28.2 C
España
miércoles, 2 abril, 2025

PUBLICIDAD

Inicio Blog Página 17

Las plantas de interior más vendidas

A la hora de decir cuáles son las plantas de interior más vendidas, primero tenemos que saber que en un posible ranking jugarán factores como la geolocalización de la zona de consumo, la cultura de la sociedad en cuestión, su poder adquisitivo, la estacionalidad como por ejemplo las asociadas estaciones del año o festividades, etc. de forma notable.

La oferta del mercado de las plantas de interior en Europa está actualmente liderada por Holanda, sobre todo en los tamaños de porte pequeño y mediano. En cambio, España juega un papel relevante en tamaños de porte medio a grande.

Anthurium

En Holanda, las plantas de interior más vendidas son la Phalaenopsis (Orquídeas), Anthurium, Kalanchoe, Dracaena, Ficus y Spathiphyllum. Otras especies que merecen su atención por su volumen de venta, son el Rosal mini, el Crisantemo en maceta, las Hortensias y el Cyclamen, que si bien no son en España plantas asociadas al concepto de interior, en los países de centro y norte de Europa sí lo son.

En España, plantas de interior más vendidas son las de porte medio y pequeño. Destacar el caso de la Poinsettia que, aun siendo una planta de temporada, se venden enormes cantidades durante finales de noviembre y sobre todo en diciembre. El resto de plantas de interior más vendidas son el Kalanchoe, el Anthurium, el Crisantemo de maceta, las Saintpaulias, el Photos, las Orquídeas, las Drácenas, la Bilbergia, las Arecas, las Sansivieras, el Ficus benjamina, la Kentia, el Helecho, el Syngonium y las Yuccas como planta de interior. Este no es un ranking oficial pero sí una relación de las especies más representativas de las plantas de interior más vendidas.

Canales de venta de planta de interior

Los canales comerciales más relevantes en la venta de planta de interior son los centros de jardinería, las grandes superficies, las floristerías, tiendas multiprecio y tiendas ambulantes en mercadillos. En las grandes superficies priman los tamaños más pequeños mientras que en los centros de jardinería se venden proporcionalmente los de mayor porte.

Plantas de Corokia maori

Plantas de interior de moda

Como en todo, también la demanda de plantas de interior fluctúa por las modas y aquí los interioristas, diseñadores, influencers (creadores de opinión), etc. poseen mucha fuerza.

Como ejemplos de plantas de interior que están de moda se encuentra la Pilea peperomioides, las Echeverias sp, la Corokia maori o la Sansevieria cylindrica, esta última con parte de la planta decorada mediante ‘fundas naturales’ de colores.

Por lo general son plantas muy rústicas y por lo tanto de fácil mantenimiento, de porte pequeño a medio y que su estructura vegetativa sea elegante para aportar al espacio habitacional una destacada singularidad.

La Poda de los rosales

Entre los objetivos de la poda del rosal está el ayudarle a acelerar su ciclo natural de crecimiento.

Los rosales, como muchas otras plantas arbustivas, necesita de una poda anual que le ayude a producir nuevos tallos laterales, que florezcan más fácilmente. La poda ayuda a acelerar el ciclo natural de crecimiento. Cuando podamos una planta conseguimos:

  1. Limitar la altura.
  2. Crear una estética, una forma adecuada y equilibrada.
  3. Eliminar flores marchitas y frutos.
  4. Crear formas ornamentales o artísticas.
  5. Sanear la planta al quitar las ramas viejas o muy ramificadas.
  6. Rejuvenecerla permitiendo una nueva floración de los brotes.
  7. Una buena circulación del aire.
  8. Inducir a la planta a concentrar energía para desarrollar los tallos restantes.

Frutos de rosal

Hemos de tener siempre un equipo de herramientas adecuadas para realizar la poda. Tijeras, navajas, serruchos, sierras, etc. Han de estar limpias y afiladas para hacer bien los cortes y no dañar al rosal.

La poda obtiene diferentes nombres según sea el efecto que perseguimos. Así pues, podemos: Despuntar, eliminar vástagos, recortar, coronar, si bien, todas estas acciones buscan el mismo efecto en el rosal, dar forma y eliminar ramas nuevas o viejas, hojas, etc.

Numeración de las ramas del rosal

Antes de cortar las ramas de nuestros rosales, hemos de saber el orden que cada una de ellas tiene dentro de la planta. La enumeración comienza a ras de suelo. Así tenemos:

  • Rama primaria: La que sostiene toda la planta, el tronco principal.
  • Rama secundaria: ramificación de la rama primaria.
  • Rama terciaria: ramificación de la rama secundaria.
  • Rama cuaternaria, etc.

Sabiendo esto, las acciones que hemos visto anteriormente se realizarán sobre las siguientes ramas:

  • Despuntar: Cortar las puntas de las ramas más divididas o de numeración más alta.
  • Recortar: Eliminar las ramas superiores a la quinta.
  • Eliminar Vástagos: Eliminar ramas por encima de las cuaternarias.
  • Podar: Cortar las ramas a partir de la terciaria.
  • Coronar: Eliminar todas las ramas, dejando sólo las secundarias.

Planta de rosal en el jardín

En el caso del rosal, una rama sana, joven y que nos dará una abundante floración es aquella que está a partir de la secundaria o terciaria. A partir de la cuaternaria, son muy vegetales, florece poco y acaba siendo una rama estéril.

Tipos de poda del rosal

Los tipos de poda que se pueden realizar al rosal son:

  1. Poda de trasplante.
  2. Poda de formación.
  3. Poda de aclarado.
  4. Poda de mantenimiento.
  5. Poda para perfilar formas.
  6. Poda de floración.
  7. Poda de equilibrio.

Cada una de ellas las deberemos hacer según sea la época del año o el objetivo que persigamos. Así pues:

1.- Poda de trasplante. La realizaremos cuando tengamos que arrancar y trasplantar una planta de sitio. Una vez arrancado, se cortarán todas las ramas y raíces principales a la mitad.

2.- Poda de formación. Consiste en podar el ramaje para dar la forma que queramos a la planta, generar un ramaje adecuado evitando ramas cruzadas, o embudos de hojas, rejuvenecer las ramas reduciendo las viejas o débiles.

3.- Poda de aclarado. Sirve para aclarar la masa de la planta para que pase el aire y la luz, eliminando las ramas cruzadas y los embudos de hojas. Nos ayudará también a evitar enfermedades o que progresen si ya las tenemos.

4.- Poda de mantenimiento. Se realiza en primavera después de la floración para eliminar los “chupones” o rebrotes del patrón, iniciar una nueva floración, eliminar ramas débiles recortándolas a la mitad.

5.- Poda para perfilar formas. Como su nombre indica es para dar las formas que deseamos a la planta.

6.- Poda de floración. Eliminaremos las flores marchitas y los frutos que no deseemos guardar para recoger semillas. Se puede realizar de mayo a junio y en septiembre si tenemos una segunda floración. El rosal aprovecha que no tiene que enviar savia a estas flores marchitas y frutos para realizar una nueva floración.

7.- Poda de equilibrio. Hemos de hacerla cuando vemos que las partes superiores aparecen muertas, eso sucede cuando las raíces no pueden sostener toda la parte aérea. En estos casos hemos de reducir las ramas a la mitad, abonar y regar a menudo.

Nuevo brote de rosal

Cómo realizamos la poda del rosal

Hemos de cortar siempre por encima de una yema. Las yemas, serán principalmente las que salen hacia fuera, para dar forma a nuestro rosal desde el nacimiento de la nueva rama.

Los cortes han de ser limpios, con equipos afilados. A unos 5 mm de la yema y en forma oblicua para que el agua resbale y no produzca enfermedades.

Un corte muy alejado de la yema ocasionaría la posibilidad de que se marchitase la nueva rama.

¿Cuándo realizamos la poda del rosal?

En la mayoría de los casos, la poda la realizaremos mientras los rosales reposan, entre la caída de las hojas en otoño y el brote de las yemas en primavera.

No podaremos cuando se hayan producido heladas, ya que puede dañar el crecimiento de los brotes nuevos y el tallo puede morir. Si los inviernos son severos, puede ser necesario cortar los tallos dañados por el hielo para que vuelvan a estar sanos en la siguiente primavera.

Si los inviernos son severos, esperaremos a los inicios de primavera para podar y en los lugares con climas suaves, donde raramente hiele, aprovecharemos para podar en los meses más frescos a fin de conferirles un período de descanso.

En el próximo artículo veremos que poda realizaremos dependiendo del tipo de rosal que tengamos.

Carlos Rivero Ramos: Pasión por las rosas

Carlos Rivero RamosCarlos Rivero Ramos, al margen de su actividad profesional tiene entre sus pasiones las de viajar, escribir,… pero destaca la de su pasión por el mundo de las rosas.

Carlos encuentra en la floricultura y en especial en el cultivo de las rosas un amplio abanico de posibilidades a todos los niveles. Es un alivio al estrés y saca el poeta que hay en él, además de incitarle a coleccionarlas de forma casi compulsiva. Destaca su colección de diferentes especies de rosas y el que varias de ellas han sido premiadas en el Concurso Nacional de las Rosas en 2018 y 2019.

Agálope, novela de Carlos Rivero Ramos
Volviendo a su pasión por la escritura. Carlos Rivero os regala una de sus novelas, en esta ocasión Agláope. Esperamos os guste.
» Descarga de la novela Agláope en PDF
» Autor: Carlos Rivero
» Canal Facebook: Pasión por las rosas

Sustratos para bonsái

Los sustratos para bonsái son una de las especialidades en sustratos que podemos encontrar en los centros de jardinería, floristerías, grandes superficies y tiendas especializadas. Como su nombre invita a adivinar, son los más adecuados para plantar o trasplantar este tipo de plantas, que como característica común pasan toda su vida en macetas o tarrinas de escasas dimensiones con respecto al tamaño que en condiciones generales deberían tener. En la mayoría de casos son árboles, miniaturizados en todas sus partes.

Estos sustratos para bonsái, con su calidad determinan en gran medida la salud, vitalidad y apariencia del bonsái. Es básico que estos sustratos drenen correctamente. Si son muy sueltos y drenan demasiado… la planta no podrá recibir la humedad que necesita, por el contrario, si este está constantemente empapado las raíces pueden pudrirse con facilidad.

Los sustratos de cultivo para bonsái son una mezcla de materias primas empleadas con frecuencia en jardinería, como por ejemplo la arena, la turba, la tierra vegetal, la tierra de jardín, la tierra de brezo, la tierra de castaño, el estiércol, la perlita, la arcilla expandida (arlita o leca), etc. además de fertilizantes ya sean de liberación rápida, lenta con macro y oligoelementos. Con ellos se pueden hacer un gran número de combinaciones y cada uno escoge la mezcla que cree más conveniente para obtener los mejores resultados, ya que todas las especies no responden igual ante un mismo sustrato.

Como base, estos sustratos para bonsáis deben de tener una mezcla homogénea y exenta de grumos, drenar bien pero reteniendo la suficiente humedad para evitar riegos frecuentes, que tenga la capacidad adecuada de retención de nutrientes (evitando lavados fáciles), estar ausentes de semillas de malas hierbas y organismos patógenos… y ser el adecuado para la especie de bonsái cultivado.

Tipos de sustratos para bonsái

Desde el punto de vista de sustratos para bonsái en relación a la especie cultivada se pueden realizar cuatro grupos de tierras:

  • Sustratos para bonsái de coníferas. Un 50% de arena, 25% de tierra vegetal y un 25% de arcilla, más elementos nutritivos.
  • Sustratos para bonsái de frondosas. Un 30% de arena, 25% de tierra vegetal, 25% de turba y un 20% de arcilla, más elementos nutritivos.
  • Sustratos para bonsái de flores y/o frutos. Un 30% de arena, 30% de tierra vegetal, 20% de turba y un 20% de arcilla, más elementos nutritivos.
  • Sustratos para bonsái de acidófilas. Un 30% de brezo, 30% de tierra vegetal, 30% de hojas de pino y un 10% de arena, más elementos nutritivos.

A partir de aquí se le pueden ir añadiendo otras materias primas como las antes mencionadas para ir adecuando sus características a las necesidades concretas de la planta.

Sustrato universal para bonsái

Los sustratos para bonsái comerciales están especialmente formulado para adaptarse a las exigencias de la mayoría de los bonsáis, que por su especial forma de cultivo, necesitan una mezcla que sea muy estable en el tiempo, una nutrición débil pero equilibrada y una aireación en las raíces adaptada a contenedores pequeños.

La composición de estos sustratos comerciales es a base de turba rubia, arena silícea, compost vegetal, extracto de algas y abono orgánico.

Estos sustratos son ideales como tónica general, de ahí que se les llame sustrato universal para bonsái. Pero podemos, partiendo de ellos y teniendo en cuenta las consideraciones anteriormente mencionadas, añadir alguna de estas materias primas para ajustarlo un poco más a las necesidades específicas de la especie que estemos cultivando.

Ladrillo machacado para bonsái

Una de las prácticas utilizada en el mundo del bonsái es la utilizada del ladrillo machacado para bonsái. En sí es una materia prima y se basa en trocear un ladrillo de arcilla cocida, normalmente de color rojo. Con estos trozos, si son gruesos se utilizan como capa de drenaje tanto entre el sustrato y la base de la tarrina, como para suelo sobre el que se posa dicha maceta.

Los trozos de granulometría más fina se pueden utilizar para mezclarlos con el sustrato para aumentar su porosidad. Y también para extenderlo sobre la superficie del sustrato con el objetivo de ayudar a evitar la evaporación y por consiguiente aumentar el tiempo de la humedad en el sustrato.

La arlita para bonsái

La arlita para bonsái

La arlita para bonsái es una forma de referirse a un material llamado ripiolita, arcilla expandida o leca, un árido cerámico de gran ligereza. Destacar que actualmente la arlita como nombre se encuentra en el mercado bajo marca registrada.

Se trata de un material fabricado calentando trozos de arcilla en un horno rotativo a aproximadamente 1200°C. Durante el proceso las diminutas partículas de arcilla expanden su volumen disminuyendo su densidad y adquiriendo por lo general una forma esférica de diferentes diámetros según el objetivo del fabricante.

Uno de sus principales empleos es en la construcción para conseguir bloques o módulos de alta ligereza y buena capacidad como aislante térmico. Otro es su uso como filtro en depuración de aguas. En la horticultura ornamental y la horticultura se utiliza como sustrato para sistemas de cultivo hidropónico. En jardinería a modo de sustrato inerte para airear sustratos y como drenaje de suelos.

Arena de gato para bonsái

A la hora de buscar un sustrato la imaginación lo es todo. Así hay quien utiliza hasta la arena de gato para el cultivo de un bonsái, ya sea como sustrato total o como materia prima para mezclarlo con uno base.

Este material se presenta comercialmente como un árido de uso doméstico para que las mascotas (gatos) realicen sus necesidades sobre él. Este absorbe tanto los líquidos e incluso los malos olores. De hecho hay arenas perfumadas.

¿Cuáles son los mejores sustratos para bonsáis?

Como respuesta a cuáles son los mejores sustratos para bonsáis se tendría que partir de la base de que en muchos casos no hay sustratos buenos ni malos, un mal uso o mejor dicho, una mala gestión de los mismos.

En este artículo nos hemos referido a cuatro tipos para situar al lector ante una visión global base y a partir de aquí reorientarlo mediante pequeñas modificaciones a cada necesidad concreta. También es cierto que se pueden encontrar en el mercado sustrato con nombres muy populares. Entre ellos:

Sustrato Akadama

Es el sustrato japonés más utilizado en el cultivo de bonsái tanto por aficionados como profesionales. Su nombre en japonés significa “bola roja”, en referencia al aspecto rojizo y granular de esta tierra. Es un sustrato microporoso que permite absorber agua y nutrientes para tenerlos disponibles cuando el árbol lo necesite. Su composición hace que se mantenga casi intacta sus cualidades físicas a lo largo de aproximadamente 5 años. En cambio necesita un abonado muy constante y metódico.

