser eliminados nada más asomen las yemas.

Poda en rosales trepadores y sarmentosos

Por lo general, la poda durante el reposo vegetativo del rosal se realiza en zonas geográficas como España desde finales de diciembre a mediados de febrero.

La intensidad de esta poda dependerá de los propósitos que se persigan: si la poda es enérgica el número de flores es más limitado pero de mejor calidad… y si por el contrario es más ’suave’, el número será mayor pero de menor tamaño. Paralelamente, se trabajará esta poda para dar a la planta de rosal una forma ornamental más adecuada a nuestros propósitos.

Poda en rosales trepadores

En el caso de los rosales trepadores, solamente se podan cuando las ramas se presentan muy entrelazadas, además de aquellas que ya se encuentren secas o que invadan zonas indeseadas. En general es conveniente dejar que se desarrollen libremente ya que esto forma parte de la ‘estética libre’ de este tipo de rosal.

Poda en rosales sarmentosos

La poda en los rosales sarmentosos sí requieren que sea muy cuidada. Las flores salen únicamente de las ramas del mismo año y que proceden de ramas que ya tienen dos años. Por ello se evitará podar las ramas durante el primer año.

Sin embargo, es importante el saber que estas ramas se producen a partir de la mitad superior del tallo, con lo cual, si deseamos que las flores se produzcan a baja altura, tendremos que podar los tallos a la mitad de su longitud desde el primer año, repitiendo la operación al año siguiente y así, a los dos años obtendremos flores desde baja altura.

A partir de aquí, actuar recortando únicamente las puntas cada año hasta los cuatro años, en que es conveniente el podar desde la base de los tallos que soportan las ramas floríferas y de esta forma, permitir la renovación del rosal.

Consejos sobre la poda del rosal

Entre los consejos de la poda del rosal están el que puede ser realizada en dos épocas del año claramente distintas en función de la técnica empleada y objetivos perseguidos: la poda durante su ‘reposo vegetativo’ y la poda ‘en verde’.

Cuando hablamos de la poda del rosal, normalmente se entiende como la realizada durante su reposo invernal y vegetativo… cuando la planta se encuentra sin hojas. Es la poda más severa y se aprovecha para rejuvenecer y reestructurar a la planta. Esta se realiza en zonas geográficas como España entre los meses de finales de diciembre a mediados de febrero normalmente, y consiste en eliminar prácticamente todas sus ramas dejando sólo aquellas imprescindibles y en su justa longitud.

En cambio, la denominada poda ‘en verde’ del rosal consiste en pequeñas podas de ramas y tallos florales realizados durante el resto del año, persiguiendo principalmente la limpieza (flores ya marchitas, ramas dañadas por el viento, etc.) y formación de mantenimiento del rosal (ramas excesivamente largas, desarrollando en zonas no deseadas…).

En todos lo casos, es muy importante que los cortes deben de realizarse con tijeras en buen estado para que estos sean limpios y no ‘machaquen el tallo en su zona de corte’. De no ser así, a parte de una pésima estética, la cicatrización no será rápida y correcta favoreciendo el riesgo de enfermedades innecesariamente.

Otro aspecto a tener muy en cuenta es el lugar concreto del corte durante la poda del rosal. Este debe de tener en cuenta dos aspectos. uno el realizarse sobre un centímetro sobre la última yema a respetar. Así, tras la brotación su estética será mejor ya que se evitan los trozos de tallo sobresalientes sin sentido. Y otro, el que la última yema respetada de cada rama esté orientada hacia la zona donde deseemo que se desarrolle el rosal. Por ejemplo, si al podar el rosal dejamos que todas las últimas yemas respetadas estén orientadas hacia el interior de la planta… crearemos un entramado de ramas antiestético condensadas en el interior del rosal.

Los setos, paredes en el jardín

Los setos en el jardín están compuestos por plantas en alineación que actúan como ‘paredes‘, limitan los espacios y ayudan a crear lugares más íntimos, además nos aíslan del viento e incluso del ruido.

Frutas directas del jardín

Los frutales son árboles que nos proveen de frutas como alimento, incluidos los que producen frutos secos.

Podemos tenerlos en el huerto, en el jardín de forma tradicional o como árboles ejemplares como por ejemplo los olivos centenarios, los algarrobos, el granado o las parras.

Hidromulch para hidrosiembras

La hidrosiembra también llamada hidromanta es la técnica de restauración del paisaje consistente en la proyección sobre el suelo de una mezcla homogénea de semillas, mulches, estabilizadores de suelos, fertilizantes u otros elementos, desde una cuba móvil con bomba de presión y boquillas de distribución. Las hidrosiembras son un método eficiente para la implantación de las especies vegetales en los terrenos a restaurar.

Los éxitos de las hidrosiembras residen en el acierto de todos los elementos que intervienen en ellas. Como ejemplo está la mezcla adecuada de semillas autóctonas, especialmente seleccionadas para las condiciones edafo-climáticas de la zona a restaurar; la elección de los aditivos adecuados y necesarios para la germinación como abonos organo-minerales, ácidos húmicos, etc; y su correcto posterior tapado con mulch de celulosa, fibras o la combinación de éstos con turba u otros sustratos orgánicos.

