Los abetos de Navidad naturales son árboles vivos, generalmente de las especies Picea o Abies, cultivados específicamente para su uso como decoración navideña. Los hay también artificiales, pero en este artículo nos centraremos en los naturales.
Estos abetos son seleccionados y plantados en viveros especializados, donde crecen bajo condiciones controladas para garantizar una estética final ideal y adecuada resistencia para soportar el traslado y uso en interiores durante las fiestas.
Aunque hay opiniones contrarias, realmente son una opción ecológica, ya que, en comparación con los árboles de plástico, tienen un ciclo de vida que ayuda a capturar dióxido de carbono y se pueden compostar, e incluso algunos de ellos, reutilizar después de su uso. Además, son plantaciones realizadas para tal fin, por lo que no se afecta con entornos boscosos naturales.
Especies de abetos navideños cultivados en Europa y España.
En Europa, las especies de abetos de Navidad más cultivadas incluyen a las de:
- Abies nordmanniana (Abeto del Cáucaso o de Normandía). Es Originario del Cáucaso, es muy valorado en Europa por su gran resistencia a la caída de hojas y su tono verde oscuro brillante. Sus ramas robustas y simétricas lo convierten en una opción duradera y de fácil decoración.
- Picea abies (Pícea común o abeto rojo). Es una especie tradicional en Europa del Norte y Central, reconocible por su aroma característico. Aunque sus agujas pueden caer más rápido, sigue siendo popular por su aspecto frondoso.
- Abies pinsapo (Abeto de España). Especie autóctona española, especialmente cultivada en el sur. Es un árbol resistente y de porte elegante y tupido, aunque se cultiva en menor cantidad. Sus hojas, aciculares acabadas en punta, son de color verde muy brillante y su corteza es rojiza.
- Picea pungens (Abeto azul o Pícea de Colorado). Se reconoce por su tono azulado y su gran resistencia en climas fríos. Es una opción decorativa menos común pero apreciada por su estética distintiva.
- Picea pungens “Hoopsii”. Se trata de un clon seleccionado que se diferencia por su forma más regular y color azul muy intenso. Sus acículas tienen reflejos blancos.
- Picea omorika (Abeto de Serbia). Posee un porte piramidal aunque algo estrecho. Destaca su follaje de color verde con reveses más claros y sus acículas muestran una tendencia a caer. Sus ramas crecen en forma llorona.
En España, el Abeto de Nordmann y el Pícea común, son los más comercializados en el ámbito navideño, ya que se adaptan mejor a la demanda del mercado por sus características de conservación y estética.
Ventajas de los abetos naturales para Navidad frente a los artificiales.
Aunque nos centramos en los abetos naturales de Navidad, exponemos las ventajas de estos frente a los sintéticos de plástico u otros materiales, en todos los casos, llamados abetos artificiales.
Por una parte, está su positivo impacto ecológico, porque los abetos naturales ayudan a mitigar el cambio climático, ya que durante su crecimiento capturan CO₂. Después de las fiestas, pueden ser compostados o reciclados, a diferencia de los sintéticos, cuya producción y desecho generan residuos de plástico y liberan compuestos dañinos.
Están los factores de calidad estética y aroma. Los abetos naturales aportan un aroma característico que se asocia con la Navidad, creando una atmósfera auténtica. Además, su apariencia natural añade un toque elegante y tradicional, difícil de imitar con materiales sintéticos.
Y el de sostenibilidad y apoyo a la economía rural, porque para su cultivo generan empleo en el sector agrícola, especialmente en zonas rurales, contribuyendo a la sostenibilidad económica y social de estas áreas.
Consejos de compra de abetos naturales de Navidad para el consumidor final.
Unos consejos de compra de abetos naturales de Navidad para el consumidor final pueden ser:
- Verificar el estado del árbol, asegurándose de que el abeto esté fresco y que sus agujas se mantengan firmes al tocarlas. Un árbol fresco se reconoce porque sus ramas son flexibles y desprenden un aroma fresco y natural.
- Elegir el tamaño adecuado. Optar por un abeto que se ajuste al espacio disponible en casa, teniendo en cuenta que debe mantenerse alejado de fuentes de calor para evitar su deshidratación.
- Y es recomendable preguntar por la procedencia. Los consumidores pueden optar por abetos cultivados localmente para reducir la huella de carbono asociada al transporte y garantizar que cumplan con las regulaciones fitosanitarias y de sostenibilidad.
Los cuidados del abeto natural de Navidad en casa.
Respecto a los cuidados del abeto una vez en casa, uno de ellos es elegir su ubicación, con el fin de mantenerlo en un lugar fresco y alejado del calor. Es importante colocar el abeto en un sitio alejado de radiadores o estufas. El calor excesivo provoca la pérdida rápida de las agujas y reduce su frescura.
Debemos mantenerle con una hidratación adecuada. Se recomienda añadir agua fresca regularmente para que el árbol se conserve mejor y mantenga su color y aroma.
Está la posibilidad de considerar opciones de reciclaje. Al finalizar la Navidad, es ideal aprovechar los servicios de recogida de árboles para compostaje o triturado, que permiten reincorporar el abeto a la cadena natural y evitar que termine en vertederos.
Si está enraizado, o bien se mantiene en el mismo contenedor para el año siguiente, trasplantarlo a una maceta ligeramente superior si se ve que lo necesita, o plantarlo directamente sobre el terreno en un jardín. En este último caso, hay que tener presente que estamos ante un abeto muy joven, por lo que debemos tener en cuenta el espacio que necesitará en unos años.
Formatos de venta de abetos de Navidad naturales.
En el mercado se pueden encontrar diferentes formatos de abetos naturales para su venta según su forma de cultivo.
Está el llamado de abetos de copas, que consiste en la parte aérea simplemente, ya que carecen de raíces. Tiene la ventaja de ser más livianos durante el transporte al carecer de cepellón. Por otra parte, su mantenimiento es sencillo porque es una planta que. Como pasa con los ramos de flores, pasados un tiempo hay que deshacernos de ellos. Esto implica que no hace falta regarlos ni nada. Simplemente, disfrutarlos durante el periodo navideño.
Por otra parte, están los llamados abetos semienraizados. Estos están cultivados en el campo sobre el terreno y se arrancan con un pequeño cepellón y trasplantan a una maceta. Normalmente, esta operación se realiza un año antes de que se pongan a la venta, dándole tiempo a que vuelva a enraizar en el sustrato de la maceta o contenedor. Estos suelen sobrevivir después del periodo navideño.
Y por último los denominados abetos enraizados, siendo aquellos que son cultivados durante todo su ciclo en maceta. Son plantas bien enraizadas y después, se pueden trasplantar con éxito en el jardín en cualquier momento.