Sustrato Kiryuzuna

Es una mezcla de arena japonesa especialmente destinada al cultivo de pinos y coníferas dado su excelente drenaje.

Sustrato Kanuma

De origen volcánico es una tierra especialmente ácida con la característica de poseer poco peso y buena reacción, siendo muy apropiado para el cultivo de azaleas, camelias y gardenias en la modalidad de bonsái.

Sustrato Pomice

Entre sus ventajas están una gran resistencia a la abrasión, gran absorción de agua y estabilidad térmica. Es un sustrato especialmente ligero, de color gris y al igual que el sustrato Akadama necesita de un abonado muy cuidadoso.

Sustrato Keto

Es un sustrato de consistencia pastosa especialmente recomendado para ser utilizado en aquellos bonsáis que crecen sobre piedra. Este sustrato se adhiere fácilmente a las grietas de las piedras, ayudando a que las raíces de los bonsáis puedan crecer abrazándose a las piedras.

Plantas ornamentales de Australia

En un mundo globalizado, y el sector ornamental es y ha sido de los más dinámicos, los productos y servicios no conocen fronteras.

Por poner unos ejemplos los consumidores quieren tener naranjas disponibles todo el año en los supermercados y esto sólo puede conseguirse recurriendo a las producciones desde países de contraestación. Como también ciertas flores como las rosas o los claveles circulan en camiones y aviones acercando oferta y demanda durante todo el año.

El sector ornamental, además de dinámico, en el mundo de las flores y las plantas las redistribuye por el mundo desde tiempos remotos. Basta revisar la hemeroteca para ver como desde hace siglos los conquistadores, científicos, exploradores, botánicos, etc. recogían y clasificaban especies trayéndolas a sus países.

Plantas autóctonas ornamentales de Australia y Nueva Zelanda

Tanto Australia como Nueva Zelanda no iban a ser una excepción sino todo lo contrario. Así, muchas especies autóctonas de estos países han pasado a formar parte del catálogo tanto de la flor cortada, planta en maceta como de su uso en jardinería y paisajismo.

A continuación y a modo de ilustración de cómo las plantas autóctonas ornamentales de Australia y Nueva Zelanda se encuentran es nuestros jardines hacemos un breve repaso por algunas de ellas:

Helechos arborescentes

Árboles de Australia o Nueva Zelanda

Acacia Cognata Limelight. Es un árbol de porte pequeño de hoja perenne originario de Australia. Su follaje es de aspecto delicado, suave y de color verde lima, con crecimiento en cascada. Sus flores son de color amarillo. Tolera la mayoría de suelos siempre que estén bien drenados. Necesita una exposición soleada.

Acacia dealbata. Conocida como Mimosa, Aromo o Acacia australiana, es un pequeño árbol, nativo de Australia y de Tasmania, muy atractivo por su floración. Su follaje es muy característico de las Acacias, de una textura muy fina. Florece de enero a marzo. En España, debido a su potencial colonizador llega a constituir una amenaza para las especies autóctonas, siendo una especie incluida en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras.

Acacia baileyana. Es la Mimosa dorada, un arbusto o arbolillo de crecimiento rápido, originaria de un área reducida al sur de Nueva Gales del Sur. Su atractivo reside principalmente en su follaje, plumoso, semipéndulo y de color gris azulado.

Araucaria Cunninghamii. Llamada también Pino del aro o araucaria de Australia se encuentra en el este de Australia y de Nueva Guinea. Llega a adquirir un gran porte (hasta 60 metros de altura) y puede vivir hasta los 450 años. Sus frutos, conos ovoides, liberan semillas parecidas a las nueces, y son comestibles.

Brachychiton acerifolius. Conocido como Braquiquito rojo o Árbol del fuego o Árbol de la llama, es nativo del este de Australia, desde Nueva Gales del Sur hasta la península del Cabo York, al norte de Queensland. Es un árbol semicaducifolio y muy ornamental por sus atractivas y tempranas flores de color rojo brillante, acampanadas, que florecen cuando el árbol aún está sin hojas. Es un árbol de crecimiento rápido que le gusta una exposición soleada, tolerando sólo ligeras sequías. No florece hasta alcanzar cierto grado de madurez.

Casuarina cunninghamiana. Conocida como Casuarina, Pino australiano o Roble de río, es un árbol perennifolio que puede alcanzar los 35 metros de altura. Por su apariencia recuerda a los pinos, sobre todo si nos fijamos en sus ramitas verdes, delgadas y flexibles, que aparentan ser hojas en forma de acículas. Prefiere climas relativamente suaves y tolera las sequías no muy prolongadas.

Eucalyptus camaldulensis. Popularmente conocido como Eucalipto, Hacedor de viudas o Gomero rojo, es nativo de Australia siendo uno de sus iconos. Su altura media se sitúa sobre los 20 metros, aunque hay ejemplares que la duplican. Su corteza es gruesa y esponjosa que mezcla colores rojizos, grises, verdosos y blancuzcos. Es por detrás del Eucalipto blanco la segunda especie de eucalipto más abundante en España.

Eucalyptus deglupta. También conocido como Eucalipto Arcoíris, es el único árbol de corteza multicolor de su especie siendo la característica más distintiva de este árbol. Precisamente estas vistosas rayas multicolores lo hacen muy apropiado como árbol ornamental: Son una verdadera pieza de arte viva. Su lugar de origen se sitúa en Nueva Bretaña, Nueva Guinea, Seram, Sulawesi y Mindanao, zonas emparentadas por proximidad con Australia. Como anécdota, este precioso gigante no produce el olor característico de los eucaliptos, siendo la elección perfecta para quienes no les guste el olor típico de esta especie.

Myoporum laetum. Es un árbol nativo de Nueva Zelanda que puede crecer hasta los seis metros de altura en cultivo, de porte abierto y con las hojas agrupadas hacia el final de las ramas. Sus flores crecen solitarias o en grupos de 2 a 6 con corola acampanada. Aguanta muy bien la proximidad del mar, el viento y los terrenos arenosos.

Wollemia nobilis. Conocida como Pino de Wollemi, está considerado un fósil viviente y ha sido de reciente descubrimiento (1994) en unos cañones cerca de Lithgow (Australia). Es un árbol de hoja perenne que alcanza los 40 metros de altura. Su corteza es de color marrón oscuro y nudoso. Si se corta su tronco este brota con facilidad. Recientemente se ha culminado un programa de propagación para su lanzamiento comercial en Europa y Estados Unidos ya que puede demostrar ser un árbol valioso para el sector ornamental. Su exposición es al exterior, es resistente al frío tolerando temperaturas hasta los -12°C.

Xanthorrhoea glauca. También es conocida como el Árbol hierba (“Grass tree” en inglés) es nativa de Nueva Gales del Sur y Queensland (Australia). Su tronco puede alcanzar los cinco metros de altura. Es un exótico árbol en ocasiones catalogado como gran arbusto muy ornamental por su original aspecto y porte. Requiere exposición al sol, pocos cuidados tras su arraigo en el terreno y como curiosidad posee una gran capacidad de sobrevivir a situaciones de incendios.

Palmeras de Australia o Nueva Zelanda

Archontophoenix alexandrae. Es llamada la Palma alejandra, Palmera real australiana o Palma de Alejandro, siendo una de las palmeras más bonitas del mundo. Nativa de valles y selvas de Queensland (Australia) es utilizada como planta ornamental. Es muy fácil de cuidar y pueden vivir en semisombra y a pleno sol, en jardines e incluso como palmera de interior. Su crecimiento es rápido y su altura puede llegar a los 20 metros.

Archontophoenix cunninghamiana. Conocida como Palma de Bungalow, Palma Cunningham o Palmera Rey Piccabeen es nativa de Nueva Gales del Sur y Queensland (Australia). Esta palmera de tronco simple puede alcanzar los 20 metros de altura con tronco cilíndrico de hasta 18 centímetros de diámetro. Produce pequeños frutos esféricos de color rojo.

Livistona australis. Se le conoce como Livistona australiana, Palma col y Latania de Australia. Crece hasta los 25 metros de altura coronada con hojas oscuras y brillantes. Florece mediante espigas florales con ramitos de flores blancas cremosas. Requiere suelos húmedos y ricos en materia orgánica, en espacios bien iluminados. Es tolerante a la salinidad, heladas y al viento.

Ptychosperma elegans. Su nombre popular es Palmera solitaria y es originaria de Queensland (Australia). Palmera de tronco delgado, liso y anillado puede alcanzar los ocho metros de altura. Su inflorescencia emerge por debajo del capitel con flores blanquecinas y olorosas. Crece bien tanto a pleno sol como en lugares algo sombreados, por lo que puede emplearse en la decoración de interiores con buena luminosidad. Requiere suelos fértiles, bien drenados y unas condiciones ambientales cálidas.

Arbustos de Australia o Nueva Zelanda

Arbustos de Australia o Nueva Zelanda

Adenanthos sericeus. Arbusto de hoja perenne originario de Australia, de porte compacto que recuerda al de los abetos con sus hojas aciculares y muy suaves al tacto. Florece durante la primavera con flores rojas. Requiere una exposición a pleno sol, tolera bien los suelos arenosos y es muy resistente a la sequía.

Alyogyne DelightFully. Arbusto de porte globoso y rápido crecimiento originario de Australia. Es de crecimiento muy vigoroso y de porte vertical. Le gusta la exposición a pleno sol. Resiste heladas leves, tolera la mayoría de suelos bien drenados y es muy resistente a la sequía.

Anigozanthos flavidus. Arbusto vivaz de hoja perenne originaria de Australia. Posee hojas largas y es de crecimiento rápido y vigoroso. Produce numerosos tallos alargados y aterciopelados terminados en ramilletes florales. Requiere exposición a pleno sol, soporta el calor, la sequía y heladas leves.

Callistemon salignus. También conocido como Limpiatubos de flor blanca, es un arbusto de hoja perenne, nativo y ampliamente cultivado en las costas australianas. Su floración es de flores blancas y es ideal para crear grandes macizos en el jardín junto a cursos de agua o en zonas pantanosas. Requiere exposición a pleno sol, plantado sobre suelos fértiles, algo ácidos y húmedos.

Coprosma repens. Arbusto de hojas perennes originario de Australia y Nueva Zelanda. De crecimiento rápido y vigoroso, puede plantarse para hacer setos. Sus hojas son gruesas, brillantes y ovaladas. Prefiere la exposición a pleno sol y es resistente a la sequía y temperaturas frías.

Cordyline rubra. Conocida también como Drácena roja es nativa de Australia. Posee hojas gruesas y recurvadas de color verde mate y el nervio central rojizo. Emite masas de minúsculas flores de color lila. Necesita abundante luz para mantener el color de las hojas. También necesita suelos fértiles y bien drenados.

Corokia maori. Arbusto de hojas perennes originaria de Nueva Zelanda. Posee pequeñas hojas de color gris sobre tallos sinuosos aportando un aspecto minimalista. Su exposición es a pleno sol sobre sustrato fértil y bien drenado. Es resistente a la sequía.

Correa pulchella. Pequeño arbusto de hojas perennes originario de Australia. Sus hojas son pequeñas y ovales. Sus flores son tubulares de porte colgante. Requiere una exposición a pleno sol sobre sustrato fértil y bien drenado. Es resistente a la sequía, la salinidad y las bajas temperaturas.

Cyathea australis. Se trata de un helecho arbóreo rugoso o helecho arborescente. Su origen se sitúa en el sudeste de Queensland, Nueva Gales del Sur y el sur de Victoria en Australia, así como en Tasmania y la Isla Norfolk. Su tronco macizo erecto llega a poder medir hasta los 12 metros de alto. Su follaje crea una copa de color verde oscuro por arriba y verde pálido por abajo. Es una especie relativamente resistente al frío. También es popular en el mundo del paisajismo y como planta de contenedor. Le favorecen los niveles de humedad altos, tolera las heladas y pleno sol.

Dicksonia antarctica. Se trata de un helecho arbóreo o helecho arborescente. Su origen es Australia y es una de esas plantas muy primitivas de origen Jurásico. Puede alcanzar varios metros de altura y un tronco le da un aspecto parecido a una palmera, llegando a superar los 12 metros en su hábitat natural. De crecimiento lentísimo es apto para interior y exterior. Requiere sombra o semisombra sin exposición directa al sol. El riego debe darse cuanto el sustrato comience a secarse en su superficie.

Elaeagnus pungens. El Eleagnus, también conocido como Cinamomo es un arbusto ideal para setos y borduras. Su floración tiene poco valor ornamental. Es de follaje muy llamativo y brillante, tolera bien situaciones de media sombra y heladas.

Eriostemon myoporoides. Arbusto de hoja alargada, perenne, de color verde y crecimiento denso originario de Australia. De flores blancas en forma de estrellada. Le gusta la exposición a pleno sol sobre sustrato ligero, arenoso y bien drenado. Resistente a la sequía y al frío moderado.

Grevillea rosmarinifolia. Originaria de Australia es un arbusto perennifolio, muy ramificado con ramas cortas y algo pilosas. Sus hojas son estrechas, lanceoladas, rígidas, de color verde oscuro. Sus flores son rojas y están dispuestas en racimos globosos y densos. Requiere una exposición a pleno sol, suelos ácidos bien drenados y soporta muy bien el calor a la vez que tolera las heladas.

Hebe spp. Se trata de un género cuyo mayor número de especies son nativas de Nueva Zelanda. Las especies más comerciales ornamentalmente son arbustos de pequeñas hojas perennes y follaje denso. De flores en pequeñas espigas, requiere una exposición de semisombra y ser plantadas sobre sustrato ligeramente húmedo pero bien drenado. Requiere riegos frecuentes.

Leptospermum scoparium. También es conocido como el Árbol del Té de Nueva Zelanda. Es un arbusto o pequeño árbol nativo de la Isla Norte y la Isla del Sur en Nueva Zelanda, de Tasmania, Victoria y Nueva Gales del Sur en Australia. Posee un follaje perenne y sus hojas son de pequeño tamaño. Sus flores son blancas, ocasionalmente rosas. Prefiere el sol y los suelos neutros o levemente ácidos, siempre que sean fértiles y bien drenados. El riego ha de ser moderado, dejando que el sustrato se seque entre riegos.

Ozothamnus rosmarinifolius. Es un arbusto de hoja perenne y de crecimiento rápido originario de Nueva Zelanda y Australia. Sus hojas son aromáticas. Flores en brotes terminales muy llamativos. Su exposición es a pleno sol sobre sustratos ligeros y bien drenados. Resistente a la sequía y al frío.

Thryptomene Saxicola. Es un arbusto de hoja perenne y tallos arqueados de rápido crecimiento originario de Australia occidental. De flores rosadas abundantes poseen un gran atractivo ornamental. Prefiere la exposición a pleno sol sobre sustratos ligeros y bien drenados. Tolera la sequía y heladas moderadas.

Westringia fruticosa. Es un pequeño arbusto de hoja perenne de rápido crecimiento originario de Australia. Sus flores son atractivas para las mariposas y abejas. Le gusta la exposición a pleno sol sobre sustratos ligeros y bien drenados. Tolera la sequía y heladas moderadas.

Hoya carnosa

Plantas trepadoras de Australia o Nueva Zelanda

Hoya carnosa. Nativas del este de Asia y Australia emite tallos que pueden alcanzar hasta 6 metros de longitud. Sus hojas son ovales o elípticas y sus flores se agrupan en forma de umbela. Su mayor atractivo son sus bellas flores de color blanco, a veces con un centro rosa, de apariencia cerosa o como si estuviesen hechas de porcelana. Necesita de buena luz para la floración. Es de clima cálido aunque puede resistir heladas débiles de hasta -3ºC. Necesita de riego regular.