Con respecto a todos los elementos que intervienen en las hidrosiembras destacamos:

  • Los Mulches.- Son materiales generalmente orgánicos que mejoran las características del suelo. Extendidos sobre el suelo aumentan su capacidad de campo, ejercen un efecto tampón sobre su temperatura, mejoran su microbiología y disminuyen la erosión. Es el denominado ‘efecto mulch sobre el suelo’.
  • Los estabilizadores.- Son sustancias que en solución acuosa con otros materiales, aplicadas sobre el suelo penetran en él y al desecarse, adhiere la mezcla entre las partículas terrosas dándole consistencia y permeabilidad.
  • Los hidroretenedores.- Son substancias que consiguen aumentar la capacidad de retención de agua del suelo.
  • Los ácidos húmicos y fúlvicos.- Que estimulan la acción del sistema radicular.
  • Tierra franca u otros sustratos.- Aportan mejoras al terreno base existente.
  • Envejecedores naturales de las rocas.- Están destinados a minimizar los impactos visuales de los taludes en roca. El envejecimiento natural de las rocas se produce con ocasión de una serie de efectos físico-químicos (agua, viento, temperatura, luz, oxidación, microorganismos, etc.) que con el tiempo se manifiesta generalmente por tonalidades pardo-negruzcas. Por ello, un corte reciente de un terreno rocoso se manifiesta por coloraciones pálidas o claras, que son convenientes disimular en el paisaje, máxime cuando son de gran impacto y de muy difícil integración por otros sistemas. Estos envejecedores naturales de rocas en base a colorantes simulan las tonalidades pardo-negruzcas de las rocas naturales.

El hidromulch, hydromulch,  hidro-mulch o hydromulching, es un compuesto a base de numerosas fibras vegetales, que al ser proyectadas por la hidrosembradora, junto con el estabilizante y demás aditivos, actúa finalmente como una capa fibrosa que mantiene sólidas las semillas en contacto con el suelo.

El hidromulch ofrece una mayor cobertura del suelo que los mulches convencionales, haciéndolo más efectivo frente a los efectos erosivos del viento y la lluvia, manteniendo las semillas en contacto con el suelo y limitando la lixiviación de otros aditivos.

hidrosiembra

Este producto ha sido desarrollado por Bonterra Ibérica SL, empresa especialista en el control de la erosión, en colaboración con los principales fabricantes de hidrosiembradoras. Es fácilmente biodegradable y asimilado por las plantas sin dejar ningún residuo, garantiza la máxima productividad, interactúa fácil y rápidamente con otros aditivos y requiere la adición de menos mezcla de agua.

Entre las principales áreas sobre las cuales se ha diseñado el hidromulch o hidro-mulch se encuentran la protección del sustrato del suelo durante el periodo de crecimiento de la vegetación, la protección de semillas y mejora de la germinación y su fácil aplicación con aumento de productividad.

Una vez aplicado el hydromulch sobre el terreno actúa sobre la protección del sustrato del suelo durante el periodo de crecimiento de la vegetación, ofreciendo una excelente protección “temporal” de la superficie, frente a los efectos erosivos del viento y la lluvia. Este efecto se mantiene hasta que la vegetación crece, siendo ésta posteriormente, la que proporciona tal protección al suelo. También sobre la protección de semillas y mejora de la germinación, manteniendo las semillas en contacto con el suelo, limita la lixiviación de otros aditivos y los mantiene cerca de las semillas. Y es capaz de moderar los picos de temperatura, actuando sobre las semillas como un “invernadero en miniatura”. Además, durante los períodos de estrés hídrico, este producto redistribuye el agua recogida por las plántulas con el fin de reducir dicho estrés en la vegetación.

Hidrosiembra

Hay versiones de hidromulch en color. En tal caso a su vez actúa como un marcador que sirve para estandarizar su aplicación ya sea en el control de las concentraciones introducidas como visualización de las zonas tratadas.

Normalmente, el hidromulch se comercializa en forma de un manojo de fibras de madera larga, ya sea de color o no, extraída de la parte carnosa de la madera. En su proceso de fabricación recibe un tratamiento térmico para su deshidratación, eliminando al mismo tiempo gérmenes patógenos y hongos.

Entre las modalidades de venta del hidromulch para hidrosiembras está el de balas de 300 litros, en palets con 32 unidades.

Las dosis recomendadas varían entre los 175 y 230 gramos por metro cuadrado como valores medios.

Un hidromulch de calidad especialmente desarrollado para su aplicación en hidrosiembras, ofrece con garantías una mayor cobertura del suelo con respecto a otros mulches convencionales, haciéndolo más efectivo frente a los efectos erosivos del viento y la lluvia, manteniendo mejor las semillas en contacto con el suelo y limitando la lixiviación de otros aditivos.

Así, un hidromulch para hidrosiembras debe de ser fácilmente biodegradable, asimilable por la vegetación sin dejar ningún residuo, garantizar la máxima productividad, interactuar de forma fácil y rápida con otros aditivos y requerir la adición de menos mezcla de agua, entre otras virtudes.

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