Muehlenbeckia complexa. Conocida como enredadera de alambre se le sitúa como originaria de Nueva Zelanda. Es una planta herbácea trepadora o rastrera semiperenne de tallos sarmentosos. Posee abundantes hojas pequeñas de forma redondeada y de un bonito color verde brillante. Sus flores carecen de valor ornamental y son muy pequeñas de color blanco amarillento. Son muy apropiadas para jardines costeros por su resistencia al viento y a la salinidad.

Pandorea jasminoides. Originaria de Australia y Malasia es una planta trepadora de tallos leñosos, follaje persistente de color verde oscuro. Florece desde verano hasta otoño. Exposición a pleno sol o semisombra luminosa. Requiere un suelo fresco, bien drenado, ligeramente ácido y fértil.

Está garantizado el suministro de insumos agrarios

Sin duda nos encontramos ante una situación de excepcionalidad provocada por la amenaza del Coranovirus (COVID-19) a nivel internacional. Los gobiernos han y están tomando las medidas oportunas para entre todos hacerle frente y vencerlo. Cada país implanta una ruta estratégica de actuación y por ello en este artículo nos referiremos a la particularidad y contexto del estado español.

La puesta en marcha del Real Decreto de Estado de Alarma por parte del estado español, entre las medidas adoptadas se encuentra partidas destinadas al confinamiento y reducción del libre tránsito de determinados colectivos humanos y ciertas mercancías. Estas medidas son revisadas periódicamente tras recibir las alegaciones oportunas de las asociaciones e interlocutores multidisciplinares que intervienen en nuestro día a día. Entre ellas y es el motivo de este artículo es la revisión de los suministros de insumos agrarios.

Solicitud de garantía del suministro de insumos agrarios

El sector agrario está considerado por el MAPA (Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación) como estratégico en el ámbito de la alimentación, tanto humana como ganadera. Por ello no se entendía como se podían paralizar las industrias que lo abastecen, con el consiguiente riesgo de rotura de la cadena productiva de frutas y hortalizas. También es cierto que esta situación afecta a todos los sectores primarios: agricultura, ganadería y pesca.

Centrados en el agrícola y en concreto al de suministro de insumos agrarios, como por ejemplo los fertilizantes, fitosanitarios, semillas, planteles de vivero,… así como cualquier otro tipo de insumo necesario para garantizar la cadena alimentaria, se han reunido asociaciones como AEFA, ASAJA, COAG, UPA, Cooperativas Agroalimentarias, FEPEX, ANOVE, APROSE, AEPLA, IBMA España, FEDISPROVE, APROVE y ANFFE para consensuar unos mensajes que mediante carta se ha remitido al MAPA.

Venta de frutas y hortalizas

En esta carta se ha trasladado por parte de estos sectores la preocupación por las consecuencias que puedan tener estas medidas sobre la normal producción, movimiento y distribución de los productos antes mencionados y tan necesarios para mantener la cadena alimentaria de frutas, hortalizas y plantas de forraje para la ganadería. Y en esta línea y sabiendo las circunstancias extraordinarias en las que se encuentra el sector, han solicitado unas indicaciones claras para que el sistema de suministro de los insumos trabaje a pleno rendimiento a favor de la producción de alimentos y el abastecimiento de los mercados.

Se garantiza el suministro de insumos agrarios

Como consecuencia a esta iniciativa este 18 de marzo, el MAPA ha publicado una nota informativa sobre la aplicación del real decreto de estado de alarma en el sector agrícola, ganadero y pesquero, en el que en aras de solventar las principales dudas suscitadas y planteadas se establece que las autoridades competentes delegadas adoptarán las medidas necesarias para garantizar el abastecimiento alimentario.

Entre la información que aparece en la nota informativa del MAPA sobre la aplicación del real decreto de estado de alarma en el sector agrícola, ganadero y pesquero está que “la producción agrícola, ganadera y acuícola, así como la actividad pesquera, la transformación de productos agrarios y pesqueros, los centros o clínicas veterinarias, el transporte y la distribución de alimentos, así como su comercialización a través de la venta minorista al consumidor, forman la cadena de abastecimiento alimentario cuya actividad debe garantizarse en la situación de estado de alarma. Esto implica que debe mantenerse no solo la actividad de las empresas agroalimentarias en su conjunto, incluidas las explotaciones agrícolas, ganaderas, acuícolas y la actividad pesquera, sino también la de las empresas que, a su vez, les suministran los insumos necesarios para su funcionamiento”.

Por lo tanto “en el caso de agricultores, ganaderos, acuicultores y pescadores deben poder seguir realizando las labores necesarias para garantizar el mantenimiento de actividad”.

Descarga en PDF Nota informativa del MAPA sobre la aplicación del real decreto de estado de alarma en el sector agrícola, ganadero y pesquero en PDF

Agapanthus africanus, el Lirio del Nilo

El Agapanthus africanus, también conocido como la Flor del amor, es una atractiva planta de flor que cada año es más fácil encontrarla en nuestros jardines europeos, sobre todo en aquellos de climas cálidos e incluso como flor cortada en el arte floral.

Es muy apta para ser cultivada en contenedores y por ello fácil de encontrar para su uso en jardinería. Normalmente se utiliza como planta cubresuelos, plantándose tanto a pleno sol como a media sombra, sobre todo en zonas muy calurosas.

Flor del amor

En España se le conoce popularmente como agapanto, la flor del amor, lirio africano o lirio del Nilo. Su nombre científico es Agapanthus africanus, pertenece a la familia Liliaceae y es originaria de Sudáfrica en concreto de la Provincia de El Cabo, si bien la podemos encontrar por todos los continentes debido a su popularidad ornamental.

La flor del amor es una planta herbácea, perenne y algo rizomatosa de raíces fasciculadas muy carnosas. Como planta, tras ver a primera vista sus gruesas raíces nos puede llevar a pensar que se trata de una planta bulbosa cuando en realidad no lo es: es una planta herbácea.

Sus hojas nacen de un corto tallo, son lineares de color verde con una longitud de treinta e incluso cincuenta centímetros si no tienen suficiente luz. En su conjunto crea matas que pueden superar el metro de altura.

Flores blancas de Agapanthus africanus

Su floración es un estipe floral con una longitud algo superior al medio metro, coronado por una umbela de múltiples flores (de 20 a 30 unidades) con pétalos de colores azules o blancos según la variedad. Cada una de esas flores es hermafrodita y actinomorfa, con un diámetro de 2 a 5 centímetros. Esta floración se produce en España desde mediados de primavera hasta bien entrado el otoño. Su período floral se reduce según sea más fría la zona. Si bien su floración puede ser al segundo o tercer año de su plantación, luego florece cada año y cada inflorescencia supera el mes de vida fácilmente. Tras fecundarse sus flores, se crea el fruto en forma de cápsula.

Con respecto a su fitoquímica, todas las especies de Agapanthus spp y por lo tanto también el Agapanthus africanus, producen fitoecdiesteroides, unos compuestos que están relacionados con la defensa frente al ataque de insectos que se alimentan de sus hojas. También está comprobado que determinados extractos de esta planta exhiben propiedades antifúngicas de acción muy efectiva contra patógenos de las plantas.

Volviendo a las flores de Agapanthus africanus son como avanzamos de diversos colores en función de la variedad. Destacar que últimamente están apareceiendo nuevas variedades con tonalidades diferentes. Por ejemplo la variedad ‘Albus’ es de flores amarillas, la ‘Shapphire’ de color azul oscuro, la ‘Aureus’ las produce doradas, etc. como también está el Agapanthus africanus ‘Variegatus’ de hojas blancas con bandas en tono verdoso.

Flores de Agapanthus africanus

Las flores de Agapanthus africanus tiene una gran aceptación en el mercado de la flor cortada para realizar arreglos florales, la belleza de su globosa inflorescencia, su tamaño, longitud de tallo y duración en jarrón son las claves de su éxito.

Para flor cortada se cultiva en viveros especializados que comercializan sus varas acabadas en atractivas florescencia. Estas flores de Agapanthus africanus son muy valoradas en el arte floral porque aportan un gran toque de elegancia al conjunto floral.

Las flores de Agapanthus africanus se pueden encontrar en las floristerías durante todo el año, aunque su época de floración en el hemisferio norte es desde mayo a septiembre.

Para aumentar la duración de esta flor en el jarrón, debemos recortar la base de su tallo floral entre uno y dos centímetros. El corte es preferible que sea en oblicuo para aumentar el área en contacto con el agua. En cuanto al cambio de agua, cada dos o tres días será suficiente… y si se le puede incorporar un conservante de flor mucho mejor.

Si se adquiere un arreglo floral con estas flores, es probable que mientras muchas de ellas terminan su ciclo como flores frescas, las del Agapanthus africanus sigan estando bien. Entonces podemos seleccionarlas, seguir cortando unos centímetros la base del tallo floral y colocándolas en recipientes altos con agua, que si pueden contener un conservante de flor mucho mejor, para aprovechar la esbeltez ornamental del conjunto.

Flores azules de Agapanthus africanus

El Agapanthus africanus el jardín

Para la utilización del Agapanthus africanus en jardinería, se pueden encontrar en floristerías, centros de jardinería y demás tiendas especializadas, cultivadas en macetas de 14 a 22 centímetros de diámetro como formatos más populares.

En jardinería es una planta ideal para jardines privados, al igual que para parques urbanos y rotondas dada su rusticidad y bajo mantenimiento.

Su ubicación en el jardín debe de ser a pleno sol, aunque un poco de sombra tampoco le disgusta. A pleno sol sus hojas crecen de forma más compacta. Se aconseja plantarlo en grupos para crear vistosos macizos florales. También actúa como planta cubre suelo y si pensamos que esta sea su función deberemos aumentar su densidad de plantación.

Es muy rústica, por lo que no es muy exigente en suelos, aunque con terrenos fértiles y bien drenados crecerá de forma rápida. Requiere riegos periódicos en verano y un distanciamiento entre ellos durante el periodo invernal.

Su floración es muy larga, pudiendo permanecer en la planta hasta casi los dos meses. Aunque florece desde mayo a septiembre, su mejor época de floración es a partir de la segunda quincena de agosto.

Aunque soporta temperaturas de hasta -15ºC, pierde sus hojas a -8ºC. En tal caso, estas vuelven a salir durante la primavera siguiente.

También es bastante resistente a la sequía, la polución, el ambiente marino y las plagas, excepto caracoles, los nematodos en sus raíces y los topos.

Cultivo del Agapanthus africanus

Aunque el Agapanthus africanus o flor del amor se reproduce por semilla, lo más rápido es hacerlo por división de mata. Para ello separaremos dichas matas a finales de invierno o verano (en el hemisferio norte) y las plantaremos rápidamente en el jardín, procurando que no les falte humedad hasta su perfecto enraizamiento. Esta operación de división de mata conviene hacerlo cada tres o cuatro años.

Por lo tanto, su reproducción por semilla, queda relegado a aquellos que mediante hibridaciones, desean obtener nuevas variedades.

La Flor del amor es muy apta para ser cultivada en contenedores y por ello fácil de encontrar para su uso en jardinería. Si tenemos una plantación de ellas en el jardín, podemos aprovechar su arranque para multiplicarlos por división de matas y plantar algunas en contenedor. Para ello utilizaremos un sustrato de plantación o sustrato universal, separaremos parte de sus rizomas que enterraremos ligeramente, le proporcionaremos un riego y mantendremos el sustrato húmedo hasta su arraigue. Cuando esté la planta brotada y con vigor o bien la mantenemos en cultivo en ella o la trasplantamos a otra parte del jardín.

El abonado del Agapanthus africanus tiene que ser el tipo ‘fertilizante para plantas de flor’ que se puede añadir en el agua de riego o aplicado sobre el sustrato según las características del fabricado.

Los cuidados del Agapanthus africanus

Como ya hemos adelantado, los cuidados del Agapanthus africanus son realmente sencillos porque se trata de una planta muy rústica. Estos se pueden resumir en:

  • Ubicación: A pleno sol, aunque un poco de sombra tampoco le disgusta.
  • Suelos: Prefiere los terrenos fértiles y bien drenados.
  • Riegos: Periódicos en verano y un distanciamiento en periodo invernal.
  • Clima: Soporta temperaturas de hasta -15ºC aunque pierde sus hojas a -8ºC.
  • Resistente a: Sequía, la polución y el ambiente marino.

Anigozanthos flavidus

La Anigozanthos flavidus es una planta ideal para la Xerojardinería y aunque de origen australiano está perfectamente adaptada al clima mediterráneo español. Su rusticidad y singular belleza floral la están convirtiendo en una planta cada vez más popular en parques y jardines, tanto públicos como privados.

Gracias a este protagonismo en el sector ornamental ha conseguido que se cultive en gran cantidad en los viveros españoles y desde ellos sea comercializada también en los mercados internacionales de Centroeuropa.

Pata de canguro

Su nombre más común es ‘Pata de canguro’ y hace alusión a sus curiosas flores debido a la similitud que muestran con las patas de los canguros. Otros nombre comunes con los que se la conocen son ‘Pata de gato’ y ‘Lirio de espada australiana’. Su nombre científico es Anigozanthos flavidus y pertenece a la familia Haemodoraceae. Es originaria del suroeste de Australia.

Es una planta vivaz que crece a partir de rizomas subterráneos cortos y horizontales. Sus raíces rizomatosas le permiten, cuando están bien arraigadas, sobrevivir durante períodos de sequía. Según la climatología la Anigozanthos flavidus puede comportarse como perenne o parcialmente perenne.

La planta en su desarrollo forma densas matas llegando a superar los 80 centímetros de altura (hay variedades mucho más compactas). Sus largas hojas en forma de espada emergen en roseta creando una forma de abanico. Según la variedad son de color verde oscuro, claro o grisáceo, incluso pueden presentar o no una fina vellosidad.

Partiendo desde el mismo corazón de su roseta basal nacen unos tallos largos y sin hojas que pueden superar el metro de altura, terminando en un racimo de flores: son escapos florales. Florece durante la primavera y verano y sus flores son nectaríferas aunque sin perfume, de tamaño grande con aspecto algodonoso, tubulares y según la variedad de color amarillo, rojo, rosado, anaranjado o duotono. Precisamente esta forma tubular floral se asemeja a una pata de canguro y de ahí su nombre popular. El extremo de las flores se abre formando una estrella de seis puntas.

Flores de Anigozanthos flavidus

Su floración es tan apreciada que desde hace unas décadas se está trabajando y consiguiendo nuevas y atractivas variedades. Con ello se ha conseguido no sólo aportar y enriquecer el catálogo floral en la jardinería sino también ganar interés en el mercado de la flor cortada.

En su hábitat natural son los pájaros los encargados de su polinización. Cuando estos llegan a las flores, estas depositan sobre sus cabezas el polen que durante sus siguientes vuelos de flor en flor van diseminando y ayudando a la fecundación cruzada.

Cuidado del Anigozanthos flavidus en el jardín

Los cuidados del Anigozanthos flavidus en el jardín comienzan antes de su plantación ya que la elección del lugar y tipo de terreno o sustrato juegan un papel muy importante.

De entrada pueden ser cultivadas tanto en macetas y jardineras como directamente en el terreno del jardín. En todos los casos necesitan un lugar soleado y ventilado por lo que la emplazaremos en espacios abiertos y con el menor número de horas de sombra posibles. Es una planta que puede crecer sobre casi cualquier tipo de terreno siempre y cuando sea ligero y drene bien. Si los plantamos en macetas el sustrato para cactus es muy apropiado, aunque le podemos añadir algo de compost. Si lo plantamos directamente en el jardín y vemos que el terreno es muy pesado, siempre lo podemos mejorar añadiendo diferentes materias primas como la arcilla expandida, arena de sílice, poliestireno expandido (EPS) e incluso grava por ejemplo para aumentar la porosidad de la tierra sobre la que va plantada.

El Anigozanthos flavidus puede ser utilizado en rocallas o plantado en grupo creando grandes zonas floridas y espectaculares en el jardín.

Es una planta que vegetará perfectamente en clima mediterráneo y si la zona no está en riesgo de grandes heladas mucho mejor, aunque puede soportar temperaturas de hasta -6ºC sin sufrir daños. También soporta muy bien el calor y la sequía, pero no tanto el exceso de viento y el aire marino.

A la hora del riego, aunque soporta bien la sequía le viene bien los riegos regulares, sobre todo y más abundantes durante el período de floración, eso sí, sin encharcar. También es recomendable no mojar las hojas por lo que el riego localizado es lo ideal. Si es así, podemos fertirrigar con un fertilizante especial para plantas de flor.

En buenas condiciones el Anigozanthos flavidus permanece perfectamente en el jardín durante tres o cuatro años. Cuando entra en declive es recomendable sustituir las plantas ya sea plantando nuevas o dividiendo las existentes para conseguir nuevas plantaciones y revitalizarlas. Si es así, a finales de invierno o principios de primavera dependiendo del clima de cultivo, las arrancaremos y removeremos la tierra a la que le añadiremos un poco de materia orgánica para enriquecerla, enterraremos los rizomas a una profundidad de unos diez centímetros y regaremos.

Respecto a su poda, esta será de limpieza, eliminando todo el material vegetal estropeado por las heladas y restos de hojas y tallos enfermos. También es conveniente ir retirando las flores marchitas.

Como planta rústica prácticamente carece de enemigos. Sólo los caracoles y babosas les pueden atacar en sus fases juveniles o en la época de brotación primaveral.

Destacar que el Anigozanthos flavidus en jardín pueden propagarse por sí mismo mediante sus rizomas, llegando a colonizar espacios de más de un metro de diámetro. También que al ser una planta muy apreciada como flor cortada, tanto por su belleza exótica como durabilidad en jarrón, si tenemos zonas con ellas cultivadas en el jardín son una fuente de suministro de flor cortada para embellecer rincones de nuestro hogar.

Plantas de Anigozanthos flavidus

Especies de Anigozanthos spp

Está documentado que fue el botánico suizo Augustin Pyramus de Candolle quien describió y dibujó en 1807 por primera vez al Anigozanthos sp. Según parece, su nombre proviene del anoikos (abierto) y anthos (flor), en cuanto a flavidus lo hace al habitual tono amarillo de las flores.

Este género Anigozanthos acoge a una veintena de especies entre las que destacan ornamentalmente:

  • Anigozanthos bicolor
  • Anigozanthos flavidus
  • Anigozanthos gabrielae
  • Anigozanthos humilis
  • Anigozanthos kalbarriensis
  • Anigozanthos manglesii
  • Anigozanthos onycis
  • Anigozanthos preissii
  • Anigozanthos pulcherrimus
  • Anigozanthos rufus
  • Anigozanthos viridis

Cultivo del Anigozanthos flavidus

El cultivo del Anigozanthos flavidus puede ser partiendo de semillas como por división de mata. En el primer caso arrancaremos las plantas durante el reposo vegetativo invernal y replantaremos sus rizomas.

En el caso de optar por la multiplicación del Anigozanthos flavidus por semilla, recogeremos sus semillas al final del verano y las sembraremos al comienzo de la primavera. La siembra se realizará sobre un sustrato esponjoso, rico en turba y bien drenado. Manteniendo el sustrato húmedo hasta su nacencia, las plantitas obtenidas se repicarán en pequeñas macetas y cuando formen un buen cepellón ya estarán preparadas para ser plantadas en las macetas definitivas o en el jardín. Debemos saber que por lo general no suelen florecer hasta el año siguiente al de su plantación.

Colectivo PEDN

Colectivo PEDN: Colectivo en favor de la Producción Española de Documentales de Naturaleza

Desde Floresyplantas.net mostramos nuestro apoyo a la reciente creación del Colectivo PEDN y como muestra de ello, nos hacemos eco en este post.

El 21 de febrero del presente año en Madrid, se ha constituido el Colectivo PEDN en favor de la Producción Española de Documentales de Naturaleza. Este está constituido por las siguientes quince compañías españolas:

  • 1080 Wildlife Productions (Extremadura)
  • Acajú Producciones (Andalucía)
  • Alas Cinematografía (Canarias)
  • Aquacine (Canarias)
  • Azor Producciones (Comunidad Valenciana)
  • Bicho Producciones (Castilla y León)
  • Documentazul (Asturias)
  • Genera Wildlife (Madrid)
  • Into The Wild Producciones (Madrid)
  • Nautilus Producciones (Comunidad Valenciana)
  • Paleartica Producciones (Baleares)
  • Palearctic Films (Andalucía)
  • Playground Estudio (Madrid)
  • Taller de Fieras (Cataluña)
  • Terra Incognita Docs (Castilla y León)

El Colectivo PEDN solicita a Televisión Española “una mayor apuesta por los documentales de naturaleza producidos en España en línea con lo que hacen otras televisiones públicas del ámbito europeo.” Y para ello han suscrito conjuntamente una “Carta del Colectivo PEDN” que han hecho llegar a Samuel Martín Mateos, director de La 2. En ella se reclama entre otros aspectos un mayor presupuesto para producciones españolas de documentales de naturaleza, el dar un impulso a la coproducción internacional en este género y la firma de un convenio para fijar una colaboración a corto, medio y largo plazo.

40 Aniversario del fallecimiento de Félix Rodríguez de la Fuente

El Colectivo PEDN nace y se pone en marcha coincidiendo con el 40 Aniversario del fallecimiento de Félix Rodríguez de la Fuente (14 de marzo). Con él se pretende “aglutinar los esfuerzos de los productores del sector para recabar apoyos de organismos e instituciones a su labor divulgativa y muy especialmente de Televisión Española.

Félix Samuel Rodríguez de la Fuente por muchos recordados por su exitosa e influyente serie El hombre y la Tierra (1974-1980), fue un naturalista y divulgador ambientalista español, defensor de la naturaleza y realizador de documentales para radio y televisión. Personaje polifacético de gran carisma cuya influencia ha perdurado a pesar del paso de los años, tras su fallecimiento el 14 de marzo de 1980.

Promover la conservación del Medio Ambiente, la biodiversidad y dar a conocer el patrimonio natural español

Con esta carta el Colectivo PEDN recalca que “el sector quiere llamar la atención sobre las dificultades que atraviesa al apenas contar con apoyo de la principal cadena pública que destina cada vez menos recursos a la producción nacional de este tipo de contenidos y más a la adquisición de contenidos producidos por las grandes productoras internacionales.” A su vez destaca que las producciones realizadas por estas compañías son emitidas por cadenas de prestigio internacional como National Geographic, Discovery Channel, France Télévisions, ARTE o ZDF y ponen en valor su papel a la hora de “promover la conservación del Medio Ambiente y la biodiversidad y dar a conocer dentro y fuera de nuestras fronteras el patrimonio natural español.”

Descarga en PDF
Descarga del Carta del Colectivo PEDN en PDF

Adenanthos sericeus

El Adenanthos sericeus es una planta australiana que comienza a verse con frecuencia tanto formando parte de la jardinería de España como en las exportaciones como planta ornamental hacia Centroeuropa. Su rusticidad, suavidad al tacto de sus hojas como sus peculiares flores sean quizás protagonistas de su éxito.

Pueden cultivarse en el jardín de forma aislada o en grupo, así como en grandes maceteros para conseguir espectaculares plantas. Sin duda estamos ante un arbusto muy particular que puede vivir perfectamente en un clima mediterráneo e incluso junto al mar.

Arbusto lanoso australiano

Su nombre científico es Adenanthos sericeus, pertenece a la familia Proteaceae y es originaria de la costa sur de Australia Occidental. Se le conoce popularmente con el nombre de arbusto lanoso australiano, además de arbusto lanoso, arbusto woolly o woolly bush.

Planta de Adenanthos sericeus

Es un arbusto de hoja perenne que puede llegar a adquirir un porte de hasta cinco metros de altura si bien lo normal es que se sitúe sobre los dos metros y medio y unos 2 de envergadura. Por sus ramas y hojas recuerda al aspecto de los abetos si bien como hemos adelantado nada tiene nada que ver con las coníferas. Recuerda el aspecto pero nada más ya que sus hojas de forma acicular son muy suaves al tacto y de un color verde grisáceo que pueden llegar a alcanzar los 4 centímetros de largo.

Su floración se produce en el hemisferio norte durante la primavera y parte del verano. Lo hace mediante unas singulares flores de color rojo situadas al final de sus ramas. Estas son pequeñas, de color rojo, de forma alargada y emitidas tanto de forma solitaria como en pequeños grupos.

El Adenanthos sericeus en el jardín

El Adenanthos sericeus en el jardín ofrece muchas posibilidades ornamentales. Ya sea plantado directamente en el jardín o en macetero en una terraza o balcón, su ubicación debe ser preferiblemente a pleno sol aunque tolera unas pocas horas de sombra al día.

El aspecto que avanzábamos de un arbusto que recuerda a las coníferas lo hace apto para ser decorado como árbol de navidad, Esto sorprenderá a quien se acerque y toque ya que la suavidad y coloración ligeramente plateada de sus hojas no deja indiferente a nadie. Esta cualidad también aporta un gran atractivo cuando sus ramas se mecen al paso del viento.

El terreno donde se plante debe ser arenoso e incluso si es algo pedregoso mejor. Por lo tanto si la tierra del jardín no es muy buena no debe preocuparnos en exceso. En su lugar de origen se desarrolla sobre las arenosas colinas costeras y afloramientos rocosos, por lo que vivirá bien en zonas litorales del mediterráneo.

Si la plantamos en maceta, esta debe ser grande y el sustrato con buen drenaje, Si se desea comprar uno prefabricado, el sustrato para cactus es muy apropiado.

Es ideal para rocallas como arbusto protagonista. También lo es, plantado en grupo de forma alineada, para crear pantallas que aíslen de miradas externas y creando zonas o espacios de intimidad en el jardín.

Si destacamos su follaje plateado y sedoso como un atractivo especial, también podemos cortar sus ramas y utilizarlas como verde de corte en arreglos florales. Estas pueden aguantar con buen aspecto en jarrón hasta un mes desde que son cortadas. Y en cuanto a sus flores rojas, dan un toque muy llamativo durante la primavera y gran parte del verano, que si bien no son muy grandes sí pueden emitir una espectacular floración.

Flores de Adenanthos sericeus

Especies de Adenanthos spp.

El género Adenanthossp. cuenta con unas 30 especies de arbustos originarios de Australia.

Entre las especies de Adenanthos spp. más conocidas con valor ornamental están:

  • Adenanthos sericeus
  • Adenanthos cuneatus
  • Adenanthos obovatus
  • Adenanthos drummondii

Cuidados del Adenanthos sericeus

El Adenanthos sericeus un arbusto muy rústico que puede tolerar heladas muy suaves. También es muy resistente a la sequía por lo que funciona muy bien en xerojardinería. Tal es así que con un poco de pluviometría no requiere de ningún riego durante el verano. En este contexto es muy recomendable cubrir el suelo con algún tipo de mulch para evitar la evaporación y retener al máximo la humedad del suelo.

Hay que huir de los terrenos y sustratos pesados y con poco drenaje. Por ello debemos recurrir a la aportación de materiales como arcilla expandida, arena de sílice, poliestireno expandido (EPS) e incluso grava por ejemplo para aumentar la porosidad de la tierra sobre la que va plantada.

Su ubicación debe ser a pleno sol, para que le aporte un crecimiento compacto y asegure su buena floración. Según el cometido que deseamos que tenga, se someterá a la poda del Adenanthos sericeus:

  • Como ejemplar no se le hará ninguna salvo si hay que sanear algunas ramas dañadas.
  • En grupo puede hacerse a finales de invierno para ‘limpiar su aspecto ornamental’ y mantenerla en volumen dentro de los espacios previstos.
  • En setos se les pueden aplicar dos podas, una a finales de invierno y otra también a finales de verano para mantener su forma y aspecto compacto.

Estas ramas cortadas con sus hojas de aspecto sedoso son muy apreciadas como ‘verde de corte’ para arreglos florales.

Respecto al abonado, con el utilizado de base para el mantenimiento del jardín es suficiente. En cuanto al tipo una fórmula muy adecuada es un 18-12-24 + oligoelementos a la dosis recomendada por el fabricante.

Como planta muy rústica, no le suelen afectar plagas ni enfermedades.

Cultivo del Adenanthos sericeus

El cultivo del Adenanthos sericeus se realiza en viveros profesionales y su destino es tanto para el mercado nacional como para el abastecimiento de mercados centroeuropeos.

El cultivo parte con el enraizaje de esquejes procedentes de plantas madres seleccionadas. Cada empresa suele ir haciendo año tras año un proceso de selección buscando las plantas de crecimiento más rápido, compacto, con buena floración y perfecto estado de sanidad. Una vez enraizado se envían a los viveros que finalizan su cultivo.

Una vez llegados estos esquejes son plantados en maceta definitiva empleando uno o varios esquejes por maceta/contenedor según el formato que se desee. Su cultivo es al exterior, siendo sometido a una o más podas para favorecer su aspecto final.

Su venta se realiza normalmente durante la primavera si bien, al estar cultivada en contenedor puede comercializarse en cualquier época del año. Incluso en diciembre por ser, como hemos avanzado, en algunos lugares un sustituto del tradicional árbol de Navidad.

Correa pulchella

La Correa pulchella es una planta ornamental que entra con fuerza en el mundo de las plantas de moda, avalada tanto por su atractivo aspecto como por su rusticidad, siendo además una protagonista en el mundo de la xerojardinería.

Es una planta apta para su cultivo maceta. Plantada directamente en el jardín, puede crear interesantes zonas arbustivas de floración abundante desde primavera a bien entrado el otoño. Su capacidad de brotación le permite portarse también para formar setos de baja altura e incluso como planta cubresuelo.

Planta de Correa pulchella

Salmon correa

Originaria del sur australiano, se le conoce popularmente como Salmon correa, siendo su nombre científico Correa pulchella y pertenece a la familia Rutaceae.

Se trata de un pequeño arbusto que suele situar su altura entre los 30 y 100 centímetros, mientras que gracias a su poder de brotación puede alcanzar anchuras de hasta dos metros.

Es perenne de follaje denso. Sus hojas de forma oval son de pequeño tamaño, de color verdes por encima y gris verdoso por debajo.

Con floración entre los meses de abril y septiembre, sus flores son de aspecto tubular con porte colgante. Según la variedad estas pueden ser de color rosado, anaranjadas y raramente blancas, todas ellas tienen anteras amarillas.

Su sistema radicular es fasciculado y crece bien en suelos con escasez de agua e incluso algo salinos. En este sentido destacar que lo hace mejor en aquellos suelos fértiles y bien drenados.

Flores de Correa pulchella

Cuidados de la Correa pulchella

Los cuidados de la Correa pulchella son mínimos si se le respeta los factores limitantes como son la humedad del suelo y su exposición. La ubicación será a pleno sol del jardín. Si durante unas pocas horas tiene sombra no pasará nada, pero cuantas más horas de sol mejor.

El terreno o sustrato preferido es el fértil y bien drenado, aunque como avanzamos la Correa pulchella es muy rústica y vegeta también sobre tierras de peor calidad: suelos salinos y calizos. Si el terreno es muy arenoso se puede mejorar aportando un porcentaje de compost o sustratos fabricados con turba. En definitiva mejorarlos con enmiendas orgánicas. Si por el contrario posee mucha materia orgánica conviene aumentar su aireación para facilitar su drenaje y en estos casos añadiremos y mezclaremos bien la arena de sílice, arcilla expandida u otros materiales que ayuden a conseguirlo, así esta planta crezerá mejor.

Es resistente a la sequía y a la salinidad por lo que la calidad del agua deja de ser un problema. Aun así conviene mantener riegos periódicos para evitarle que padezca estrés hídrico. Respecto al abonado es interesante mullir ligeramente el suelo con alguna herramienta y aplicar a principios de primavera un abono complejo con macro y oligoelementos. Esta acción se puede repetir a los tres meses. Si lo aplicamos vía riego (fertirrigación) se puede realizar tantas veces como reguemos, controlando la dosis en función de la frecuencia, aplicando las dosis más bajas en riegos frecuentes y viceversa.

También es resistente a las heladas moderadas, pudiendo soportar hasta los -6ºC. También lo es a la salinidad y la brisa marina siendo por lo tanto una planta recomendable para zonas muy cercanas al mar.

Si hay que podarla es interesante buscar las épocas que no esté en plena floración ya que atraen a las abejas que se alimentan de su néctar. Como planta muy rústica, apenas padece de plagas y enfermedades, siendo los pulgones los que se pueden presentar. Se combaten bien con insecticidas sistémicos, aplicados tras ver la aparición de los primeros insectos sobre sus brotes tiernos.

Flores de Correa pulchella

Cultivo de la Correa pulchella

El cultivo de la Correa pulchella se puede multiplicar por semilla, si bien a nivel profesional se emplea la técnica de reproducción por esqueje. En tal caso se opta por los esquejes de tallos semileñosos que enraízan rápidamente en condiciones de humedad y temperatura controlada.

Estos se extraen a principios de otoño de plantas madre seleccionadas y se enraízan como esquejes interdonales en pequeñas macetas con un sustrato turboso y húmedo. Se le puede aplicar en la base del esqueje una hormona de enraizamiento para favorecer la emisión y fuerza de sus nuevas raíces. También se puede esquejar a principios de primavera e incluso si son de tallos jóvenes y tiernos durante la misma. En todos los casos hay que hacerlo en un espacio controlado para que el exceso de luz y corrientes de aire lo puedan deshidratar.

Una vez enraizados, se procede a su aclimatación ventilándolos más periódicamente y exponiéndolos cada día un poco más al sol. Durante este tiempo no sólo se aclimatará a las condiciones ambientes del jardín sino que creará un buen cepellón. También durante este tiempo se le puede realizar uno o dos pinzamientos para ir favoreciendo la brotación de la planta. Una vez bien formada se trasplantará a una maceta mayor o directamente en el jardín.

Variedades de Correa pulchella

Sobre la Correa pulchella (Correa reflexa x pulchella) se pueden encontrar diversas variedades si bien dentro de ella los viveros seleccionan plantas que con el tiempo son considerados genotipos propios de la empresa que los cultiva.

Aun así, se encuentran nombres de variedades como por ejemplo:

  • Correa pulchella ‘Little Cate’. Una selección de planta de grandes flores rosadas y brillantes.
  • Correa pulchella ‘Pink Mist’. De floración rosada pálida procedente de poblaciones silvestres.

Como avanzamos, al ser una planta nueva con grandes posibilidades ornamentales, en breve seguro que irán apareciendo nuevas variedades de Correa pulchella.

Multiplicación de las rosas por injerto y semilla

En otro artículo vimos dos tipos de multiplicación de las rosas: por esqueje y por acodo aéreo. En este y siguiendo con “Las Rosas”, vamos a ver otros dos nuevos métodos de multiplicación: por injerto y su reproducción por semillas.

Con esta información o invito a disfrutar creando nuestras propias rosas a partir de las que más nos gusten y recordad que nada es imposible en el mundo de las rosas.

Multiplicación del rosal por injerto

Se trata de reproducir “soldando dos plantas diferentes” de manera que al crecer se unan y se conviertan en una sola. El elemento que dará origen a la nueva parte del rosal a través de una rama, una yema o una porción de tallo se llama púa o injerto y el elemento que contiene las raíces se llama porta injerto o patrón.

Brotación de un rosal

Podemos realizar nuestros injertos de diferentes formas:

Injerto en forma de “T”. Realizando una incisión en forma de “T” de unos 3 centímetros en el patrón y colocando en ella la yema del rosal que queramos injertar. Hemos de cerrar la incisión por completo dejando únicamente a la vista la nueva yema. Cortaremos el resto de la rama para obtener el máximo vigor sobre la yema injertada.

Injerto en cuña. Seccionamos una rama gruesa, vigorosa, sana y realizamos una incisión lateral de unos 2 centímetros de longitud en el portainjerto o patrón. Previamente habremos seleccionado una rama más delgada a la escogida en el patrón y la cortaremos por la parte inferior en forma de cuña. Insertamos la cuña en la incisión del patrón y cerramos la unión de ambas ramas con cinta de carretero, por ejemplo.

Los injertos se pueden hacer en primavera (yema vegetante) o a finales de verano (yema durmiente).

El injerto se puede realizar a partir de un rosal silvestre e injertando en él una especie híbrida que queramos hacer más fuerte y vigorosa o bien se puede hacer en un rosal de un determinado color y forma de la flor para obtener rosales (normalmente de pie alto) con diferentes colores en su floración.

Hibridación de rosales

Reproducción del rosal por semillas

Particularmente es el método que más me gusta y con el que más disfruto ya que en raras ocasiones se da el resultado esperado. Los rosales como todos los arbustos generan semillas en pequeños escaramujos, el caso del rosal es muy especial ya que sus flores son dioicas al disponer tanto de estambres como de pistilos.

Si la polinización ocurre en la misma flor, lo que se denomina polinización autogámica, es posible que reproduzcamos la misma variedad de rosa. Por el contrario, si la polinización la realizamos entre estambres y pistilos de flores diferentes se tratará de polinización cruzada.

En el grupo “Pasión por las rosas” está causando furor la reproducción por semilla, bien sea de rosales que tenemos en nuestro jardín como en otros que vamos encontrando en jardines públicos. También es un gran método de intercambio entre los miembros del mismo.

Para crear nuestra propia rosa, haremos de forma manual una polinización cruzada controlada, para ello, durante los meses me mayo y junio, cogeremos las flores más bellas y regulares de los dos individuos que queremos cruzar y las seleccionamos antes de que abran completamente exponiendo tanto los pistilos como los estambres.

Estambres de flores de rosas

Cortaremos del rosal aquella que consideremos “macho” y eliminando los pétalos, cortaremos los estambres que colocaremos en un recipiente de vidrio que permanecerá cerrado por 24 horas, tiempo en el cual se secarán y podremos extraer el polen.

Eliminaremos los pétalos de la flor que consideremos “hembra” que permanecerá en el rosal y retiraremos con una pequeña tijera los estambres de esta flor, teniendo cuidado de que ninguno de ellos caiga sobre los pistilos.

Impregnaremos mediante un pincel el polen que hemos recogido sobre los pistilos de la flor hembra, a continuación, la cubriremos con una capucha de malla fina hasta que el fruto madure, momento en el cual lo cortaremos para obtener las semillas.

Las semillas las tendremos durante 24 horas en agua y después unos 30 días en un lugar frío entre papeles húmedos (puede ser nuestro propio frigorífico) e iremos verificando en este tiempo si empiezan a germinar. Las semillas germinadas se sembrarán a pocos centímetros de profundidad.

En la primavera siguiente, obtendremos las plantitas que serán toda una sorpresa, con nuevas rosas creadas por nosotros lo cual es todo un acontecimiento.

Carlos Rivero Ramos: Pasión por las rosas

Carlos Rivero RamosCarlos Rivero Ramos, al margen de su actividad profesional tiene entre sus pasiones las de viajar, escribir,… pero destaca la de su pasión por el mundo de las rosas.

Carlos encuentra en la floricultura y en especial en el cultivo de las rosas un amplio abanico de posibilidades a todos los niveles. Es un alivio al estrés y saca el poeta que hay en él, además de incitarle a coleccionarlas de forma casi compulsiva. Destaca su colección de diferentes especies de rosas y el que varias de ellas han sido premiadas en el Concurso Nacional de las Rosas en 2018 y 2019.

» Autor: Carlos Rivero
» Canal Facebook: Pasión por las rosas

Petunias colgantes

Desde hace unas pocas décadas las petunias colgantes han ido acaparando la atención del mercado ornamental y con ello también ocupando espacios en los que hasta su llegada compartían otras plantas como por ejemplo la Verbena hybrida, Portulaca sp. o las murcianas (Pelargonium peltatum).

Cuando nos referimos a las petunias colgantes, en realidad lo estamos haciendo de un concepto como tal en las que se incluyen tanto especies como marcas comerciales que se dan a tipos de petunias mejoradas genéticamente. Así nombres como Calibrachoas, Surfinias, Million Bells, Picobella,… aparecen en etiquetas, publicaciones e incluso en publicidades en los puntos de venta y revistas especializadas.

También es importante destacar que en este grupo de petunias no se suele incluir la tradicional Petunia floribunda, aunque se le puede incorporar. Esta ha sido muy utilizada en la jardinería pública para crear grandes zonas de color a la vez de que funcionase como planta cubresuelo.

Por lo tanto, las petunias colgantes componen un grupo de petunias que tienen en común el que son colgantes, compactas, muy floríferas, de alegres colores, más resistentes al calor que las de otros tipos,… aportando nuevas posibilidades ornamentales al universo de la petunia. Todas ellas resultan espectaculares colocadas en macetas o tarrinas colgantes, en grandes maceteros o jardineras dado su destacado desarrollo, como cubresuelos, en parterres e incluso también son aptas para su uso en rocallas.

Petunias colgantes

Tipos de petunias nuevas

Cuando hablamos de nuevos tipos de petunias, al igual que lo hacemos en otros artículos relacionados con plantas ornamentales, se puede dar el caso de que carezcan de un origen geográfico concreto. Este es un claro ejemplo de ello y el motivo es porque en realidad son fruto de mejoras genéticas en base a híbridos interespecíficos (entre diferentes especies dando lugar a una nueva), fijación de mutaciones espontáneas, etc.

Por lo tanto estamos ante plantas muy orientadas a satisfacer la demanda del mercado y junto a ellas también acompaña un completo catálogo de variedades con características diferenciales en base al color de sus flores y comportamiento en cultivo y jardín.

Este tipo de petunias, además de las coincidencias compartidas antes mencionadas tienen en común un crecimiento rápido y muy buena capacidad de brotación, haciéndolas ideales para crear grandes masas de color con muy pocas plantas. Uno de sus valores a destacar es la buena resistencia al calor, factor muy importante en verano y que le permite desarrollarse bien desde principios de primavera a bien entrado el otoño. En cuanto a su aspecto general de planta, al margen de las características botánicas propias de cada tipo, en mayor o menor medida comparten el que poseen tallos muy ramificados y de cierta longitud, hojas más o menos ovaladas, de color verde y tacto algo pegadizo, así como flores en forma de trompeta.

¿Cómo cuidar las petunias colgantes?

Las petunias colgantes son bastante rústicas y por lo tanto fáciles de cuidar si prestamos especial atención a su exposición, riego, abonado y elección adecuada del sustrato en caso de trasplante.

Su exposición debe ser a pleno sol, aunque la semisombra la tolera bastante bien si no es muy prolongada, y muestra de ello es que son capaces de florecer durante períodos de días nublados. Otro factor a tener en cuenta a la hora de buscar su ubicación es que este ofrezca algo de protección ante los fuertes vientos ya que pueden deteriorar su aspecto.

Su gran masa foliar aconseja que el sustrato mantenga una humedad constante sin llegar a que este se mantenga encharcado para evitar daños en sus raíces. Es más, requiere un sustrato con buena aireación.

En cuanto al riego está indicado que se aplique directamente sobre el sustrato. De esta forma evitaremos que se estropeen sus flores. De tener que regar por aspersión, evitaremos los riegos a medio día para que no se dañen sus flores y hojas, así como a últimas horas del día para evitar que la planta pase la noche mojada y se favorezca el ataque de hongos.

El abonado puede realizarse en la modalidad de abonado de fondo aportando un fertilizante granulado mezclado con la tierra, que si puede ser de liberación lenta o controlada mucho mejor. Si no, a partir de la tercera o cuarta semana de su plantación en el jardín, se puede comenzar con un plan de fertirrigación. El abono adecuado es el especial para plantas de flor a la dosis recomendada por el fabricante.

Con el tiempo y para ir cuidando el aspecto de la petunia colgante se pueden ir eliminando sus flores según se van quedando marchitas e ir cortando sus ramas según van envejeciendo, deteriorando o que alcancen un crecimiento fuera de las zonas preestablecidas. Si mantenemos unas podas continuadas en el tiempo se irá favoreciendo su crecimiento más compacto.

Petunias colgantes

Multiplicación de las petunias colgantes

La multiplicación de las petunias colgantes se puede reproducir por semilla, como todas las plantas de flor, pero en realidad no es aconsejable porque las plantas que se obtienen bajo este método no corresponden 100% a las de sus progenitores. El motivo es que son híbridos y por lo tanto hay que recurrir siempre a los parentales originales y esto sólo está al alcance de las empresas genetistas que las han obtenido.

Por lo tanto, si deseamos multiplicar las petunias colgantes debemos recurrir a la técnica del esqueje, ya sea apical (de punta de rama) o interdonal (trozo de tallo con dos o tres hojas. En tal caso, durante la primavera cortaríamos unas ramas de petunia colgante, la trocearíamos en secciones de unos cinco centímetros con varias hojas y sin flores y los plantaríamos en macetitas con un sustrato turboso del tipo sustrato para realizar esquejes o sustratos para plantas de interior bien humedecido. Pondríamos esas macetas bien protegidas del sol directo, sin corrientes de aire y cubiertas con una bolsa de plástico para que mantuviesen una humedad relativa bien alta. En esas condiciones, en unos 15 o 20 días pueden haber enraizado. Si en su plantación se utilizan hormonas de enraizamiento se favorecerá la emisión de raíces tanto en cantidad como en vigor de las mismas.

Una vez enraizada, se le retirará la protección y se procederá a su aclimatación poniéndola en una exposición más iluminada. En pocas semanas habrán formado un buen cepellón y estarán listas para su trasplante a una maceta mayor o directamente en el jardín.

La técnica de esqueje nos permite clonar la planta, lo que significa que cada nueva planta posee las mismas características que la planta madre de la que procede.

Petunias colgantes

Cultivo de las petunias colgantes

El cultivo profesional de las petunias colgantes se realiza en viveros profesionales. Estos parten de esquejes que los plantan en macetas o tarrinas directamente. El sustrato utilizado es el desarrollado también por empresas fabricantes de sustratos profesionales que les son vendidos en sacos de 250 litros, big bag, etc. Su pH está alrededor del 6,5, una ligera fertilización de fondo y de constitución turbosa con buena aireación y capacidad de drenaje.

Estos esquejes se plantan normalmente varios por maceta o tarrina y también generalmente del mismo color, si bien hay partidas que se plantan diferentes variedades para conseguir combinaciones de colores finales concretas.

Tras su plantación, a las dos semanas se pueden pinzar para favorecer su brotación y cuando se juntan las brotaciones, se espacian las macetas o contenedores para evitar su espigado. A los dos meses aproximadamente de su plantación ya están listas para su venta. Durante este tiempo se han regado y abonado adecuadamente para que crezcan fuertes, vigorosas y sanas.

Plagas y enfermedades de las petunias colgantes

Como todas las petunias, su vigor y gran masa foliar propicia posibles ataques de plagas como por ejemplo la mosca blanca, el Trips, los pulgones, los ácaros y los minadores. En el caso de los ácaros le son favorables las condiciones de temperaturas altas y baja humedad, factores que se dan habitualmente en verano. Por otra parte, son fáciles de combatir mediante pulverizaciones con insecticidas sistémicos salvo los ácaros que se harán con acaricidas.

En cuanto a enfermedades, hay que prestar especialmente atención a las enfermedades de cuello y raíz como son la Rhizoctonia sp., el Pythium sp. y la Phytophthora sp. Para evitar en gran medida su aparición, es muy importante mantener el adecuado riego y fertilización, así como una buena ventilación.

Tipos de marihuana

Existe una amplia variedad de semillas de marihuana, una de las plantas que desde hace millones de años es usada en la medicina tradicional. En este artículo podrás conocer los tipos de marihuana más populares y las diferentes sensaciones que se producen con su consumo.

Existen muchos tipos de marihuana o Cannabis spp. dependiendo de las semillas de las cuales se obtengan. Además de sus características genéticas sus diferencias también pueden estar influenciadas por las condiciones de cultivo ya que factores como la cantidad de luz que tenga la planta, la época del año en que se obtiene o el tipo de flor que tenga aportan variantes a tener en cuenta. Por ejemplo, la variedad de semillas autoflorecientes Afgan Kush Ryder es la más vendida del banco World of Seeds Autoflowering Collection, aunque dependiendo del uso que se le quiera dar a la planta, serán mejores unas semillas u otras.

El juego varietal de la marihuana está ligado principalmente a tres especies, todas ellas pertenecientes a la familia Cannabaceae: Cannabis sativa, Cannabis indica y Cannabis ruderalis. Veamos algunos aspectos diferenciales entre ellas.

Cannabis sativa

Las variedades procedentes de Cannabis sativa componen el tipo de marihuana más conocida y consumida. La especie es origina de países de clima tropical de Sudamérica y Asia. Se caracterizan por ser las más altas, por sus hojas con muchas puntas largas y afinadas, además de ser capaces de ser sembradas y cultivadas al aire libre.

Entre las sensaciones que produce la Cannabis sativa se puede mencionar su poder psicoactivo debido a que contiene delta-9-tetraidrocannabinol. Además, es un estimulante del apetito, energizante y hasta puede provocar euforia. En las peores situaciones puede generar alucinaciones y ser un desencadenante de alteraciones psicóticas.

Cannabis indica

Las variedades derivadas de la especie Cannabis indica se diferencia de la anterior porque no alcanza tanta altura, su tamaño es mediano y con hojas más anchas. Se pueden encontrar en su hábitat natural en países como la India o Pakistan.

Las variedades de esta especie de marihuana se emplean como tratamiento medicinal para paliar el dolor, como anticonvulsivo y relajante gracias a su alto contenido de cannabidiol. Su consumo produce una sensación de relajación, efecto narcótico y no producen euforia ni excitación como la anterior.

Cannabis ruderalis

Las variedades pertenecientes a la Cannabis ruderalis se caracteriza por su tamaño más pequeño que las anteriores y porque no tiende a florecer. Es una especie que se utiliza mucho para mediante híbridaciones crear nuevas variedades. La Cannabis ruderalis produce una sensación relajante y por ello se emplea en los tratamientos medicinales, gracias a su baja concentración de cannabinoides.

Como hemos adelantado, estas tres especies componen los tipos base de marihuana más conocidos, pero lo destacable está en sus variedades híbridas propias o interespecíficas.

Las variedades de marihuana son obtenidas mediante hibridaciones en la que han trabajado genetistas especializados o de forma natural, ya sea por hibridaciones expontáneas o simplemente fruto de una evolución por factores como la adaptación a condiciones climáticas creando nuevos tipos que tienen nuevos efectos, tal es el caso de la marihuana tipo morada o azulada y la marihuana tipo autofloreciente.

No pasarán muchos años para que podamos encontrar las semillas de marihuana en cualquier catálogo y de esta forma, aprovechar sus propiedades medicinales.

Aumenta la recogida de envases agrícolas

Con las nuevas incorporaciones de empresas fabricantes de fertilizantes, agronutrientes especiales, bioestimulantes agrícolas, microorganismos para el suelo y fauna auxiliar para cultivos ecológicos o lucha integrada en AEVAE, se aumenta notablemente la recogida de envases agrícolas y con ello la retirada de envases plásticos del sector para su reciclado y darles una nueva vida.

Las incorporaciones de fabricantes de productos agronutricionales durante este último ejercicio anual son:

  • Delbon
  • Viagro
  • Orgafym
  • SQM Iberian
  • Vellsam Materias Bioactivas S.L.
  • DELSO Fertilizantes Holding S.L.
  • Tecnologías Avanzadas Agrícolas, S.L.
  • FICO Grupo Ispemar S.L.
  • Fertinagro
  • Asfertglobal
  • Crop Solutions S.L.
  • Novasys Pharma S.L.
  • MAFA Bioscience S.A.
  • Bionutrición Vegetal

La incorporación de estas 14 nuevas empresas es uno de los indicadores que constatan el avance imparable de AEVAE (Asociación Española para la Valorización de Envases). Esta Asociación es un Sistema Colectivo de Responsabilidad Ampliada del Productor (SCRAP) para fabricantes, envasadores y distribuidores de productos de uso agrícola profesional, que garantiza la recogida y la trazabilidad para la correcta valorización de los residuos de envases agrarios.

Sin duda, aunque muchas voces se empeñen en decir lo contrario, las empresas fabricantes de fertilizantes, agronutrientes especiales, bioestimulantes agrícolas, microorganismos para el suelo, etc. demuestran a la sociedad con su adhesión en AEVAE su compromiso inequívoco con el respeto por el medio ambiente y la economía circular, a la vez que participan en ayudar a los agricultores a formar parte de esta cultura garantista de respeto por el bienestar de las futuras generaciones.

¿Y cómo ayudan a los agricultores? La respuesta es sencilla aunque cargada de esfuerzo y simbolismo. Estas empresas fabricantes por una parte muestran su sensibilidad por contribuir en el avance de una agricultura moderna y por otra el apoyo que con su adhesión en AEVAE dan a sus clientes ya que les permiten la recogida de sus envases agrarios una vez utilizados sin un coste alguno para ellos.

Recordemos que una vez depositados estos envases agrícolas en los Punto AEVAE, son recogidos periódicamente por la red logística de esta Asociación para gestionarlos de forma correcta una vez finalizada su función y darles una nueva vida.

Multiplicación de las rosas

Todo apasionado por las rosas desea tener una amplia colección de todas y cada una de las especies; Rosales antiguos, Híbrido de Té, Polyantha, Paisajísticos, etc.

Podemos comprar todo tipo de rosales para nuestro jardín en los centros de jardinería o quizás podemos hacer lo que más estimula al apasionado, multiplicar por nosotros mismos e intercambiar especies con otros coleccionistas.

Hay distintas técnicas de multiplicación que vamos a ir viendo una a una a lo largo de estos artículos.

Multiplicación de las rosas por esquejes

Es una de las propagaciones vegetativas. Consiste en la obtención de un nuevo ejemplar a partir de una rama de la planta madre.

Dependiendo de la época en que se haga la reproducción, se denominará de “madera tierna” si es entre los meses de primavera o de “madera dura” si se realizan en el otoño. En ambos casos el procedimiento es muy similar:

    1. Seleccionar un tallo robusto, sano y no florido.
    2. Cortaremos unos 20 centímetros de tallo, haciendo un corte oblicuo en la parte superior de forma que evitemos el encharcamiento de agua en caso de lluvias, el agua correrá por el corte.
    3. Se retiran todas las hojas del tallo excepto las dos finales, evitando dañar las yemas.
    4. Colocaremos en un contenedor adecuado una base de arcilla porosa o guijarros para el drenaje, una tierra especial para enraizamiento que podemos adquirir en nuestro centro de jardinería o podemos hacer nosotros la mezcla con una porción en partes iguales de arena, turba y tierra de buena calidad.
    5. Tras humedecer el tallo en agua o en agua mezclada con una solución de hormona de enraizamiento, se entierra en nuestro contenedor a pocos centímetros de profundidad y regaremos cuidadosamente.

Multiplicación por de las rosas esquejes

Este método que podríamos denominar “estándar” tiene algunas variaciones que también me gustaría comentar:

  • Colocar canela en polvo en el orificio que hagamos para enterrar el esqueje en el contenedor. Es un método que nos enseñó nuestra amiga Sol Barroso del grupo de Facebook PASION POR LAS ROSAS y que ha dado muy buenos resultados.
  • Colocar una bolsa de plástico sobre el contenedor una vez sembrado y regado el esqueje para mantener la humedad.
  • Colocar el esqueje en una patata, perforando esta con el mismo tallo. La patata se entierra junto al esqueje y le servirá de catalizador de enraizamiento.

Una vez realizada la operación con cualquiera de sus vertientes o siguiendo el método que hemos denominado “estándar” en un mes y medio podremos ver los primeros brotes y el esqueje enraizado podrá ser trasladado a una maceta llena de turba húmeda.

Podemos fracasar en caso de darse una infección o falta de humedad. Por ello debemos trabajar con ambientes limpios y resulta útil también el uso de fungicidas durante algunas semanas.

Las rosas obtenidas a partir de esta forma de reproducción serán idénticas a la planta madre.

Multiplicación de las rosas por acodo aéreo o terrestre

Este método consiste en la reproducción por enraizamiento de una parte del rosal ya sea en la tierra o a distancia de ella.

Por acodo terrestre

Necesitaremos una rama larga y flexible para realizar este tipo de reproducción, por ello no es posible realizarlo en todas las especies de rosales.

Escogeremos una rama robusta y sana y la enterraremos en una porción de tierra. Hemos de procurar que haya una o dos yemas bajo la tierra para favorecer el enraizamiento.

Para que la rama no se salga de la tierra nos podemos ayudar de una estaca o una barrita de hierro. No podemos dejar así mismo que la zona donde se produzca el entierro de la rama pierda consistencia por lo que la hemos de mantener húmeda.

Multiplicación por de las rosas esquejes

El acodo lo realizaremos en primavera, cuando la planta está con mayor vigor y si todo ocurre con normalidad obtendremos raíces en el otoño siguiente, momento en el cual separaremos el acodo de la planta madre.

En ese momento, podremos trasplantar el acodo, unido a la porción de tierra donde ha enraizado a una nueva ubicación.

Por acodo aéreo

Al igual que el acodo terrestre, realizaremos este método de reproducción en la primavera. Es ideal para rosales que no dispongan de ramas flexibles y largas, realizándolo en porciones de ramas colocadas a bastante distancia del suelo.

También en este método podemos realizar dos formas diferentes dependiendo del porta-acodos que utilicemos, una bolsita de plástico negro o un recipiente de polietileno que acogerán la rama que enraizará.

Escogeremos una rama robusta, sana y a ser posible del mismo año. Una vez decidamos cual será nuestra rama, se le practicará una incisión justo por debajo de una yema y se puede impregnar con solución para enraizamiento.

A continuación, colocaremos la bolsa de plástico negro alrededor de la parte de la rama con la incisión y cerraremos mediante una gomita o una cuerda la parte inferior de la bolsa y la llenaremos con una tierra ligera, mezclada con musgo o turba. Una vez llena la bolsa y siempre dejando dentro la zona que queremos acodar, cerraremos la parte superior de la misma forma, no sin antes haber humedecido la tierra con agua.

Transcurridos unos dos meses y siempre que veamos que la rama está comenzando a brotar, podemos retirar la bolsa y proceder a cortar la rama por debajo de las nuevas raíces. Este tallo lo podemos trasplantar directamente a una maceta con tierra húmeda.

El procedimiento es el mismo si en lugar de bolsa de plástico utilizamos una botella de plástico transparente cortada por la parte superior y por la parte lateral para encajar la rama. En este caso podremos ver la producción de raíces a través de la botella.

Multiplicación por de las rosas esquejes

En ambos casos, conseguiremos un rosal idéntico genéticamente a la planta madre.

En el próximo artículo veremos como podemos crear nuestra propia rosa a partir de las que tenemos en nuestro jardín.

Carlos Rivero Ramos: Pasión por las rosas

Carlos Rivero Ramos

Autor del artículo: Carlos Rivero Ramos, al margen de su actividad profesional tiene entre sus pasiones las de viajar, escribir,… pero destaca la de su pasión por el mundo de las rosas.

Carlos encuentra en la floricultura y en especial en el cultivo de las rosas un amplio abanico de posibilidades a todos los niveles. Es un alivio al estrés y saca el poeta que hay en él, además de incitarle a coleccionarlas de forma casi compulsiva. Destaca su colección de diferentes especies de rosas y el que varias de ellas han sido premiadas en el Concurso Nacional de las Rosas en 2018 y 2019.

» Autor: Carlos Rivero
» Canal Facebook: Pasión por las rosas

Vivir con flores

Arreglos y ramos de flores para el hogar

Vivir con flores, es un libro editado por Blume, que te ayudará a llenar tu casa de flores de la mano de la reconocida florista Rowan Blossom.

En él aprenderás los conceptos básicos que todo florista en ciernes debe saber: por ejemplo, qué herramientas vas a necesitar, cómo acondicionar las flores y cómo sacar el máximo partido de cada estación.

Con Vivir con Flores podrás crear obras maestras florales para cada ocasión, desde ramos y ramilletes hasta arcadas florales y arañas de flores.

Aunque este no es un libro de referencia sobre todo lo que necesita saber sobre floristería, sí que te transmitirá el entusiasmo de la autora al trabajar con flores. Ella comparte con los lectores algunas de las ideas y consejos que ha ido aprendiendo en su viaje por el mundo de la floristería, que te ayudarán a tener confianza y a atreverse con nuevas ideas.

Vivir con flores de Rowan Blossom

El amor de Rowan hacia todo lo bohemio, vintage y natural, y su enfoque práctico, convierten a este libro en la guía perfecta para dar los primeros pasos en el mundo de los arreglos florales.

Sobre la autora

Rowan Blossom, florista afincada en Notting Hill, es especialista en creaciones imaginativas y naturales con flores de temporada. Entre sus clientes figuran Matches Fashion, Bloom & Wild y Topshop.

“Muy pronto, la oleada de flores empieza a caer y a aletear y balilar en el aire. Y, de repente, casi de la noche a la mañana, las flores se desintegran e inundan las calles de un confeti bucólico. La naturaleza fugaz de la estación de las flores es un recordatorio de que debemos apreciar el presente. Para mí estas son las principales razones por las que las flores son tan importantes en nuestras vidas cotidianas: brindan esperanza, nos aportan alegría y nos obligan a vivir en el momento presente”.

Vivir con flores de Rowan Blossom

Características

ISBN: 978-84-17757-96-0
Páginas: 179.
Dimensiones: 19 x 24,5 cm
Cartoné
PVP 22,90 €

Contenido:

  • El mundo de Rowan Blossom
  • Herramientas
  • Espuma floral
  • Recipientes
  • Acondicionamiento
  • Capítulo I: Para cada día
  • Capítulo II: Con invitados
  • Capítulo III: Regalar
  • Capítulo IV: Moda
  • Capítulo V: Festas
  • Para acabar

El enlace para su compra online aquí

Plagas y enfermedades del geranio

Con el nombre popular de geranios se reconocen a un amplio grupo de Pelargonium spp. que si bien el género es muy diverso y contiene más de 250 especies, sólo unas pocas gozan de gran popularidad ornamental como por ejemplo el tradicional geranio (Pelargonium zonalePelargonium hortorum), la murciana (Pelargonium peltatum), el geranio de pensamiento (Pelargonium grandiflorum), el geranio limón (Pelargonium crispum), etc. al que se le han sumado nuevas generaciones de híbridos como el Pelargonium interspecific, en este caso obtenido por la firma Syngenta.

Partiendo de esta base, al tratar las plagas y enfermedades del geranio, en este artículo lo hacemos bajo un esquema común y válido para todas estas especies. Previamente es justo reconocer que cuando se adquiere alguna de estas plantas en viveros, floristerías, centros de jardinería, grandes superficies, etc. son plantas sanas. Sus problemas fitosanitarios aparecen después ya sea por causas de una mala gestión de su cultivo en casa o por reinvasiones de patógenos de los jardines o campos colindantes.

También puede llamar la atención que en este artículo no hacemos referencia a productos fitosanitarios ni materias activas. Las razones son porque las administraciones públicas que los regulan están constantemente prohibiendo el uso de ciertos productos y materias activas hasta esa fecha de uso legal, así como que no todos los países comparten el mismo listado de productos legales para su utilización. Por lo tanto lo mejor es acudir con una muestra de la planta afectada al punto de venta y contar con el asesoramiento de un profesional.

Mariposa del geranio

Plagas del geranio

Entre las plagas más comunes del geranio se encuentran:

  • Cacyreus marshalli. Conocida como mariposa del geranio, polilla del geranio o mariposa africana es una de las plagas más importante y dañina a día de hoy en todo el arco mediterráneo y por ende en la Península Ibérica. Si no se controla adecuadamente puede provocar la muerte de numerosos ejemplares. Su presencia se puede detectar fácilmente cuando se observan agujeros en los tallos provocados por la oruga que se introducen en ellos. Estos daños internos provocan el debilitamiento de sus flores mustias y hojas que como consecuencia debilitan la planta hasta su muerte en casos severos de ataque. Sus orugas miden unos dos centímetros de longitud posee un color verdoso que va tornándose más oscuro a medida que se van haciendo adultas. Si se prevé su presencia es aconsejable actuar mediante tratamientos preventivos. Si aparece se combate mediante tratamientos de insecticidas sistémicos junto con la poda de los tallos infectados con la oruga dentro.
  • Tetranychus urticae. La popular araña roja siempre está al acecho con la llegada de las altas temperaturas y humedades relativas bajas, momento que coincide desde finales de primavera a principios de otoño. Son esas pequeñas arañitas de color rojo y de apenas 0,5 milímetros de tamaño. Se sitúan sobre el envés de las hojas y las dañan sin posibilidad de recuperación. Las podemos observar mediante una lupa o cuentahílos. Sus síntomas son el color plateado que cogen sus hojas como consecuencia del punteado sobre ella, fruto de las células vaciadas de sus jugos de los que se alimentan estas arañitas. También pueden aparecer unas ligeras y sutiles telas de araña cuando los ataques son severos. Se combaten con tratamientos a base de acaricidas, procurando mojar toda la planta, sobre todo el envés de sus hojas.
  • Pulgones. Bajo este nombre genérico se conocen a diferentes especies como por ejemplo el Myzus sp., Aphis sp., Brevicoryne sp., Machosiphum sp., Acyrthosiphon sp.,… Son insectos de unos 3 milímetros que se distribuyen por las zonas más tiernas de las plantas, provocando hojas enrolladas y pegajosas debido a la melaza que segregan. Esta melaza es un asiento ideal para el hongo Negrilla (Fumaginas sp.), un problema añadido a los daños que por sí ocasionan ellos. Otro daño indirecto pero de gran importancia es su capacidad de transmitir virosis entre plantas afectadas y plantas sanas. Por todo ello es muy importante su tratamiento mediante insecticidas sistémicos.
  • Bemisia tabaco. Es la temida mosca blanca debido a su dificultad de control si ya se ha establecido en la planta. Se reconocen fácilmente por ser moscas blancas de apenas tres milímetros de tamaño que, al igual que sucede con los pulgones y las cochinillas, clavan un pico en las hojas y chupan la savia, debilitando la planta a la vez que pueden propagar ciertas virosis. Para su desarrollo les favorece las temperaturas altas y el ambiente húmedo, por lo que desde mediados de primavera hasta principios de otoño pueden presentarse como plaga. Su tratamiento con insecticidas sistémicos.
  • Cochinillas. Sobre todo la cochinilla algodonosa, Planococcus citri y Dysmicoccus grassi, son las más populares. Estas se caracterizan por poseer una especie de escudo algodonoso protector, de distintos grosores y consistencias, según la especie de que se trate aunque el color suele ser blanco y de ahí su nombre de algodonosa. Como insectos chupadores también clavan su pico sobre los tiernos tallos e incluso nervios de las hojas y chupan la savia, provocando el debilitamiento de la planta. Su tratamiento es delicado por la coraza que los protege, siendo interesante realizar los tratamientos durante las primeras fases de invasión, cuando estos insectos aun no tienen bien desarrollada su protección algodonosa.
  • Pieris brassicae, Autographa gamma (plusia), etc. componen el grupo de orugas que devoran las hojas y capullos florales del Geranio. Al ser insectos con aparato bucal masticador crean sobre todo agujeros en el follaje. Su tratamiento puede ser con insecticidas de contacto o sistémicos, aplicándolos cuando veamos mariposas sobre el geranio, síntoma de que tras su puesta en pocos días aparecerán las primeras orugas.
  • Empoasca lybica. Es conocida como mosquito verde, un pequeño insecto chupador de unos tres milímetros de tamaño. En su ataque clavan el pico para absorber la savia de las hojas provocando una decoloración parecida a la de los ácaros. Se pueden tratar con los mismos productos que los pulgones.
  • Nematodos. Estos no se suelen ver porque al margen de su tamaño que no llegan ni al milímetro, trabajan en el sustrato atacando las raíces para alimentarse de sus jugos. Sus síntomas se suelen confundir con problemas derivados del exceso de agua, carencia de nutrientes, etc. Sí se pueden identificar como síntoma si se arranca la planta y se observa en sus raíces una especie de bultos, propios de exceso de tejido que la propia planta genera para aislarse de ellos.

Plantas de geranio

Enfermedades del geranio

Respecto a las enfermedades del geranio, se pueden presentar en cultivo:

  • Puccinia sp. Se conoce como roya y su presencia se ve mediantes pústulas de color oscuro que luego se tornan anaranjados en el envés de las hojas. Las hojas muy invadidas terminan secándose. Las plantas afectadas ya retiradas y afectadas es importante quemarlas para destruir sus esporas.
  • Botrytis cinerea. Es la popular botritis que se presenta especialmente en épocas de ambiente fresco y húmedo. Esta suele atacar tanto a hojas como capullos de flor, pudriendo las zonas atacadas y recubriéndolas con un moho gris oscuro. Al margen de los tratamientos mediante fungicidas específicos para su control, es importante evitar las heridas sobre la planta, así como colocar las macetas en un lugar ventilado.
  • Erysiphe spp. Conocido como Oidio es un hongo que cuando aparece es muy fácil de identificar. Este aparece como un polvo blanco o cenizo muy típico sobre el haz de las hojas principalmente. Las zonas afectadas se vuelven de color amarillento y terminan por secarse. El modo de control es mediante la aplicación de un fungicida específico, conocidos como antioidios, así como tras los tratamientos (pasados unos días) eliminar aquellas hojas o ramas fuertemente atacadas para que el geranio vuelva a brotar con un follaje sano. Como en el caso de la botritis, la ventilación ayuda a que no aparezca.
  • Alternaria spp. Se le conoce como Alternariosis y se reconoce cuando aparece sobre sus hojas, normalmente las más adultas y situadas en la parte media o baja del geranio, unas manchitas marrones de pocos milímetros de diámetro. Su tratamiento con fungicidas a base de cobre suele ser muy efectivo.
  • Gloeosporium pelargonii. Conocida como antracnosis aparece sobre sus hojas, brotes y capullos en forma de manchitas negruzcas o marrones que con el tiempo se agrandan y terminan marchitando las partes afectadas. Su tratamiento debe realizarse a la aparición de los primeros síntomas con fungicidas específicos, procurando mojar completamente la parte aérea de la planta.
  • Ascochyta spp. Se trata de otro hongo que también produce manchas redondeadas marrones con puntitos negros dentro, muy similares a la de la antracnosis. Como en su caso, también hay que tratar al geranio nada más se aprecien los primeros síntomas.
  • Pythium spp. Conocido como mal del pie es una enfermedad que ataca, como su nombre genérico nos deja adivinar, al cuello de la planta, pudriendo la parte afectada y con ello provocando la muerte de la planta. Suele aparecer cuando el geranio es joven y se da un exceso de agua en el sustrato. Se detecta con el oscurecimiento de cuello del tronco a nivel del suelo, en ocasiones acompañado de un ligero polvillo de color claro. Su tratamiento es mediante riego con un fungicida específico disuelto en el agua. Mantener el sustrato con humedad constante sin llegar al encharcamiento contribuye a que esta enfermedad no aparezca.

Plantas de geranio

Virosis del geranio

Las virosis del geranio están consideradas como sus principales enemigos a nivel de sanidad vegetal ya que una vez que aparecen son prácticamente imposibles de erradicar y por lo tanto la muerte de la planta está prácticamente asegurada. Su capacidad de infección a plantas sanas y cercanas también es otro de sus hándicap.

Bacteriosis del geranio

Xanthosoma pelargonii. Del género Xanthosoma sp. es la especie que los suele atacar. Le favorecen los ambientes calurosos y húmedos, presentándose en geranios tanto plantados en terrazas como en jardines. Su presencia se muestra mediante manchas necróticas en las hojas que terminan por ocasionar su secado y caída. Como en el caso de las virosis, una vez afectada la planta no tiene cura, y sí en cambio una capacidad de infestación muy elevada, por lo que se recomienda arrancar lo antes posible las plantas afectadas.

Fisiopatías del geranio

Se denominan fisiopatías del geranio a todos aquellos síntomas aparentemente asociados a problemas de sanidad, siendo en realidad, problemas ocasionados por una mala práctica agrícola. Por ejemplo:

  • Tallos con entrenudos largos y tiernos. Seguramente esté el geranio plantado en una zona con exceso de sombra. Otra causa puede ser que se le esté abonando con un fertilizante excesivamente rico en nitrógeno.
  • Escasa floración. Fruto de las mismas causas que el caso anterior.
  • Se pudren las raíces a los pocos días de su plantación. Puede ser causa de que el sustrato no sea el adecuado: poca aireación, escaso drenaje, acompañado de riegos frecuentes.
  • Hojas cloróticas. Suele ser un problema de exceso de carbonatos en el sustrato. Se corrige con aplicaciones de hierro quelatado disuelto en el agua de riego o en pulverización sobre las hojas.

También otras malas prácticas como una plantación muy densa, cultivarlas fuera de época, etc. pueden ser causas que afecten al buen crecimiento del geranio.

El cuidado de los Ficus en invierno

Durante el verano, como etapa más cálida del año, los Ficus experimentan su máximo desarrollo vegetativo. Con la entrada del otoño las temperaturas van bajando, los días acortando y paralelamente los Ficus se van aclimatando ralentizando su desarrollo para afrontar el invierno de la mejor manera posible.

Estos Ficus suelen, conforme se adentran en el otoño, reducir el tamaño de las hojas nuevas, la longitud de los entrenudos… así como recogiendo los elementos nutritivos útiles de las hojas viejas para guardarlos como reserva en las partes leñosas. Por ello vemos como algunas hojas adultas amarillean en la planta y al poco tiempo caen. Utilizando un símil, es como si la planta fuese “cerrando fábricas” que no van a ser rentables durante este tiempo para que el conjunto pueda sobrevivir mejor.

Es recomendable tener unas ideas generales para que las plantas pasen el período invernal de la mejor forma posible, con el fin de que a la llegada de la primavera, estas plantas comiencen de nuevo su desarrollo normal y así poder disfrutar de ellas como se merecen.

Para aclarar mejor estas ideas, debemos tener en cuenta que se nos pueden presentar dos grupos de situaciones claramente diferenciadas: Ficus situados en el interior de los hogares y Ficus establecidos al exterior de los mismos. Aunque en sí se trata de las mismas plantas, los definiremos como Ficus de interior al primer grupo y Ficus de exterior al segundo.

El cuidado de los Ficus de interior

Uno de los primeros temas que tenemos que tener presentes es que se trata de plantas que conviven bajo el mismo techo que sus propietarios y que por lo general suelen estar situadas en los salones de las casas, entradas de los hoteles, tiendas, etc. Por lo tanto, se da la circunstancia de que las plantas disfrutan de buena temperatura (suele haber calefacción de apoyo) mientras las personas se encuentran en dichos lugares. Pero también es cierto que cuando se cierran las tiendas o las personas se van a dormir y por lo tanto abandonan los salones de estar, suelen apagar la calefacción hasta el día siguiente, sin acordarse de que las plantas se quedan allí.

Temperatura: En la línea de lo expuesto, es recomendable mantener la temperatura de estas habitaciones donde se encuentren los Ficus algo más baja para el ahorro de calefacción pero sin que ello signifique un abandono del espacio y que las temperaturas no bajen por debajo de los 15ºC.

Humedad relativa: Con la calefacción, suele bajar más de lo razonable la humedad relativa, resecándose el ambiente más de lo aconsejable. Los Ficus ayudarán a contrarrestar esta deficiencia mediante la transpiración, aspecto que beneficia al bienestar del hogar. Pero también es recomendable colocar un pequeño recipiente, como por ejemplo una maceta decorativa (que las hay de muchas formas, colores y tamaños), con agua para que con su evaporación ayude también a la regulación del nivel de humedad relativa.

Ficus de interior

Riegos: Los riegos deben distanciarse lo más posible, dejando que la planta llegue a secar ligeramente el sustrato. Una humedad continuada puede favorecer, junto con bajas temperaturas, la aparición de problemas de raíz.

Fertilización: Lo ideal es que en cada riego se aporten abonos en los que haya más potasa que nitrógeno. En cuanto a la dosis de fertilización, ésta debe ser la más alta recomendada ya que al distanciar mucho los riegos las aportaciones serán muy de tarde en tarde.

Plagas y enfermedades: No se suelen presentar si se tienen los cuidados antes mencionados. Los Ficus suelen estar bastante inactivos durante el invierno.

Podas: No deben realizarse ningún tipo de podas ya que los Ficus aprovechan para pasar el invierno parte de las reservas acumuladas en sus tallos y hojas. Eliminar parte de las mismas es eliminar también parte de sus reservas y con ello dificultar la buena brotación en primavera.

El cuidado de los Ficus de exterior

Son Ficus situados en la terraza o en pleno jardín. Ellos, en solitario son quienes aguantarán las inclemencias del tiempo y también es por ello el que las principales medidas a tomar son de carácter preventivo. Su ubicación en el momento de su trasplante es decisiva.

Es importante realizar la plantación al exterior antes de la llegada del invierno. Como muy tarde, en fechas muy cercanas al comienzo de otoño. Así daremos la posibilidad de que el Ficus se adapte correctamente para soportar las inclemencias del invierno. Claro está, si éstas no son excesivamente adversas.

Temperatura: Como no podemos ejercer un control sobre ella, deberemos elegir cuidadosamente el lugar más idóneo para plantarlos, buscando siempre las zonas más cálidas del jardín y con la orientación más favorable. Evitaremos plantarlos en zonas con excesiva sombra, poco soleadas o con vientos canalizados desfavorables.

Si los Ficus se encuentran plantados en macetones que se puedan desplazar, siempre se podrán resguardar del exceso de frío en el caso de necesidad. En el caso de que no, sólo queda la recomendación de evitar sus plantaciones en zonas donde se sepa con exactitud que los inviernos siempre vienen acompañados de heladas, ya que las plantas no sobrevivirán.

Riegos: En invierno el terreno se suele secar de forma más lenta, la planta necesita menos agua puesto que transpira menos y las lluvias suelen ser más frecuentes que en verano. Por todo ello, los riegos dependerán mucho de la climatología y como norma general suelen ser pocos y muy de tarde en tarde. Bien es cierto que los Ficus ubicados en maceteros necesitaran más atención en el riego que los plantados en pleno jardín ya que el sistema radicular de los primeros está más limitado.

Fertilización: La técnica del abonado debe de aparecer al comienzo del otoño. Esta consistirá en ir cambiando el equilibrio de fertilización, pasando del nitrógeno como elemento nutritivo principal al potasio, que además debe ir acompañada de un buen nivel de fósforo. El motivo es que el nitrógeno es favorecedor del desarrollo foliar, ya no hace tanta falta puesto que la planta va a ir ralentizando su crecimiento. En cambio el fósforo, por su parte ayudará a estimular el desarrollo radicular y sobre todo el potasio aportará el fortalecimiento de los tejidos vegetales y con ello una mejor predisposición por parte de la planta para soportar el período invernal.

Plagas y enfermedades: No se suelen dar en estas fechas.

Podas: No son nada recomendables por las mismas razones comentadas en el caso de los de interior. Aquí, además se da la circunstancia que en el caso de producirse algunas pequeñas heladas en ramas, siempre aprovecharemos el comienzo de primavera para con la poda, sanear la planta y guiar así su brotación inicial de primavera.

Se puede dar el caso de que amarilleen algunas hojas, sobre todo las más adultas. Si éstas caen por sí solas… no pasa nada ya que obedece a una respuesta natural de la planta ya comentada en el anterior caso de los Ficus de interior. Pero si por el contrario, amarillean todas de golpe y éstas no se sueltan de la planta, estaremos frente a un caso de helada y quiere decir que esa planta o parte de ella se encuentra muerta. En cualquier caso, es recomendable esperarse a la llegada de la primavera para actuar, ya sea como poda parcial de saneamiento de la planta o como eliminación y sustitución de la misma.

Mantenimiento del estanque en invierno

El estanque es en síntesis un ecosistema vivo y como tal interactúa con el medioambiente para evolucionar y mantener su equilibrio. La variante natural se presenta cuando ante ‘un estanque es artificial en un jardín’ se incluyen en él especies de plantas, animales, etc. que proceden de otras zonas geográficas y por lo tanto ya no se encuentran en su hábitat natural. En estos casos sus responsables deben tomar medidas excepcionales y puntuales para que este se mantenga en buenas condiciones durante todo el año.

Uno de esos momentos es durante el mantenimiento del estanque en invierno. En la naturaleza es en esta época del año cuando el estanque aparentemente descansa,… porque la vida sigue su curso. En un estanque de jardín también es así y como hemos avanzando, casi con total seguridad tenemos en él especies foráneas. Por ello y aunque ahora tratamos su mantenimiento en invierno, algunas medidas ya las hemos debido tomar durante el otoño.

Un tema a tener muy claro es que no sólo los peces y plantas forman parte de los cuidados del estanque en invierno. También tendremos que prestar especial atención al agua como medio vital para los habitantes vegetales y animales del estanque. En este contexto, es importante mantener un constante control de la temperatura del agua durante el invierno, midiéndola periódicamente o cuando se considere que se dan las circunstancias de riesgo. Sólo así se puede anticipar a cualquier situación.

Mantenimiento de los peces del estanque en invierno

Mantenimiento de los peces del estanque en invierno

Para el cuidado de los peces en los estanques es importante conocer las características específicas de las especies que los pueblan, de forma que se puedan tomar las mejores medidas para su cuidado, en este caso durante el invierno.

Muchos de los peces entran en una especie de letargo durante el invierno y para actuar correctamente, desde mediados a finales de otoño ya debemos variar su dieta aportándoles menos proteínas y disminuyendo su ración diaria.

Otro aspecto que debemos tener en cuenta es que es recomendable que la profundidad del estanque sea superior al medio metro ya que cuando hace frío los peces tienden a situarse en el fondo por ser ahí la temperatura algo más cálida. De no ser así de profundo y si hace realmente frío en el jardín, lo aconsejable es coger y cambiar los peces a otro lugar más cálido y evitar el peligro de que se congelen. En cambio, si el estanque tiene una profundidad superior al medio metro y habitan especies de peces resistentes, estos con casi total seguridad podrán permanecer en el estanque todo el invierno, donde los veremos cómo pasarán estos fríos meses en el fondo.

Muchas especies de peces de estanque dejan de comer por debajo de los 7ºC. Así que hay que evitar su sobrealimentación. Por otra parte también disminuye la actividad de las bacterias en el agua del estanque, pudiendo apagar los equipos de filtrado. Como curiosidad, cuando la temperatura del agua es muy baja se puede observar como algunos peces salen ocasionalmente a la superficie. Pero esto es debido a que salen a por oxígeno y no a por alimento.

Si el frío es capaz de crear una capa de hielo, esta impedirá el intercambio de oxígeno con el agua del estanque. Una solución para mantener el equilibrio y correcta concentración de oxígeno para la fauna y flora del estanque es la incorporación de un aireador que pondremos en funcionamiento durante esos días.

En el caso de retirar temporalmente los peces del estanque para resguardarlos del frío, es importante tener en cuenta que por ejemplo las carpas doradas necesitan unos 12 litros de agua por cada 2,5 cm de su longitud, del mismo modo que los peces koi necesitan un mínimo de 20 litros por esta misma longitud. También hay que prestar atención a sus excrementos porque generan muchos, necesitando un potente sistema de filtrado que mueva el agua al menos dos veces al día.

Durante su traslado al acuario, se tendrá la precaución de no cambiar el agua en su totalidad, rellenando este con al menos el 50% de agua del estanque. Y lo mismo sucede con la temperatura que debe igualar y no meter los peces de golpe. Una vez en el acuario temporal se cambiará el agua parcialmente cada semana. Sin olvidarse de cuidar la iluminación del acuario temporal y la cantidad de alimentación porque un exceso de éstas harán que crezcan más rápidamente los residuos y las algas.

Mantenimiento de los equipos del estanque en invierno

Durante el invierno y debido a que muchos de ellos paralizamos su actividad, podemos aprovechar para hacer su mantenimiento, en especial los motores y boquillas de las fuentes. También es una época adecuada para realizar una limpieza a fondo del estanque e incluso hacer un cambio total o parcial de agua, retirando todos los residuos tanto del fondo como los que estén flotando o en suspensión.

Aunque hemos adelantado algo al respecto en el punto anterior, respecto a mantener el agua más cálida en el fondo del estanque, es recomendable apagar la bomba de circulación de agua para evitar que la más fría se mezcle con la más templada. En el caso de que se necesite que esté en funcionamiento se puede dirigir el flujo de agua en dirección horizontal cerca de la superficie. Otro elemento a tener en cuenta es que si existe la figura de una cascada en el estanque, será conveniente apagarla o dejarla en mínimos para que no mezcle las partes del agua cálidas con las frías.

También es recomendable cubrir la superficie del estanque con una red para evitar la caída de algunas hojas que aun puedan quedar en árboles de hoja caduca, a la vez que protegerá a los peces adormecidos de las garras de gatos y aves.

No debemos olvidar el hielo que se puede producir sobre su superficie. Este puede dañar la estructura del estanque al expandirse, sin olvidar que al aislar el agua del aire hace de lámina y evita que el metano que se produce de la descomposición de la materia orgánica enrarezca la calidad del agua. Una buena opción es colocar una o varias pelotas flotando sobre la superficie. Una vez congelada la superficie, se retiran quedando un hueco (se les puede tirar agua caliente sobre ellas para facilitar su retirada). Una vez creados los agujeros, se pueden cubrir con unos sacos de rafia (porosos) para evitar que se cierren inmediatamente.

Mantenimiento de las plantas del estanque en invierno

Mantenimiento de las plantas del estanque en invierno

Partiendo de la base que una gran mayoría de plantas para estanques pueden permanecer en él durante en invierno, tendremos que prestar atención a algunos cuidados para que el frío no les afecte de forma dañina.

Las plantas con riesgo de heladas que estén en maceta las pondremos a buen resguardo y siempre sumergidas en algún lugar más cálido e iluminado. Es fácil que alguna planta pierda su follaje como acción propia de su especie pero con la llegada de la primavera volverá a brotar con todo su esplendor.

Como ejemplo, si tenemos plantas de lirios en macetas lo ideal es que tras haberlas podado ubiquemos las macetas al fondo del estanque. Pero la poda también se debe realizar a las plantas de ribera que se sitúan alrededor del pequeño ecosistema de agua dulce, evitando de esta forma que sus hojas caídas o dañadas por el frío comprometan la calidad del agua.

En el caso de otras plantas como son las lechugas de agua o los jacintos, conviene retirarlos durante estos meses en los que las bombas y los filtros no están funcionando. Si hay plantas tropicales, la retirada y resguardo a zonas más protegidas es lo ideal.

Tras estos consejos, entendemos que estamos ante una pausa invernal como parte importante del ciclo de la naturaleza y aunque esta época no sea una de las más bellas, con el adecuado mantenimiento del estanque en invierno, este dará su fruto en primavera.

Las rosas

En este primer artículo, vamos a tener una pequeña historia de las rosas, clasificación, ayuda a la hora de ir de compras, un grupo de Facebook donde podrás compartir todas tus inquietudes y experiencias con otros 39.000 apasionados por esta flor y el evento anual al que no debes faltar. ¡Espero que lo disfrutes!

Introducción a la historia de las rosas

La rosa es probablemente la primera flor cultivada como motivo ornamental. Existen fósiles de hace miles de años en diferentes continentes y han sido esas primitivas rosas las que han dado lugar a todas las especies actuales.

Los primeros cultivos se remontan a los sumerios, es decir a más de 5000 años de antigüedad. Los chinos, extraían de sus pétalos esencias para crear perfumes, cosa que actualmente también es posible ver que se sigue haciendo entre los mejores perfumistas.

El arte de cultivar rosas es relativamente reciente, situado en Francia a través de Carlomagno, promoviendo el cultivo en los jardines de las villas y castillos. Como en otras grandes disciplinas, fueron los monjes en los monasterios quienes asumieron la tarea de estudiar las características de las rosas, así como la hibridación con lo que contribuyeron a la difusión de las especies.

En el Siglo XIX nacen los primeros jardines de rosales o rosaledas. En ellos las plantas no solo son objeto de cultivo para la recolección de las flores sino sobre todo para las exposiciones. En los últimos 150 años se han creado más de quince mil variedades que ya sea por su perfume, color o forma de flor, son muy cotizadas en algunos casos y populares en otros.

Flores de rosas rosa

Clasificación de las rosas

A pesar de que no hay una clasificación exacta de los diferentes rosales, vamos a intentar dar luz a las especies más habituales y utilizadas entre los cultivadores de rosas y por ende entre los vendedores.

En primer lugar, hemos de hacer dos grandes líneas: las rosas antiguas y las rosas modernas. Las antiguas, anteriores a 1867 fecha en la que se creó la primera híbrida de té, son rosales poco usuales pero muy fuertes y robustos. Existen 13 grupos habiendo multitud de nombres entre ellas, por poner un ejemplo hablaremos de Amelia, Bel Amour, Azélia, etc.

Con respecto a las rosas modernas son las más habituales en los centros de jardinería, si bien, hemos de quejarnos ya que no es mucha la variedad que existen en los Garden y entre 3 o 4 cultivadores copan todo el mercado.

Los rosales modernos se clasifican en:

  • Híbridos de Té. Grandes flores, dobles, elegantes y a menudo muy perfumadas (Existen miles de variedades en todo el mundo).
  • Floribunda. Son rosales que crecen en forma de mata, muy reflorescentes, con flores en ramilletes.
  • Polyantha. Flores de pequeñas dimensiones reunidas en ramilletes.
  • Arbustivos. Excelente para hacer crecer en parterres o en tutores ya que resultan muy decorativos.
  • Trepadores. Imprescindibles para cubrir pérgolas, paredes altas y vallas.
  • Miniatura. Poseen en tamaño reducido todas las propiedades de los rosales normales y son perfectos para cultivar en espacios reducidos o en macetas.

Compra de rosales

El problema que todo apasionado de las rosas encuentra a la hora de comprar un rosal, es la poca variedad que encontramos en los centros de jardinería, centros comerciales y floristerías en comparación con lo que puedes encontrar en los sitios webs.

Las rosas más habituales disponibles para la compra son híbridos de té de grandes reproductores en todos los colores imaginables:

  • Rojo (Mónica Bellucci, Black Baccara, etc.)
  • Blanco (Inés Sastre, Pau Casal, etc.)
  • Bicolor (Julio Iglesias, Adriana, etc.)

También podemos encontrar algunas variedades de Floribunda y miniatura.

En cuanto a la compra por Internet, es mucho más satisfactoria para el coleccionista de rosas dado que algunos ejemplares de especies únicas sólo los encontraras aquí. En diferentes tiendas online podemos tener a nuestra disposición las rosas más soñadas, en colores, formas y perfumes.

Los envíos de rosas son muy eficientes, llegan con gran puntualidad y las plantas están en perfecto estado.

Otro inconveniente que encontramos los apasionados por las rosas en los centros de jardinería y demás puntos de venta especializados es la falta de formación de las personas que nos atienden. Si bien es cierto que nos ayudan con productos para eliminar enfermedades, no están muy formados en cuanto a temas que son de mucho interés para el aficionado a las rosas, como por ejemplo sobre injertos, esquejes, reproducción por semillas, etc. Es mi intención ir compartiendo todos estos aspectos en sucesivos artículos de modo que llegues a ser un experto en poco tiempo.

Flor rosa bicolor

Pasión por las rosas

Por todo lo mencionado anteriormente, el 13 de mayo de 2018 nace el grupo de Facebook Pasión por las rosas, un grupo creado para compartir experiencias y conocimientos del mundo de las rosas.

En la actualidad cuenta con más de 39.000 “apasionados” como nos gusta llamarnos. Es un grupo global donde cada día se reciben fotos de rosas de cualquier parte del mundo. Tedo, Sol, Maria Reyes, Felipe, Nelson, Amparo y muchas personas más comparten cada día fotos y comentarios de sus rosales.

Además de ello, hay varios viveros situados en España, Argentina, Uruguay, México y Chile que ayudan con sus experiencias a resolver dudas a cualquiera que, por el grupo, o a nivel individual se la solicite. También hay profesionales que se dedican al mundo de la jardinería como Diego Celis, Pepe Plana o Susana Ferrer que se suman y nos ilustran con su experiencia.

Finalmente, la parte más interesante del grupo es compartir experiencias en todas aquellas inquietudes que se nos presenta, como la realización de reproducción por esquejes, semillas o injertos.

Exposición Nacional de Rosas

Todo ello nos sirve para cumplir un sueño, presentarnos a concursos con nuestras hermosas rosas y optar a ganar los premios tras un año de duro esfuerzo.

Como ejemplo, podemos citar el concurso que se celebra en la ciudad catalana de Sant Feliu de Llobregat. Desde hace más de 60 ediciones, año a año asistimos a esta exposición única y participamos en el concurso donde no cuenta tanto ganar premio, que también, sino la satisfacción de tener expuestas nuestras rosas para deleite de todos.

Carlos Rivero Ramos: Pasión por las rosas

Carlos Rivero Ramos

Autor del artículo: Carlos Rivero Ramos, al margen de su actividad profesional tiene entre sus pasiones las de viajar, escribir,… pero destaca la de su pasión por el mundo de las rosas.

Carlos encuentra en la floricultura y en especial en el cultivo de las rosas un amplio abanico de posibilidades a todos los niveles. Es un alivio al estrés y saca el poeta que hay en él, además de incitarle a coleccionarlas de forma casi compulsiva. Destaca su colección de diferentes especies de rosas y el que varias de ellas han sido premiadas en el Concurso Nacional de las Rosas en 2018 y 2019.

» Autor: Carlos Rivero
» Canal Facebook: Pasión por las rosas
» Exposición Nacional de Rosas: www.amicsdelesroses.cat

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies